Como ya había anunciado la semana pasada, este viernes vuelvo a traer otro capítulo de la novela de Ciencia Ficción que estoy escribiendo: El Emperador de las Nubes.

Para los que no lo hayan leído, pueden leer los anteriores post:

Prólogo
Capítulo 1

Y la sinopsis:

El Emperador de las Nubes es una nave insignia, pionera de un proyecto de la ONU que debía ser el faro de nueva esperanza de la humanidad, abrumada por la Catástrofe Verde y en vías de extinción. El proyecto no resultó tan esperanzador, y ahora la nave es la única de su tipo, llevando consigo la última chispa de la humanidad. Ahora la supervivencia de la raza humana pende de un hilo mientras la nave navega a través de las nubes de Júpiter.


Una historia de sci-fi y drama, donde acompañaremos a nuestro protagonista Marcos y su importante cruzada: ¿será vital para salvar a la nave? ¿O será acaso un espectador de lujo en la condena de todos?

Imagen referencial. Fuente

El Agujero

Las labores del día empezaron bien temprano. Todas las Ratas en Las Madrigueras estuvieron muy ocupados recolectando piezas de bots perdidos o dañados durante la última semana.

Norman no había dicho el motivo por tanto alboroto, pero había dado muchas órdenes esa mañana, obligando a los mejores chatarreros a liderar la búsqueda, y entre ellos estaba Marcos.

El muchacho tenía un don especial: para la mitad del día ya había reunido 12 bots bomberos, 4 bots de mantenimiento y chatarra suficiente para armar otros 4 bots.

Luego de volver al Cerco con el último botín, Norman lo esperaba con ansias:

-Marcos, qué bueno que llegas- dijo con exagerado ánimo. Se acercó al joven con los brazos extendidos en un gesto de querer abrazarlo. Se detuvo a último momento y se conformó con dejar caer sus pesadas manos sobre los hombros de la Rata-. Muy buen trabajo, como siempre. Ahora tengo una tarea más importante para ti.

Marcos sospechó tanta buena actitud de Norman. Por experiencias pasadas, fácilmente la “tarea importante” sería bajar a las Máquinas o al Agujero, todos lugares muy peligrosos por sus altas temperaturas.

Norman condujo a su Rata hasta una habitación contigua del Cerco, donde nadie podría escucharlos. Su actitud pronto cambió bruscamente, ya no estaba tan feliz o animado.

-Hay problemas, Marcos- su actitud sombría destacaba graves problemas-. Han pasado cosas extrañas en el Agujero. He enviado varios bots para allá, pero el Agujero está enfadado. Ningún bot ha vuelto, y temo que pueda ocurrir un incidente mayor.

El Agujero… Ya Marcos sabía que su “don” especial siempre le traía problemas.

-Entiendo… ¿Puedo llevar a Cabrera conmigo?

La sonrisa que Norman no alivió su sombría actitud, sino más puso su rostro más escalofriante.

-Ese es mi muchacho. Adelante, ve con Cabrera. Calma a esa cosa, y si no puedes, vuelve aquí con un reporte.

Marcos asintió y salió de la habitación, con Norman ocupado en dar instrucciones para los nuevos bots que iban llegando. En el camino fuera del Cerco encontró a Cabrera, que trabajaba en otros bots dañados para extraerles repuestos.

-La Gran Rata quiere que vayamos al Agujero.

-La Gran Rata quiere que tú vayas al Agujero. Yo te tengo que acompañar, ¿cierto?

Soltó un sonoro suspiro, con la mirada cansada, pero luego sorprendió con una fuerte carcajada.

-¿No puedes vivir sin mí? ¡Vamos! Mientras antes terminemos, mejor.

El Agujero se encontraba en la parte posterior de la nave, una habitación inmensa que encerraba una esfera metálica de 9 metros de alto. Dentro de ella, según contaba la Tripulación Original, existía una criatura oscura llamada Agujero Negro que se alimentaba de electricidad hasta que, harto de comer, vomitaba energía de alta frecuencia.

Todo el lenguaje técnico siempre fue místico para las Ratas, que no sabían para nada ninguno de esos términos científicos ni palabradurías tan sofisticadas. Por ese mismo motivo, aquella habitación se le conocía simplemente como Agujero, y la idea era asegurarse que la criatura adentro consumiera las suficiente electricidad. Si era poca, el Agujero se cansaba y la nave se apagaba.

