La familia es el núcleo con el que estamos entrelazados por vínculos de origen consanguíneo y, con este grupo de personas desarrollamos nuestros primeros lazos afectivos ya que, son el primer grupo con el que tenemos un estilo de vida en común y debido a esto, es importante que esta cercanía sea adecuada para evitar la disfunción familiar.

  Aunque la familia son todos los integrantes con quienes compartimos un parentesco, los más directos y principales de este núcleo son los padres por ello, en esta figura recae toda la responsabilidad tutelar de los niños ocasionando así que, ellos tengan el deber de cubrir todas las necesidades de sus pequeños hasta que ellos lleguen a la mayoría de edad y se puedan independizar de sus progenitores.

  Cuando una persona toma la decisión de formar su propia familia, debe tener presente que, muchas cosas en su vida van a cambiar y, las responsabilidades que comenzará a desempeñar, requieren de toda su atención y por supuesto, disposición porque, alguien más va a requerir de su atención al 100% por un tiempo prolongado. Sin embargo, si por alguna u otra razón el padre o la madre no cumplen con el deber de garantizarle amor, educación, cuidados, alimentación y seguridad para sus hijos, llegan a un nivel de descuido que perjudicará directamente el desarrollo adecuado del pequeño generando así que, la familia sea disfuncional y, los niños crezcan con una visión errada de la familia.

  Tengamos presente que, descuidar a la familia implica que las figuras principales de ese núcleo (Madre y padre), se niegan a formar parte del desarrollo de sus hijos por lo tanto, en ningún momento hay una atención afectiva y motivadora; situación que de manera progresiva repercute en los niños y se verá reflejado en la ausencia de valores e incluso, crecen sin la figura familiar.

  Desde mi nacimiento, la persona encargada de asumir todo lo concerniente a mi resguardo fue mi papá porque, mi madre biológica no quiso estar presente. No obstante, el cuidado impartido por parte de mi padre y la ayuda que le brindaron mis tíos y abuelos, fue suficiente para crecer en un hogar donde no se sintiera el descuido por lo tanto, no considero que haya experimentado esa situación. Ahora bien, si he tenido la desagradable vivencia de ver a alguien más descuidando a su familia y, es muy desagradable presenciar esto porque, no me parece justo que los niños vivan esa experiencia que les acarrea diversos tipos de daños.

  Cabe destacar que, entre los efectos negativos que genera el descuido destacan problemas psicológicos ya que, los niños pueden padecer trastornos de depresión o ansiedad. De igual manera, su autoestima se ve afectada porque, ellos crecen con la idea de que no merecen el afecto de nadie ya que, ni siquiera sus padres lo tienen hacia ellos.

  Otro efecto negativo que no podemos dejar de resaltar es que, el descuido de la familia en muchos casos ha generado que los niños cuando lleguen a la etapa de adolescentes, comiencen a seguir el camino de la delincuencia debido a la ausencia de valores sociales que tienen y, creen que este estilo de vida es el mejor.

  Las personas que he visto descuidando a los niños manifiestan que, los abandonan porque sienten que son un obstáculo para avanzar en escenarios laborales o académicos e incluso, algunos son más duros al etiquetarlos como una carga y, aquí es digo que, un hijo jamás decide nacer porque, son sus progenitores quienes toman esta decisión por lo tanto, mi consejo para los padres que cometen la negligencia es que asuman las consecuencias de sus actos y, cumplan con todas las responsabilidades que conlleva tener un hijo.

  Puedo entender que existen factores económicos y sociales que complican cumplir al máximo el rol de padres pero, independientemente de ello, sus hijos ahora son su prioridad y, deben garantizarles todo lo esencial para que ellos crezcan en un hogar 100% funcional.

  Los niños abandonados sienten y, constantemente manifiestan que, su padre o madre los abandonó por su culpa ya que, llegaron al mundo para complicarles la vida pero, a estos pequeños les digo que eso no es así porque, ellos solo son una bendición y, si hay culpables en este tipo de situaciones, solo son sus progenitores ya que, la responsabilidad de que un niño llegue al mundo, solamente es de los padres que decidieron tenerlo por lo tanto, pueden estar tranquilos porque no hay ninguna culpabilidad de su parte visto que, son seres humanos de almas nobles que otras personas aman y están feliz de que formen parte de este mágico mundo llamado Tierra.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

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