SEC14 WK:#3:🤷Mi percepción sobre las tareas del hogar

  Desde temprana edad solemos estar relacionados con las labores domésticas porque, a pesar de que en nuestros primeros años no las desempeñamos, el solo hecho de observar a alguien de más edad realizándolas, nos ayuda a ver estas actividades como un deber que debemos desempeñar porque, forman parte de la higiene y, salud de nuestro hogar además de ser un hábito de convivencia.

  Nuestros padres cuando ven que tenemos edad para desempeñar ciertas labores domésticas, comienzan a asignarnos actividades y, a medida de que vamos creciendo, además de sumar otras dinámicas de limpieza, también perciben el momento en el que desarrollamos la facultad de comprender que, dichas tareas son elementales para mantener el hogar en buen estado para vivir.

  Una tarea doméstica es la labor que realizamos en nuestra casa de manera regular con el fin de mantener todo ordenado y limpio para así poder tener un lugar habitable. Cabe destacar que, esta labor comprende la preparación de nuestros alimentos, ordenar al igual que limpiar el hogar, hacer mercado, entre otras actividades de gran relevancia. Tengamos presente que, las labores domesticas pueden ser desempeñadas por mujeres y hombres acotando que, los niños también pueden realizarlas pero, sus padres tienen que supervisarlos y, las tareas que les asignen, deben ser acordes a su edad para evitar algún peligro que los pueda comprometer.

  Particularmente disfruto mucho las tareas domésticas y, aunque tengo más preferencias por algunas de ellas, cuando debo hacer las que no son muy agradables para mi, de igual manera desempeño correctamente dichas labores porque, mantener mi hogar en orden, limpio y al día en todo, es prioridad por lo que, me aseguro que cada una de esas tareas se ejecuten sin ningún inconveniente.

  En mi casa somos muy temáticos con el tema del orden y la limpieza por lo que, nos aseguramos de barrer y limpiar todos los días para evitar así que el polvo o alguna otra suciedad nos incomode. Aunado a ello, cocinamos, lavamos la ropa y planchamos al igual que, toda la ropa que se deba doblar, también lo hacemos. Cabe destacar que, realizamos mercado una vez a la semana y cambiamos las sábanas de las camas cada domingo. Otra actividad importante que no puedo dejar de mencionar es el mantenimiento al área verde que tenemos porque, todas las noches regamos unas plantas naturales y cuando es necesario, removemos la maleza que sale alrededor de la maceta donde están plantadas.

  En vista de que me gusta tener todo ordenado y limpio, me encantan las tareas que están relacionadas con esta dinámica por lo que, en mi casa tengo como asignación fija limpiar absolutamente todo. Aunado a ello, también me gusta mucho doblar la ropa, asperjar las plantas y, planchar; les confieso que todas estas tareas para mi son un disfrute total y, cuando las estoy ejecutando suelo considerarlas como una actividad terapéutica que además de permitirme mantener en orden mi casa, me relajan.

  Quiero dejar presente que, en menor grado a las tareas anteriores, también tengo un leve disfrute cuando cocino pero, en vista de que no tengo una gran destreza en el arte culinario, suelo dejarle esta tarea a quienes sí la tienen y, así evitar algún tipo de inconveniente.

  Mantener al día nuestras actividades del hogar es un deber ser que todos tenemos porque si estas labores no están en el nivel adecuado, nuestra casa será muy incómodo de habitar e incluso, si hay un desaseo extremo, llegará un punto en el que debemos salir de ella ya que, la suciedad generará olores que nos enfermaran y, el desorden impedirá que transitemos libremente por ello, es de vital importancia realizar constantemente nuestras labores en el hogar e independientemente de que nos guste o no, es un hábito con el que debemos cumplir además de que; dichas tareas también forman parte de la ética individual y de convivencia que aprendimos desde niños.

  En lo personal siento que, las labores del hogar nos enseñan disciplinas de higiene y cuidados lo cual, es fantástico porque, cuando tenemos nuestra casa en orden, enviamos el mensaje de que somos personas que poseen valores y principios además de una buena educación.

  Para que los niños crezcan con el hábito de realizar las labores domésticas de manera espontanea, es necesario que sus padres los eduquen bajo la enseñanza de hacerlas al igual que, es de vital importancia que ellos no tengan el pensamiento de que dichas actividades solo son para el sexo femenino o, a toda costa deben contratar una doméstica porque ellos no nacieron para desempeñar esas labores y, la causa de esto se debe a que, hacer una tarea del hogar nos permiten tener dependencia e incluso, asumimos responsabilidades y, es una acción que todos podemos desempeñar sin ningún inconveniente.

  Cuando un niño se familiariza con las tareas del hogar, no tiene rechazos a hacer estas actividades incluso cuando no está en su casa porque, el hábito de colaborar lo desarrolla ya que, sabe perfectamente que tener todo en orden y limpio, es prioridad y, todos podemos contribuir para lograrlo por ello, es importante que los padres impartan su enseñanza para que sus hijos quieran desempeñar las labores del hogar.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

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