Pero si vomitaba mucho, desataría el infierno…

Precisamente tanto calor cerca del Agujero no era buen augurio. Al llegar a los controles, aquellas pantallas que indicaba el estado de ánimo de la criatura, Marcos notó muchos sectores de la esfera en rojo. Los bots habían intentado corregir el daño, según se pudo apreciar, pero simplemente quedaban fritos por un campo eléctrico.

-Debe estar muy molesto, Marcos. ¿Qué hacemos?

Sin decir una palabra, Marcos empezó a teclear varios comandos en la pantalla, palabras mágicas que le había enseñado el Viejo Jenkins muchos años atrás. Inmediatamente el sistema pasó a manual, y con otras palabras más el sistema inició la ventilación de emergencia. Minutos después, toda la esfera en la pantalla se mostraba en verde y azul. Todos excepto uno.

-Eres un mago, Marcos. No entiendo ni siquiera qué hago aquí, lo tenías todo controlado…

-No del todo.

Marcos señaló algunos bots caídos cerca de la base de la esfera, donde cables de diferentes tamaños y colores salían de la esfera y atravesaban el suelo. Allí había un cable seriamente dañado, que al reactivarse el sistema completamente, empezó a lanzar chispas.

La tarea entonces fue mucho más complicada. Marcos sabía que si la cablería no se arreglaba como corresponde, el problema volvería a surgir. Había reclutado especialmente a Cabrera porque ambos conocían de los bots que estaban inutilizados, por lo que tras unas horas de desmontaje y reinicio manual, la mayoría de los bots de mantenimiento estuvieron activos una vez más y solventaron el problema.

-Trabajo terminado- dijo apremiante Cabrera-. ¿Cómo supiste lo del cable? ¿Poderes místicos o algo así?

-Para nada. Esa pantalla dice el estado del contenedor del Agujero y…

En ese momento calló. Vio una figura negra pasar entre algunas columnas en la parte posterior de la habitación. Cabrera se dio cuenta del repentino silencio de su amigo, y giró para intentar ver lo mismo que Marcos. No vieron más a la figura.

-¿Viste lo mismo que yo?- preguntó Marcos.

-¿Esa cosa negra y espeluznante?

-Si..

-¡No! Yo no vi nada… Será mejor que nos vayamos. Probablemente el Agujero se habrá escapado. No quiero ser su comida...

Marcos aceptó de buena gana la idea. El calor del lugar era agobiante, además que sentía un escalofrío recorriendo su espalda. No importa todo lo que le haya dicho el Viejo Jenkins antes, Marcos realmente temía al Agujero. Temía que la extraña figura que vio haya sido la cosa negra contenida en la esfera metálica.

Sin decir una palabra más, ambos se encaminaron de nuevo al Cerco. Ninguno sospechó que los observaban mientras se iban.

Les dejo un pequeño glosario, para que no estén tan perdidos jeje.

Abajo:
Parte inferior del Emperador de las Nubes, donde están Las Madrigueras, el Agujero, Máquinas.

Agujero:
Núcleo de poder que proporciona energía y calor a toda la nave.

Arriba:
Lugar donde habitan los Lords. Parte superior del Emperador de las Nubes. Lugar prohibido donde las Ratas no tienen permitido estar.

Cerco:
Cuarto de control de las Ratas. Es la estación de refrigeración principal de la nave, pero las Ratas apenas conocen lo suficiente como para mantener el sistema de ventilación y refrigeración 100% operacional para Arriba.

Granjas:
Habitaciones hidropónicas destinadas al cultivo y cosecha de diferentes vegetales, cereales y legumbres, principales fuentes de alimento para los Lords y las Ratas.

Las Madrigueras:
Lugar de reposo de las Ratas. Son los pasillos de la nave donde se encuentran gran cantidad de tuberías de refrigeración y agua.

Nueva Tripulación:
Conformado principalmente por las Ratas y bots de trabajo. Son los herederos de la Tripulación Original.

Ratas:
Nombre que se le da a los huérfanos y personal de la Nueva Tripulación. Viven en Las Madrigueras y Abajo.

Tripulación Original:
Miembros originales del Emperador de las Nubes, liderados por el Capitán Arcturus Anderson, y cuyo último miembro en morir fue el Viejo Jenkins.

Agradecido por su tiempo para leer este capítulo. Si te gustó te pido que dejes tu voto, y me encantaría saber tus opiniones. Comenta qué tal te pareció este capítulo.

Me despido por ahora, un saludo a todos.