Concurso de Microrrelatos de Ciencia Ficción #MicroCiFi256 - Semana 9 - Abducción.

Después de todo no me siento nada mal, al contrario, que grandiosa sensación: esto debe ser el nirvana.

No valió la pena tanta lucha ni oponer tanta resistencia.
De haberlo sabido, hasta hubiese colaborado.

Siempre creí que los Dioses de todas las religiones eran la interpretación de los antiguos a la visita de seres extraterrestre y que esos seres iluminados que conocemos, con sus aureolas y que tenían poderes sobrenaturales, eran sus descendientes. Pero ahora estoy segura por mi experiencia vivida.

Simplemente estaba trabajando en la madrugada en el diseño de una página web cuando la habitación se iluminó. Me asomé por la ventana y vi un artefacto suspendido sobre la piscina. No podía resistir el impulso de salir al jardín y estar cerca de ese objeto multicolor. Brinqué por la ventana de mi habitación y caminé directo a una puerta que comenzó a abrirse y subí por las escaleras que me invitaban a subir a la nave.

Horror, los vi. Eran muy feos: largiluchos, desproporcionados pero me estaban esperando con mucha cordialidad.
Me llevaron a un laboratorio con aparatos inimaginables y comenzó mi lucha: consiente de todo. Me sentí escaneada, analizada, penetrada. Al principio sufrí pero después me relaje y hasta disfrute el contacto de las manos del ser más cercano a mí.

El encuentro para mí fue infinito, para el reloj de mi habitación fue de dos horas. No sé que se llevaron de mí, pero me dejaron la experiencia sensorial más placentera que no me ha dado algún humano.

Ahora espero que vuelvan.