^{Creada por @maelichb y editada por @mavibauza}

Sueños

Sentada en el césped del parque esta una linda señora blanca, delgada, de largo cabello negro, embarazada, cerca de ella unos niños jugando. Su padre se acerca a la señora y ambos se alejan de los niños. Melanie juega con los niños mientras ambos adultos conversan. La señora va hasta donde los niños.
Esta colocando una cadena a Melanie. Melanie se va de la mano de su papá y los niños en las manos de la sra en direcciones opuestas.

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Mientras se alejan Melanie siente como la ansiedad que siente la señora que se aleja y su respiración se siente entrecortada, le falta el aire.

Melanie despierta sobresaltada al sentir una presencia que le susurra unas palabras que no logra entender. Ya esta saliendo el sol, se queda semiacostada pero con la cara apoyada en la ventana viendo el jardín. A lo lejos ve a alguien caminando, cuando mira mejor es el Sr Santiago. Se veía muy lindo, recordó lo que le dijo Sofía, y la verdad era atrayente. Sin embargo su vista cambió de la nada cuando recordó a Miguel, recordó sus besos, luego su pensamiento salto a Santiago y pensó que entre ellos había algo de parecido, aún sumida en su pensamiento. Melanie sintió que alguien la veía, y si era cierto, a lo lejos la estaba viendo Santiago. Y cuando ella lo vio, él la saludo con la mano.

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Melanie no había notado que a su espalda estaba Sofía, quien también llevaba rato viéndolos.

—¿Es lindo verdad? Mi padre es muy cariñoso, algo solitario y reservado con sus cosas, pero a pesar de eso es muy divertido, honesto y abocado a su familia, también es muy respetuoso— dice Sofía con admiración.

—Sí Sofía, es muy lindo.— Melanie lo dice porque reconoce la mirada de su amiga, es la misma que ella pone cuando habla de su papá, al cual extrañaba mucho, sobretodo desde que llegó a ese pueblo. A veces por más distraída que estuviera sentía que necesitaba su protección.

Desayunando

Están en la mesa del jardín. Listos para desayunar.

—¿Y mi hermano?— dice Sofía con cara de fastidio

—Estoy aquí hermanita— dice Alejandro con tono chistoso, aunque él sabía que estaba preguntando por Miguel.

—Hablo de Miguel, anoche vino directo acá, pensé que desayunaríamos todos juntos.— dice Sofía con resignación.

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—Ya sabes como son las cosas mi niña, si no es uno, es el otro— dice Leticia mientras va arreglando la mesa, junto con los chicos, Alicia y Alexa.

—Buenos días linda familia— dice Santiago quien llega a la mesa con una cesta de frutas, jugo de fresa y unas flores, da un beso a la frente a todos los que están allí presente, cuando va a besar a Melanie, ella muerde sus labios, recordando lo que le había dicho Sofía.

Solo Santiago lo nota, y sintió algo de esperanzas.

Al terminar de desayunar, Melanie va hacia uno de las fuentes, había visto el jardín a lo lejos, pero no se acercaría a el, no cometería el mismo error que en la casa de la ciudad, y recordó lo que había dicho Miguel sobre su futuro Novio y el jardín. A ella se acerca Santiago.

Historias del Pasado.

—¿Te gustaría verlo?— Le pregunta Santiago que se acerca al lado de ella.

Melanie voltea —Sr Santiago— dice algo sorprendida

—Sin el Sr, por favor— dice Santiago con una sonrisa.

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—Si, me gustaría verlo Santiago, ¿Es más grande que el de su casa en la ciudad?, ¿Es de su esposa, verdad?— pregunta Melanie con curiosidad.

—Si, es mas grande, sí es de mi esposa, y de su hermana, ya la conociste, Alexa, esta casa es de ellas, ellas crearon ese jardín junto con su padre, el era agricultor y ellas querían un lugar donde jugar y crearon como un pueblo en miniatura, así empezó todo, así que entre los tres hicieron un pequeñito pueblo con bonsais, caminerias, casitas, es mas bien un jardín de juego. Una vez cuando era niño mi padre me trajo aca para hacer negocios, quería un nuevo proveedor, y la verdad esta hacienda era la mejor opción, yo no quería venir, pero el Sr Antonio Ordaz era un hombre familiar, mi padre no, pero quería causar una buena impresión. Así que nos trajo a mamá y a mi, mi mamá creyó que sería una oportunidad para una reconciliación familiar, pero yo no lo ponía nada fácil, estaba muy molesto con mi papá, el cual casi no pasaba tiempo con nosotros.— Santiago había comenzado a contar su historia.

