Autor	Rafael Sanzio
Fecha de ejecución	1509-1510
Técnica	Pintura al fresco
Estilo	Renacentista
Dimensiones	7,70 m x 5 m
Ubicación	Museos del Vaticano, Ciudad del Vaticano

Continuemos repasando expresiones artísticas del renacimiento, en este caso analizaremos “La escuela de Atenas”. Tengo que confesar que me emociona mucho hacerles una reseña sobre esta pintura, este trabajo nos aporta muchísima información en cada uno de los personajes representados y su entorno. Siempre trato de buscar imágenes que los lectores reconozcan rápidamente para que se sientan identificados y asi deseen aprender un poco más sobre ellas, creo que esta imagen cumplirá ese objetivo. Aunque tal vez no logren identificar a primera vista a algunos de los personajes (me ocurrió), estoy seguro que sus nombres si se les harán conocidos. Sin más nada que agregar, comencemos.

Contexto

“La Escuela de Atenas” no es solo una obra de arte maravillosa desde un punto de vista técnico sino que también es un mural histórico muy valioso en el que el autor busca entrelazar la Antigüedad clásica con el Renacimiento. Fue pintado por Rafael Sanzio entre 1509 y 1510 por encargo del Papa Julio II quien lo eligió para realizar este trabajo aconsejado por el arquitecto Bramante, en ese mismo momento Miguel Ángel se encontraba pintando la bóveda de la Capilla Sixtina.

Este fresco se encuentra en Sala de la Signatura del Vaticano junto a otros tres murales, cada mural tiene una temática específica: teología, poesía, derecho y filosofía. La Sala de la Signatura es una de las cuatro habitaciones que conforman lo que se conoce como Las estancias de Rafael, ubicadas en el segundo piso del Palacio Pontificio. Estos aposentos fueron elegidos por Julio II y sus sucesores como residencia personal. Su decoración fue iniciada por Rafael en 1508 y completada por sus discípulos en 1524 luego de que este falleciera en 1520.

Sin duda esta es una de las imágenes más representativas de la historia del arte y tal vez la obra más conocida del autor, Rafael buscaba representar los orígenes del pensamiento occidental surgido en la Antigua Grecia además de resaltar el valor de las siete artes liberales: gramática, aritmética, música, geometría, astronomía retórica y dialéctica.

Vista interior de la Sala de la Signatura

Análisis

Rafael se atreve a situar al mismo nivel a los artistas de su época con los padres de la filosofía, las matemáticas y la ciencia, es consciente de que el Renacimiento es el inicio de algo, por eso no solo le da magnificencia a estos antiguos pensadores, sino que llega considerarlos iguales a sus colegas del siglo XVI.

A esto se debe que la cara de Platón sea un retrato de Leonardo da Vinci, Heráclito es Miguel Ángel y Euclides o Arquímedes (no hay un consenso total sobre quienes son algunos personajes) es Bramante, mientras que el propio Rafael se autorretrata entre los astrólogos.

La Escuela de Atenas simboliza la Filosofía, la escena, dominada por la perspectiva, se sitúa en una especie de templo de la sabiduría de inspiración greco-romana que se parece mucho a la arquitectura de la Basílica de San Pedro de Bramante. Las esculturas que se alzan sobre el resto de los personajes son Apolo (el nicho de la izquierda) y Atenea (en el nicho de la derecha), Apolo es la alegoría de la armonía y la sobriedad, su imagen está basada en una escultura de Miguel Ángel llamada “El esclavo moribundo”, por su parte Atenea representa la sabiduría y la paz.

Platón y Aristóteles

Rafael optó por mostrar a los más influyentes sabios de la Antigüedad, encabezados por Platón y Aristóteles que se encuentran en el centro de la composición. Los libros que cada uno lleva consigo son un reflejo de su filosofía, Platón este sujeta el “Timeo”, libro donde se hace referencia a su famoso mundo de las ideas, mientras que Aristóteles sostiene su libro “Ética”, un texto formado por tratados filosóficos sobre la moral.

El lenguaje corporal de ambos es bastante importante, Platón señala con su dedo índice hacia arriba, representando la filosofía abstracta y teórica, mientras que Aristóteles mantiene su mano hacia abajo, simbolizando la filosofía natural y empírica, una forma no tan idealista de ver el mundo a diferencia de su maestro.

