¡Es el Día de la Mujer!

  Desde hace siglos pasados, la figura femenina ha sido víctima de intolerancia y discriminación ya que, para algunos sectores, la mujer no es apta para asumir ciertos roles sociales y, a raíz de esto, hemos quedado totalmente excluidas o, en el peor de los casos, desterradas.

  Si bien es cierto que desde la mitad del siglo XVIII los derechos de la mujer comenzaron a ser respetados y, desde el siglo actual hemos logrado autonomía al igual que nuestra voz es escuchada y valorada; aún falta mucho por mejorar porque, se siguen sintiendo fuertes agresiones de intolerancia y discriminación hacia la mujer.

  Para que las mujeres dejemos de ser agredidas o excluidas, la educación debe decir presente en todo momento por lo tanto, es indispensable la formulación y posteriormente ejecución de políticas educativas donde se pueda orientar a que bajo ningún concepto la mujer debe ser discriminada ya que, si ella estudia, se prepara y cuenta con excelentes habilidades, puede asumir sin ningún inconveniente un cargo laboral. Aunado a ello, también hay que crear consciencia en la sociedad para que las mujeres puedan tener un estilo de vida libre de abuso y violencia física al igual que psicológica porque, un género no es sinónimo de ser sexo débil o fuerte porque ambos géneros aportan lo elemental para el desarrollo social por lo tanto, ninguno debe ser excluido.

  La creación y renovación de Leyes que amparen a las mujeres ante situaciones de violencia también es importante ya que, solamente no podemos quedarnos con el enfoque de generar consciencia y; aquí quiero dejar presente que, debe existir un poder legislativo en cada país que se asegure de que están siendo ejecutadas correctamente y, en caso de que se denuncie que una mujer fue víctima de maltrato o feminicidio, el agresor pague su delito sin distinción alguna porque, ningún crimen hacia la mujer debe ser absuelto y, si estas leyes son radicales, pienso que hay mejores resultados ya que, de esta manera el posible agresor va a preferir no llegar a ese límite.

  Es injusto que la figura femenina diariamente sea confrontada con la masculina porque, debido a ello, la conducta misógina se ha acentuado peligrosamente en nuestra sociedad y para finalmente eliminar esta mala acción, la educación, consciencia y ejecución de leyes que detengan estos actos, la mujer va a poder disfrutar de sus derechos en total libertad.

  Las mujeres estamos en este planeta Tierra para contribuir con el desarrollo de nuestra sociedad y, merecemos ser respetadas al igual que valoradas porque, ningún ser humano tiene que ser víctima de agresiones y discriminación por lo tanto, forjemos la empatía en nuestro corazón y; no tengamos miedo de reconocer que las mujeres también somos importantes y poderosas.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

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