Melanie escuchaba muy atenta y no dejaba de verlo mientras el continuaba hablando.

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—Recuerdo que la Sra Leticia vivía en una de las casas mas alejadas de la gran casa, unas pequeñas casas muy lindas, ellas nos recibieron y nos llevaron a aquella casa— Señalo una casa que estaba después de la gran casa donde se quedaban y continúo diciendo —Allí era donde vivía antes la familia Ordaz, justo en esa casa fue que nos quedamos. La gran casa la estaban terminando de construir, José Ordaz y su esposa la Sra. Ricarda se quedarían allí, ellos son los abuelos de Alexa y Alejandra y la otra casa sería de Antonio Ordaz y su esposa Emilia junto con sus hijas, Alejandra y Alexa—

—Tardé mucho tiempo en conocer a sus hijas, solo conocía a una, a Alejandra a pocos días; en cambio a Alexa tarde casi tres meses en conocerla, bueno...— Santiago se echa a reír —eso creo yo, aun no estoy muy seguro de eso, a quien conocí primero. ¿Sofía te ha dicho que Alejandra y Alexa son gemelas idénticas?—

—No, se parecen pero... ¿su cabello?—

—Si, Alejandra siempre a inventado mucho, desde muy pequeñas, ella es muy audaz e inteligente, utilizaban plantas para tenerlo liso y negro, así como el tuyo. Al principio Alejandra lo hacia para diferenciarse de su hermana en algunas ocasiones, pero cuando yo las conocí, les gustaba parecerse la una a la otra, así podían hacer mas travesuras y pasarse la una por la otra, en vez de optar por su color natural, su cabello castaño casi rubio y ondulado, lo utilizaban liso y negro. Luego solo se agregaron unas mechas diferentes para el observador, aunque hubieron momentos en los que dude de esas mechas, no se si se las hacían diarias o por temporada. De un año para aca su cabello es diferente, ya viste a Alexa, es su cabello natural, nunca antes lo había visto, en serio, pero así es el cabello natural de ambas, y la verdad es que es hermoso, ¿Cierto?— Los ojos de Santiago estaban iluminado, se notaba cierto amor al hablar de aquellas mujeres.

Melanie veía a un hombre que hablaba de dos mujeres que al parecer conocía muy bien, pero al parecer no estaba seguro si las diferenciaba a una de la otra.

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—Por eso es que Sofía es rubia.— Dice Melanie, y sinceramente se parece mucho a su tía, debe ser igual a la Sra Alejandra su madre— dice Melanie preguntando cuando vería a la Sra Alejandra.

—Si, es quien se parece más a su madre, con el cabello castaño casi rubio, ah claro y a su tía, jaja— sonríe Santiago

—Tu cabello negro y liso me recuerda a ellas cuando tenían tu edad, sabes Alejandra solía usar cadenas de ojitos y tenía uno muy parecido al que tú tienes ahora, pero se perdió justo el día que nació Alejandro. Era su preferido, un ojo violeta dentro de una libélula de plata.— Vió una expresión muy triste en él, y Santiago para de hablar, había pasado de admiración, alegría, triste a incómodo.

Melanie continuaba en silencio, por muy amigas que fueran Sofía y ella, Sofía jamas le había hablado de esas cosas, o será que ella no sabía esos detalles.

—¿Quieres?— Melanie le ofreció unas uvas que tenia en su bolso, en realidad no sabía que hacer.

—Gracias, si quiero, ¿Quieres caminar un rato? Y te muestro algunos lugares de la hacienda.— Le pregunta Santiago luego de un suspiro relajador.

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—Si aunque después de medio día tengo algo que hacer— dice Melanie con una sonrisa, y apenada, no quería parecer descortés.

—Entonces empecemos a caminar, faltan dos horas y media para medio día, ¿almorzaran en la playa o aquí en casa?— pregunta Santiago.

—No se, Sofía me dijo que siempre almorzaban en la playa entre amigos, que va a estar su hermano Miguel— termina la frase con un suspiro y continua diciendo —el cual aún no he conocido— y Melanie se rie y se encoge de hombro.

Santiago la mira dulcemente —y lo más seguro es que tardes en conocerlo, es difícil de conocer y/o saber donde está, sobre todo estás fechas, no se por qué actúa así— dice Santiago calmado y viendo hacia el frente mientras caminan.

—¿Igual que su tía, tiene algún hermano gemelo por casualiad?— Pregunta Melanie un poco chistosa. Santiago se detiene y voltea a verla.

Continuará....