Fuente

A la izquierda del grupo central, encontramos de izquierda a derecha a Alejandro Magno, Esquines, Jenofonte y Sócrates respectivamente. Alejandro Magno fue rey de Macedonia y alumno de Aristóteles, se encuentra con indumentaria militar y escuchando a Sócrates. Sócrates fue el maestro de Platón y el padre de la mayéutica, junto con Aristóteles, son los representantes más importantes de la filosofía de la Antigua Grecia. Jenofonte fue un historiador, militar y filósofo famoso por relatar las guerras del Peloponeso, Esquines fue un político y orador ateniense.

En la esquina inferior izquierda se encuentra Zenón y a su lado Epicuro con una corona de hojas de parra. Este filósofo griego difundió que la felicidad se basaba en la búsqueda de los placeres de la mente. Un poco más a su derecha podemos ver a Pitágoras, Hipatia y Parménides. Pitágoras fue tal vez el más importante matemático griego, aparece con una pizarra explicando sus teoremas a un grupo de personas. Hipatia de Alejandría (la única figura femenina) es un retrato de Margherita Luti, amante de Rafael, fue una filósofa neoplatónica con conocimientos en geometría, álgebra y astronomía. Parménides, fue el fundador de la escuela Eleática, la única obra de el que aún perdura es un poema filosófico.

Moviéndonos hacia el centro encontramos a Heráclito, un filósofo melancólico que sufría constantemente por la incapacidad de las personas de ver “el mundo real”. Hacia la derecha, recostado sobre la escalera, está representado Diógenes el Cínico, . Diógenes se hizo famoso porquerenegaba las posesiones terrenales y las convenciones sociales. Un poco más abajo y a la derecha de Diógenes se halla Euclides (otros dicen que Arquímedes), matemático griego y discípulo de Sócrates, se encuentra exponiendo uno de sus principios geométricos.

Ptolomeo, Zoroastro y a la derecha autorretrato de Rafael

Junto a Euclides, encontramos a Ptolomeo, Zoroastro y el propio autorretrato de Rafael Sanzio que mira al espectador directamente. Ptolomeo fue un astrónomo y geógrafo, sostiene un globo terrestre, lo que hace alusión a su afirmación de que la Tierra era el centro del universo. A su lado se halla Zoroastro, famoso profeta persa.

Técnica

Este cuadro nos transmite una sensación de confianza y de armonía, esto se debe al brillo de los colores, la abundante luminosidad del entorno, la elegancia de la composición y a los gestos bastante naturales de las figuras.

Destaca en esta obra la perspectiva y profundidad lograda, Rafael aplica a la obra la perspectiva lineal, influencia recibida de Leonardo. Observamos que hay un solo punto de fuga que coincide con el centro del arco sobre Platón y Aristóteles lo que hace que toda mirada hacia la escena converja en el centro, hacia la figura de los dos filósofos.

Detalles de la arquitectura y punto de fuga

La luz proviene de la parte superior del cuadro, es una luz diáfana que ilumina toda la composición. Los contrastes de luces y sombras son equilibrados, utiliza el color para definir formas y volúmenes, técnica que también recuerda al "sfumato" Da Vinci.

La composición es simétrica, hallamos un gran eje axial entre Platón y Aristóteles que divide el cuadro en dos partes, y un eje horizontal que pasa por la cabeza de las personas que se encuentran sobre la escalera. La distribución de los grupos de personas se hace en base a estos ejes, cada grupo da una sensación de movimiento, las figuras se vinculan unas entre otras ofreciendo un magnifico ejemplo de armonía y elegancia.

Curiosidades

• Todas las grandes obras de Rafael eran el resultado de una planificación muy detallada. Muchos de sus dibujos preliminares fueron hechos de personajes reales para luego trabajar en las poses y expresiones de los modelos. Este artista realizaba diseños a escala real para entonces trasladarlos a la pared donde el fresco iba a aparecer.

• La firma del pintor se encuentra sobre el bordado del cuello de Euclides (o Arquímedes). Es algo insólito ya que en un encargo de la iglesia estaba prohibido que el artista dejara constancia de su autoría para evitar que cayera en el pecado del orgullo.

Imagenes extraidas de Wikipedia

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