Dentro del extenso orden de los hemípteros, existe una gran variedad de insectos que pueden destruir con mucha facilidad diversos tipos de plantaciones o cultivos; en donde además de causarles daños directos a las plantas, pueden transmitirles una gran variedad de patógenos, razón por la cual han adquirido una gran importancia (negativa) dentro del ámbito agrícola. Muchas de las familias que integran dicho orden, suelen ser muy conocidas por muchos, ya que podemos encontrar como ejemplos a las chinches o los ruidosos cicádidos popularmente conocidas como cicadas, cigarras o chicharras, las cuales también pueden llegar a ser plagas bajo determinados desequilibrios ambientales, y por otra parte están otros con una mayor mala reputación como los aleurodidos (mosca blanca) o los miembros de la superfamilia Aphidoidea (Áfidos o pulgones).

En el presente artículo, nos adentraremos nuevamente en el mundo de los hemípteros con la intención de conocer a otras familias que poseen un elevado potencial para destruir cultivos, los miembros de la superfamilia coccoidea. Los integrantes de dicho grupo, suelen ser comúnmente conocidas como cochinillas, chinches harinosas, escamas o conchuelas y por lo general son organismos muy polífagos, motivo por el que estarán presentes en diversos cultivos o plantas. De igual manera, se estima que la superfamilia de los cocoideos está integrada por más de 7.000 especies siendo en su mayoría fitoparásitos; por tal razón, no es de extrañarse si se llegan a apreciar diversas especies de estos insectos en una misma planta hospedera. Así mismo, estos hemípteros también pueden ser capaces de transmitir enfermedades a los organismos vegetales que parasitan, como un ejemplo les puedo mencionar el virus del brote hinchado del cacao (CSSV) o el virus del enrollamiento de la hoja, para ser más específico el virus GLRaV-3, el cual suele afectar en gran medida los cultivos de Vid (Vitis vinifera), esta capacidad de transmitir virus la comparte con los ya mencionados vectores fitopatógenos áfidos o la mosca blanca, aunque en menor grado a comparación de éstos últimos. Las familias más importantes dentro del mundo coccoidae tanto por daños ocasionados o por otras utilidades que el hombre la ha dado (lo veremos más adelante), vienen a ser:

Estas son 5 de las aproximadamente 32 familias que integran a la superfamilia coccoidea, las 5 nombradas son de las más importantes dentro del ámbito agrícola y comercial. En lo que respecta al número de especies, no son números exactos los empleados en la gráfica, sino estimados.

Por otra parte, los cocoideos se las han ingeniado para poder diseminarse fácilmente por su entorno; para ello, suelen emplear las corrientes o ráfagas de aire para llegar a nuevas plantas, a su vez pueden adherirse a nuestra ropa y llegar a nuestros hogares y en el más curioso de los casos, emplear a otros artrópodos como medio de transporte. Los hemípteros como los áfidos o las ya mencionadas cochinillas, mantienen una armónica y estrecha relación con la mayoría de hormigas, en donde por medio de interacciones simbióticas se benefician la una de la otra, se sabe que las hormigas pastorean, protegen y mantienen juntas a las comunidades de estos insectos a cambio de la melaza o sustancia rica en azúcares que estos excretan, esta sustancia es un exquisito y nutritivo manjar para las hormigas, razón, por la que estos últimos suelen proteger a los cocoideos o a los áfidos de sus posibles depredadores. Ésta es una de las razones por la que se suele dificultar el control de estos insectos, ya que también puede tocar lidiar con las hormigas que transportan de planta en planta (foresia) a estos curiosos insectos.

En lo que respecta a las características más llamativas de estos hemípteros, tenemos que son muy variadas y dependen básicamente de la especie; aunque entre las más comunes podemos encontrar primeramente su tamaño, el cual ronda de 1mm a 5mm según la especie, otro aspecto llamativo es que ha diferencia de otros insectos no poseen un rígido exoesqueleto, por lo que principalmente las hembras suelen ser de cuerpo blando, otra particularidad es la producción de una sustancia cerosa (generalmente blanca) con la que suelen cubrir su cuerpo para protegerse de factores externos. Por otra parte, tenemos su marcado dimorfismo sexual, siendo los machos adultos alados y con características muy similares a pequeñas "avispas"; mientras que la hembra por su parte, posee una forma ovoide o redondeada y es la que produce en gran medida la sustancia o capa cerosa, ésta última es áptera (no tiene alas) y generalmente es muy sedentaria. Así mismo, la capa cerosa que suelen crear las hembras, varía según la familia y a la especie a la que pertenezca, por ejemplo en la familia coccidae dicha capa suele asemejarse a una escama o conchuela.

