La polémica opción de usar cannabis con fines terapéuticos.

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Saludos fraternos amigos esteemians, de vuelta con ustedes, luego de estar ausente por varios días, debido a estar varios días sin la señal de la Internet, pero lo importante es que estoy aquí de nuevo con el mejor ánimo de entregarles el mejor contenido. Esta vez, les compartiré sobre un tema que se encuentra en el tapete de las discusiones tanto en el argot medicinal como educativo con amplia resonancia en nuestra sociedad, se trata del uso del cannabis o marihuana con usos terapéuticos, los invito a continuar con la lectura y descubramos juntos cómo se maneja este polémico tema.

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En la sociedad convulsa en la que nos desarrollamos en la actualidad, donde vivimos el día a día, en una carrera a contra reloj, compitiendo con nuestros semejantes y con nosotros mismos, en la ciega búsqueda de una mejor calidad de vida, pero que irónicamente se nos vuelve en contra, cobrándonos un valor agregado llamado enfermedad, que genera como resultado muchas más dolencias que satisfacciones, con las que tenemos que lidiar a diario.
Tales dolencias, se han agudizado a la vanguardia del ritmo de la vida actual, con tanta gravedad, que ya la medicina convencional no ofrece un paliativo efectivo contra las enfermedades, que logre contrarrestar los efectos nocivos del dolor. Por lo que las personas se han visto en la necesidad de buscar alternativas fuera de la farmacología oficial a fin de encontrar alivio a enfermedades crónicas como el cáncer, Alzheimer, mal de párkinson, diabetes, entre muchas otras, que son un verdadero calvario para quienes la padecen.
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Hoy día, son innumerables las alternativas que ofrece la medicina herbaria para la cura de numerosas enfermedades para las que se utilizan una gran cantidad de especies vegetales, entre las que se encuentra el uso del cannabis.
El cannabis se refiere a lo que comúnmente se le llama marihuana, cuya denominación científica es Cannabis Sativa Rudelis de amplia distribución a nivel mundial. A medida que se fue extendiendo su uso, en las poblaciones rurales y luego en las ciudades, desde épocas muy antiguas (1956 aproximadamente, una vez que se descubrieron sus efectos alucinógenos en el sistema nervioso central, se le comenzó a llamar “María y Juana” por los soldados mexicanos de la ciudad de Oaxaca y las tribus indígenas Mayas y Aztecas, quienes a amanera de camuflar el sustantivo, comenzaron a llamarle con el término coloquial “MariJuana” o “Mariguana” como popularmente se le conoce hoy, debido a la connotación vandálica en la que ha desembocado esta planta, cuyo uso se hizo popular entre los forajidos, ladrones encerrados en las mazmorras donde purgaban su condena, quienes la hicieron su compañera consentida para evadirse de la dura realidad que padecían. De la misma manera incurrieron en su uso, las tropas militares, sobre todo los heridos de guerra, para aliviar los terribles dolores causados por el enemigo agresor.

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Este último dato informativo, fue el que logró dar un destello de esperanza a las personas que de alguna manera padecen los embates del dolor físico, encontrando en la polémica planta, un aliciente para el alivio de sus padecimientos, otorgándole a sus principios activos, una utilidad puramente medicinal.

Pero, cuidado con sus componentes psicoativos alucinógenos.

El común de la gente, utiliza los extractos básicos de la planta entera sin procesar para tratar los síntomas de ciertas enfermedades, que progresivamente fueron descubriendo sus efectos narcótico en el vegetal, conllevándolo a ser objeto de estudio de las sustancias químicas que contenía la planta por los reconocidos laboratorios científicos, como por ejemplo: “La administración de alimentos y medicamentos de Estados Unidos” (U.S. Food and Drug Administration, F.D.A), quien ha reconocido los efectos terapéuticos de una sustancia llamada cannabinoide, sustraída de la planta y ha aprobado dos medicamentos en forma de píldora. Los cannabinoides son sustancias químicas implícitas en la planta del cannabis asociadas con delta -9- Tetrahidrocannabinol (THC) y CBD (Cannabidiol químico de la Marihuana), que son los principales responsables de 100 sustancias más de cannabinoides, que ofrecen beneficios activos a la salud de pacientes con dolencias crónicas, y que la farmacopea oficial no ha logrado resolver.

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Sin embargo advierten que su uso indiscriminado causa daños en la salud, pues funge como un poderoso estimulante neurotransmisor, de efecto laxativo, causante de euforia con carácter de dependencia. Por lo que debe usarse con estricta vigilancia médica y previo control de la historia clínica del paciente.
En los Estados Unidos el Cannabis es una sustancia controlada y se necesita de un permiso especial para su uso, con previo informe médico, siendo pocos los estados que facilitan su consumo, entre los que se encuentran los Distritos de Columbia, Oregon, Montana, Colorado, Arkansas, Washington, principalmente.
Estudios preliminares han observado que los cannabinoides ayudan potencialmente a aliviar los efectos secundarios del cáncer, de manera menos agresiva que los opioides recetados, que muchas veces causan la muerte por sobredosis, pero aún faltan muchas investigaciones que sustenten estas afirmaciones y el apoyo de la ley por su parte.

Beneficios de los Cannabinoides para la medicina.

Reduce las inflamaciones producidas por la aparición de abscesos y tumores, en muchos casos la previene.
Bloquea la multiplicación de células malignas, obligando a las células cancerosas a morir de hambre y por consiguiente, el tumor se reduce.
Funciona como un agente antivirus, protegiendo el sistema inmunológico contra las infecciones.
Anticonvulsivo, lo que hace que muchos pacientes con epilepsia y enfermos con ataques de actividad eléctrica cerebral, como los enfermos de párkinson, lo prefieran a los fármacos tradicionales.
Alivia los espasmos musculares producidos por la esclerosis múltiple.
Funciona como un receptor positivo de estrógeno en el cáncer de mama.
Estimulante del apetito.
Previene náuseas y vómitos
Funcionan como agentes receptores en el sistema nervioso para inducir el sueño y estimular positivamente en el estado de ánimo y disminuye la ansiedad.

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Efectos secundarios del abuso medicinal del cannabis y cannabinoides.

Aumenta desproporcionadamente los latidos del corazón.
Presión arterial baja.
Enrojecimiento de los ojos.
Cambios bruscos de humor cuando desaparecen los efectos del medicamento.
Digestión lenta y tardanza en metabolizar los alimentos en los intestinos, ante la lenta producción de los ácidos gástricos.
Alucinaciones.
Paranoia
Dificultad para diferenciar lo real de lo no real.

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Bien amigos, como vemos el uso del cannabis con fines terapéuticos debe ser objeto de estudios más profundizados que permitan realizar ensayos más precisos para su uso, que no repercuta nocivamente en nuestra salud. Como todos los medicamentos, su administración y consumo debe ser supervisado y usado con austeridad. Esperemos que la literatura médica avance en sus investigaciones y nos mantenga informados al rspecto.

Espero haya sido de su agrado este artículo y agradezco el tiempo que le dedicaron para leerlo.

Infinitas Gracias