Fiorella y Adam — Capítulo 4.

in #spanish7 years ago (edited)

Saludos Steemians. Hoy les traigo el capítulo 4 de este relato que he titulado Fiorella y Adam sobre el amor de dos jovenes que buscan una mejor vida juntos. Espero que lean el primer, el segundo capítulo y tercer capítulo, y se adentren en esta fantástica historia. Para no hacer tan larga la presentación dejaré el link del capítulo 1, 2 y 3. En seguida el capítulo 4. ¡Disfrutalo!

Fiorella y Adam — Capítulo 1
Fiorella y Adam — Capítulo 2
Fiorella y Adam — Capítulo 3 | La carta de Adam

Fuente



Una semana después de la carta, Fiorella recibió la noticia del escape de Adam del castillo. Dos guardias fueron encontrados inconscientes en uno de los pasillos. Adam se escabulló a los aposentos de Rea y se llevó el cadáver de Rose. Fiorella se enteró de todo luego de hacerse amiga de Tim, que le comentaba todo lo que ocurría fuera de su estancia. Tim también le comentó que por orden de Rea se le había doblado la seguridad.

–Hasta me revisan el carrito de la comida, princesa –Le dijo.

Tim le había tomado aprecio a su princesa, y sentía ternura ante su amor.

–También estuve enamorado cuando tenía su edad, princesa –le comentó una vez mientras le servía el desayuno.

– ¿Y qué sucedió? –preguntó Fiorella, curiosa.

–Nada –respondió él. –Nunca se enteró de mí. Un año después se casó y se fue. Algunos amores no están hechos para prosperar.

–Pero el mío y el de Adam si –dijo Fiorella, con enfado.

–No lo dudo, señorita. –Hizo una reverencia y abandonó la habitación.

Tim se volvió su confidente, y le demostró ser alguien en quién confiar. Fiorella le contó cómo conoció a Adam y cómo se enamoró de él. Hasta le contó a dónde se escapaban para verse sin que nadie se enterase. Tim, conmovido, escuchaba todo. Reía junto a ella sin perderse ningún detalle de su relato. El entusiasmo infantil con el que Fiorella le hablaba era cautivador. Le inyectaba una energía positiva que le ayudaba a continuar con su trabajosa rutina. En ocasiones se le hacía tarde en la habitación mientras tenían largas conversaciones, y escuchaba las fantasías de Fiorella sobre cómo sería su mundo si no fuera princesa y pudiera amar libremente a Adam. Las mañanas usualmente la encontraba rezando. Le decía que lo hacía para darle las fuerzas a Adam para sostenerse solo fuera del castillo, después de todo sus catorce años no le proveían de gran experiencia. La ilusión de Fiorella crecía cada vez más y sus esperanzas, al contrario de perderse, crecían, pese a llevar dos semanas sin recibir noticias de Adam. Tim le prometió que su encuentro sería pronto, que si él era la mitad de astuto que su gato, no había nada de qué preocuparse. Fiorella lloró la muerte de Rose como si fuera su propio gato. Odió con todas sus fuerzas al Gordo Dax y a su perro Blaine, que de seguro era tan gordo y feo como él.

Una noche Fiorella se levantó de su cama, debía esperar la cena, pero Tim tardaba en llegar y eso le preocupó. Fuera no había nadie. Los guardias no estaban en la puerta. Con preocupación y curiosidad, salió de la habitación y caminó hacia el ala oeste. Quiso estar cerca de donde hasta hace unas semanas estuvo Adam. Después de tanto tiempo quería sentir el rastro que dejó su presencia, y al imaginárselo recorriendo los pasillos que ella estaba recorriendo, sintió un calor en el pecho. La satisfacción que le dio poder sentirse junto a él fue tal que olvidó por completo lo que hacía y solo imaginó su rostro, su cabello claro, sus inolvidables ojos color café, y su inmutable voz. Como quería estar con él en ese momento para abrazarlo y besarle la mejilla.

Fuente

Mientras seguía caminando escuchó unos pasos que venían de unos pasillos más adelante. Se escondió entre la sombras de un rincón y dos cuerpos pasaron frente a ella. Conversaban sobre algún tema importante que Fiorella apenas entendió.

–Sí, ha estado bastante mal –dijo uno. Por la voz carrasposa Fiorella supo que era un anciano.

– ¿Crees que logre pasar la noche?

Y se alejaron antes de que Fiorella pudiera oír la respuesta. ¿Hablaban de su madre? Pero Tim le había dicho que solo era un virus, que pronto se recuperaría. ¿Le mintió Tim? Lo dudó. Él no tenía motivos para hacerlo. ¿O si?. Cuando ambos cuerpos se alejaron emprendió marcha a los aposentos de su madre. Necesitaba comprobar que todo estaba bien con ella. ¿A dónde habían ido los guardias de la puerta? Pregunta tras pregunta asaltaban su cabeza mientras corría a la habitación de su madre. Subió las escaleras de dos en dos, estuvo a punto de tropezar en par de ocasiones pero logró reponerse de inmediato. Llegó a la cima del castillo, pero en el cuarto no estaba la reina. Los pasillos desolados. Definitivamente algo no iba bien. Bajó las escaleras en camino al salón del trono. Allí debía estar, iba a comprobar que su madre estuviera bien. Era solo un virus y ya ¿verdad? Eso le había dicho Tim, y Tim no le mentiría. Bajó la última escalera y fue a toda prisa al salón del trono, todo estaba oscuro, tanto que cuando chocó contra un cuerpo no pudo distinguir quien era hasta escuchar su voz.

– ¿Fiorella? –la voz de Adam fue un canto matinal de aves en esa noche oscura.

Fuente



Gracias por estar de nuevo aquí leyéndome. Espera el capítulo 5

Sort:  

Saludos hermano, muy buen relato... Te felicito por esto que has estado creando. Solo vi un par de palabras que le faltaron tilde, pero del resto todo encantador.

ElinderFirma.gif

Hola Elinder. Gracias por tu observación. Ya está corregido. Un saludo.

Que bella historia. Me alegro que Fiorella y Adam se hayan encontrado. Quiero saber el destino de estos dos.

Muchas gracias por seguir esta historia. Espero que te gusten los próximos capítulos. Un saludo.

Sneaky Ninja Attack! You have been defended with a 1.99% vote... I was summoned by @leikerm96! I have done their bidding and now I will vanish...Whoosh

Coin Marketplace

STEEM 0.16
TRX 0.15
JST 0.028
BTC 55117.74
ETH 2310.18
USDT 1.00
SBD 2.31