¿Quien no ha visto a estos organismos merodear por las zonas húmedas de nuestros jardines?, con la particularidad de que cuando son molestadas se hacen una pequeña "pelota o bola" para protegerse. Estos artrópodos a menudo pueden ser confundidos con algunas especies de cocoideos, si observamos por ejemplo la imagen inicial del post en donde está la cochinilla harinosa Pseudococcus longispinus, podemos ver que a simple vista comparte algunas similitudes con las cochinillas de la humedad (oniscideos) como la forma de su cuerpo, además de que ambas son llamadas "cochinillas"; ahora, pese a que algunas personas les puedan parecer familiares, hay que acotar que no son lo mismo ni pertenecen a la misma familia. Los oniscideos o "bichos bola" son crustáceos isópodos, mientras que los cocoideos son insectos, el único "rasgo" en particular que comparten es que ambos son artrópodos junto a los arácnidos y los miriápodos. Por otra parte, añado que las cochinillas de la humedad también pueden llegar a ser plagas, ellas generalmente se alimentan de material vegetal en descomposición, por lo que también contribuyen a la mejora de los suelos, no obstante, si su población aumenta drásticamente, puede escasear el alimento, por lo que pueden atacar semillas o los tallos tiernos de tus plantas.

A nivel reproductivo también resultan sorprendentes, ya que en algunas familias varía la forma en la que aumentan el número de sus colonias; por ejemplo, en la familia coccidae por lo general escasean los machos, por lo que tienden a reproducirse por partenogénesis, en la dactylopidae o pseudococcidae la reproducción es sexual. El macho alado (con alas) vuela de planta en planta fecundando a distintas hembras, un dato curioso es que esta es la única labor para la que viven los machos, esto debido a que en determinado instar ninfal pierden su aparato bucal, por lo que dejan de alimentarse; ya siendo machos adultos viven alrededor de 2 a 3 días, la hembra por su parte puede vivir unos 90 días o más dependiendo de diversos factores presentes, como el clima o temperatura. La mayoría de las especies consta de 3 o 4 instares ninfales, la hembra adulta conserva prácticamente la misma forma de su estado como ninfa, solo cambia el tamaño y la cantidad de capa cérea que produce, el macho en el último instar como ninfa, se transforma en una especie de pupa de donde saldrá su versión alada (con alas) lista para reproducirse. Algunas especies de la familia diaspididae pueden ser vivíparas, por lo que pueden dar a luz a crías vivas y otras como la Orthezia praelonga resguardan a sus huevos en un ovisaco que producen con su capa cerosa, hasta que decidan salir a alimentarse.

Anteriormente, hemos conocido aspectos negativos de estos cocoideos como el ser plagas potenciales, razón que las hace causarnos innumerables perdidas económicas a nivel agrícola. No obstante, también es importante conocer un gran valor que la ha dado la humanidad desde la antigüedad, más allá del rol que cumpla en determinados ecosistemas, por ejemplo la especie Kerria lacca es empleada para la producción de laca, la Ericerus pela es empleada en Asía para la producción de cera. Ahora, la más importante cochinilla en estos aspectos es la especie Dactylopius coccus, de la cual se puede extraer el rojo carmín o ácido carminico, conocido a nivel industrial como E-120, esta sustancia es producida por la cochinilla hembra principalmente para proteger sus huevecillos de depredadores, posee una tonalidad roja intensa y se asemeja en parte a la sangre. ¿Para que se suele utilizar dicha sustancia?, pues, éste fluido rojizo es empleado a nivel industrial para darle el color (artificial) a muchas cosas, como: lápiz o pinturas de labio, golosinas que tengan tonalidades rojas o derivadas de este color, yogurt, bebidas, embutidos, pinturas de uñas, entre otras.

La especie Dactylopius coccus, es plaga de diversas plantas cactáceas como el nopal, dichas especies vegetales suelen ser producidas para posteriormente, añadirles a las cochinillas hembras con el proposito de iniciar la cría y reproduccion de dicha especie, la colecta la hacen de forma manual y luego inicia la extracción del ácido carminico, generalmente lo hacen a nivel industrial y les pueden dar otras tonalidades derivadas del rojo, claro, esto dependerá del uso que le vayan a dar al ácido carminico.

Al comer o utilizar algún producto de coloración roja u otro color derivado de este, puedes revisar la etiqueta donde salgan los ingredientes o componentes y posiblemente te encuentres con el E-120 o rojo natural 4, de manera que te darás cuenta de que estás a punto de consumir o emplear a estas cochinillas.

La superfamilia coccoidea está conformada por muchas especies plagas de diversos organismos vegetales, estas molestas "cochinillas o conchuelas" están provistas de un aparato bucal picador-succionador, con el que pueden perforar y absorber fluidos vegetales, motivo por el que tienden a debilitar a la planta que parasitan. Como suele ocurrir con muchas especies de insecto chupadores, al momento de alimentarse introducen su "saliva" en el organismo vegetal, la cual puede atrofiar o deformar los tejidos vasculares de las plantas, por esta razón la planta podría empezar a mostrar diversos síntomas que indicarán que algo no está bien. Por otra parte, el identificar a estos insectos no es tan dificultoso, ya que éstos suelen estar presentes en todas las partes aéreas de las plantas (Haz o envés de las hojas, tallos, flores o frutos), como se puede observar en la planta de la foto, existe una alta incidencia de Orthezia praelonga, cada punto blanco corresponde a una ninfa o hembra adulta de dicha especie; de igual manera , puedes observar detenidamente los tallos de las plantas en busca de pequeñas escamas o conchuelas adheridas (como garrapatas) a dicha parte de la planta.

