Mi muy respetada comunidad latina, qué buena iniciativa remontarnos a nuestra niñez con el recuerdos de esos dibujos animados que nos llenaban de tanta alegría.

Confesaré algo medio triste, y es que nosotros "mis hermanos y yo", no crecimos con televisor en casa. Veíamos comiquitas en casa de mi abuela Olga (paterna), a veces cuando mi papá nos llevaba por la tarde. No era siempre, porque mis papás se habían divorciado, entonces no era tan frecuente como hubiéramos querido.

Así que, la televisión no es que me marcó tanto la infancia, pero hubo buenos recuerdos viendo ciertas comiquitas. El tema es que cuando yo iba a que mi abuela, prefería jugar con los primos, y cuando ellos querían ver tele, entonces yo veía con ellos, pero entre jugar y ver programas, yo era más de jugar.

Los Picapiedra

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Me gustaba demasiado. Me sabía la introducción sonora, la tarareaba... y el "Yabadabadúuuu" de Pedro era como grito de guerra nuestro.

Ahora que estoy adulta, pienso que era mi predilecta entre todas, por el tema "familia". Yo admiraba el núcleo de los Picapiedra y los Mármol. Esa amistad, hasta el bullying que le hacía Pedro a Pablo me llamaba la atención, para aprender que eso no se le hace a los amigos.

De los que más admiraba de allí, pues a Vilma. Era bella, siempre arregladita, muy inteligente para la administración del hogar y amorosa con su tosco marido. Era linda la familia que tenían... comiquitas de buena época. Todavía la veo.

Episodios, todos me gustaron... pero la película ampliada es la que la catapultó como mi programa preferido.

The Lonney Toons

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Ya con esta, teníamos televisor en casa. Pero de uso restringido, porque mi mamá decía que le costó mucho comprarlo, así que estuvo en su habitación por muchos años. Lo veíamos con horario, como debe ser, pero a veces mi mamá tomaba la siesta y se pasaba del horario.

¡Por Dios! Sufríamos porque era la Hora Warner... no sé si la recuerdan. Y lo peor es que mi mamá dormía con Venevisión encendida, y escuchábamos: ¡Empezó la hora Warner! Jajaja, así que nos subíamos a la pared que daba a su cuarto y veíamos a través de la ventana, hasta que ella despertaba y nos daba acceso al cuarto. Y menos mal, porque después venía El Chavo y el Zorro.

Yo, de esa comiquita era el Conejo Bugs: ¿Qué hay de nuevo, amigos? Siempre resiliente y buena onda... sarcástico y muy inteligente. Creo que todavía soy Bugs.

Las Chicas Super Poderosas

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Bueno, acá ya no era tan chiquita. Tendría edad preadolescente, y era el boom de este trío de heroínas super tiernas. Eran un equipo medio explosivo, que sin el profesor habrían causado mucho caos, ya que ellas nacieron del caos.

Me gustaba pensar que era "Bellota". De paso nos paecemos: Pelinegra, ojos verdes y de humor fuerte. Es así, crecí buscando formas de vencer a "MojoJojo" Que era para mí la inevitable adolescencia. Toda amenaza era un "Mojo Jojo", y yo era una estupenda Bellota para acabar con él.

En fin, a veces la miro por Cartoon. Pero ya a mis niñas no les gusta nada de lo que yo veía. Pero ese es tema de otro post xD.

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Pero tuve una niñez acompañada de lindos y entretenidos dibujos animados. Para mí son más lindos los de mi época que los de ahora. Tenían más detalle de diseño, mayor creatividad y una enseñanza menos dañina.

¡Ahora me da un poco de miedo lo que pueda aparecer de pronto en pantalla con etiqueta de programa infantil! Lo confieso.

Quisiera invitar a mis amigas contemporáneas: @mile16 @graceleon y @bellana a contarnos sobre sus caricaturas favoritas. Las leo!!!

Con amor,
Yrma

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