Estos son algunos de los síntomas más comunes que presentan nuestras plantas, ante el ataque de los cocoideos. Si tras estos síntomas encontramos una alta presencia de estos insectos, ya sabes cual es el posible culpable. Con respecto a los hongos del género Cladosporium sp que aparecen en las plantas, son principalmente diseminados o propagados por áfidos, mosca blanca o cochinillas, pues, como explique en el post anterior, estos insectos suelen excretar una melaza (misma que buscan las hormigas), que no es más que el exceso de savia del que se alimentan, dicha "melaza" es un caldo de cultivo donde pueden prosperar dichos hongos, cubriendo la hoja con una suciedad o costra negra que evita el proceso fotosintético de la planta, debilitándola hasta la muerte.

Al igual que diversas especies de insectos, los cocoideos toleran eficazmente la mayoría de productos agroquímicos, la razón de esto, es la capa cérea que estos producen, con la cual pueden protegerse de cualquier cambio negativo que ocurra en su alrededor, por está razón se tienden a usar indiscriminadamente estos productos en busca de mejores resultados. De igual manera, el mal uso de estos productos puede generar una severa contaminación del área o sencillamente, pueden agravar el desequilibrio biológico presente en el agroecosistema donde se aplique, si desea aplicar algún producto agroquímico consulte a algún experto y aplique de manera preventiva, ya que estos son más eficaces contra los estados iniciales de las cochinillas (ninfas), las cuales son más sensibles o susceptibles a los cambios. Los pesticidas sistémicos, tienden a ser más eficaces contra este tipo de plagas, por el hecho de que son absorbidos por la planta y actúan cuando el insecto por defecto se alimenta. No obstante, muchos de estos productos son muy toxicos y residuales e incluso pueden no ser selectivos, por lo que aniquilarán a todo organismo (plaga o benéfico) que entre en contacto con ellos.

Por otra parte, también se puede hacer uso de otros productos menos contaminantes como el alcohol isopropilico, para ello solo debemos humedecer algún paño o algodon con dicho producto y limpiar las partes de las plantas en donde estén adheridos los cocoideos, eso si, realiza está labor en horas de la mañana o cuando no haya mucha incidencia del sol, esto para evitar posibles quemaduras en los tejidos de la planta, por lo que también es recomendable aplicar agua tras usar dicho producto. El usar una mezcla de agua, algún detergente biodegradable y un poco de aceite comestible, también resulta eficaz para controlar a éstas plagas, ya que el jabón tiende a sofocar a las cochinillas, de igual manera el jabón potásico es un gran aliado para controlar prácticamente cualquier tipo de plaga, este producto mezclado con agua afecta la cutícula de los insectos, inmovilizandolos y asegurándoles la muerte, además de que puede ser una manera de suministrar algo de potasio a la planta.

Las infusiones, purines o macerados a base de ajo, cebolla, ají, ortiga, neem, helechos, tabaco o orégano, son otra buena opción para controlar las poblaciones de cochinillas, si los combinamos con el jabón potásico, tendremos un eficiente plaguicida que protegerá a nuestras plantas. En lo que respecta a biocontroladores, las cochinillas tienen a varios organismos que las depredan eficientemente, por lo que contribuyen a equilibrar las poblaciones de estos hemípteros cocoideos. Como algunos ejemplos les puedo mencionar las avispas parasitoides Leptomastoidea abnormis, avispas del género Encarsia, o el díptero Lestophonus iceryae las cuales ovipositan sus huevecillos dentro o sobre las cochinillas, para que posteriormente sus larvas se alimenten de estas últimas, el hongo entomopatógeno Lecanicillium lecanii, también es bueno controlando a las cochinillas. Ahora, los mejores controladores de cocoideos son los coccinélidos o catarinas, estos coleópteros tienen entre sus platillos predilectos a las cochinillas, por ejemplo la especie Cryptolaemus montrouzieri se alimenta durante todo su desarrollo principalmente de cochinillas, por lo que es uno de los principales depredadores de las especies de cocoideos.

A simple vista pensaremos que se trata de un cocoideo por la capa cerosa o filamentos blanquecinos que se le aprecian, pero en realidad es una larva de dicha especie de coleóptero, una forma de reconocerla es que su cuerpo es alargado, mientras que las cochinillas son ovoides, redondeadas o aplanadas.

Para finalizar, no esta de más recordarles el mantener a nuestra planta con un buen riego y bien nutrida, es decir, sin deficiencias ni excesos de ningún tipo (especialmente evitar los excesos de nitrógeno); esto con la finalidad de que la planta esté sana y pueda resistir de buena manera, el ataque de diversas plagas o patógenos.

El presente post fue realizado desde un dispositivo android, específicamente Tablet modelo TR10RS1, las fotografías marcadas como "fotos tomadas por el autor @abneagro" respectivamente, fueron tomadas con un dispositivo movil ZTE Caribe 4 y editadas con la aplicación CANVA.