CUPILLA, UN AMIGO FIEL.

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Ya les había comentado de Mi Mascota Scuichi, una tortuguita 🐢 que llegó a mi vida, porque el destino así lo decidió.

Pero hoy voy hacer un viaje en el tiempo ⏳. 🎶 En los años 1600, pampampaaam… … Ay no, me fui muy lejos ↩️. Mi máquina del tiempo ⏳ está algo averiada. Regresemos la película un poco 🎞.

Ahora si, 395 años después, o sea, en el año 1995, mi papa aún trabaja como transportista 🚍 de los trabajadores de SIDOR (desde Ciudad Bolívar a Ciudad Guayana). En el taller donde guardaban los autobuses 🚍🚍🚍, luego de su guardia, una de las perras 🐶 que cuidaba el lugar, había tenido varios cachorritos 🐶🐶🐶. El dueño del taller, padrino de mi hermano menor, regaló y vendió varios de ellos, pero quedó el Patito Feo de la familia.

Nadie lo quería porque estaba flaquito, todo raquítico, ojos saltones y lleno de garrapatas y pulgas, parecía un ‘Chamchuperri’ 🐷 (los que han visto la película “Papita 2da Base”, sabrán a lo que me refiero). Pero no era cualquier perro 🐶 ‘tumba pipote’, no. El papá era un Doberman 🐕, esos perros ‘buenorros’ que se le ven los cuadritos y los músculos espectaculares 💪y la mamá era una Dálmata 🐩. Eran perros de raza pura 👍.

Seguimos con el cuento. Un buen día, mi papá lo ‘embadurnó’ de aceite quemado 🌚, lo ‘embojotó para llevar’ entre hojas de periódicos 🗞 y lo trajo a la casa 🏠. Hubiesen visto la cara de mi mamá 😱, le iba a dar un soponcio 🤢cuando vio semejante criatura. Mi papá estaba muy emocionado y con los ojos brillosos 😯, como un niño 🧒 con juguete nuevo.

Obviamente, mi mamá no quería que el perrito 🐶 ni se asomara a la puerta 🚪, ella mantenía el piso de la casa encerado 🏠. Ese día mi papá estaba libre en el día, así que lo baño 🚿 y lo volvió a ‘embadurnar’ de aceite quemado por tres días consecutivos, hasta que se le cayeron todas las garrapatas y las pulgas.

Para ese entonces, era el método más efectivo para curar a los perritos 🐶 de esa plaga que los infectaba. Tampoco teníamos la posibilidad económica 💰 para comprarle vacunas 💉 o llevarlo a una consulta veterinaria 👨‍⚕️.

Al poco tiempo, ya “Cupilla” 🐕 empezó a ‘coger carnita’ y a crecerle el pelo, parecía que usaba champú “Pantene” o “Drene”, se le veía el pelo sedoso y brillosito 😂. Empezó a crecer muy rápido.

En una ocasión, mi mamá estaba sirviendo el almuerzo y nos llama a todos para comer 🍛. El primer ‘chicharrón’ que se asomó a la cocina fue “Cupilla” 🐕. Cuando mi mamá se dio cuenta, le lanzó un 'chancletazo' 👟 y le grito: “En mi cocina no te quiero. Usted come afuera”. Desde ese día, él salía corriendo 🏃🏿‍♂️ al llamado para comer 🗣, pero se frenaba en la puerta 🚪, aunque estuviera abierta, “Cupilla” 🐕 no pasaba.

Al igual que nosotros, conocía el ruido del autobús 🚍 que manejaba mi papá. “Cupilla” 🐕 se emocionaba muchísimo y lo esperaba en la puerta del patio para saludarlo 👋. No movía la cola, porque mi papá se la había cortado cuando aún era un cachorrito 🐶, pero daba vueltas como un trompo.

Así que conservamos al perrito 🐶. Peeeero… Como todo buen llanero 👨‍🌾, quería tener una granja 🏡 en su casa. El “Pequeño Gran Detalle”, es que el patio de mi casa 🏠 era pequeño y todo encementado. Solo quedaba el espacio donde estaban sembradas las matas de Pumalaca, Mandarina, Aguacate 🥑, Cereza 🍒, Naranja 🍊 y Limón 🍋.

En un abrir y cerrar de ojos 👀, ya teníamos en ese patio 4 perros grandes 🐕, 4 morrocoyes 🐢, 1 loro 🐦, 1 gallo 🐓 y 100 gallinas ponedoras🐔. Es en serio, aquí no estoy exagerando. Lo único bueno, era que comíamos huevos frescos 🥚, todos los días, en todas las presentaciones. Estábamos cumpliendo el Slogan de la propaganda: “No coma cuentos, coma huevos” 🥚. Lo malo es que teníamos que limpiar ese desastre, toooodos los días 🤦🏻‍♀️.

Hasta que un día mi mamá se obstinó 😡 y le dijo que debía sacar a todos esos animales de la casa 🏠. No solo por el trabajón 😰 que ameritaba cuidarlos y las quejas de los vecinos, sino porque ya no teníamos mucha solvencia económica 💸 para mantenerlos.

Mi papá regaló unas cuantas gallinas 🐔 y dos perros 🐕, otras las vendió y otras las intercambió por algunas herramientas 🛠⚒️ que necesitaba para la carpintería. A “Cupilla” 🐕, que era uno de los más grandes, se lo llevó un día en el autobús 🚍 y en la vía hacia Puerto Ordaz, lo dejó botado. A los tres días, el perro 🐕 ya estaba de nuevo en la casa 🏠.

Mi papá trato de convencer 🙏🏼 a mi mamá para que se quedara, pero ella no cedió 😡. Se lo volvió a llevar. Ésta vez, lo dejó vía Ciudad Piar. No recuerdo exactamente cuánto tiempo pasó ⏳, pero les puedo asegurar que fueron varios meses 🗓.

Un buen día, bueno era casi de noche 🌃, mi papá iba saliendo a trabajar, tenía guardia. Cuando abrió el portón 🚪 que da hacia la calle del frente, con mucha dificultad se le abalanza encima un perro 🐕 todo raquítico, sucio, desgreñado, pero sus ojos 😃 brillaban y su colita mocha se movía de felicidad 🙂.

Solo se escuchó un grito 🗣fuerte de mi papá: “Pancha, ven a ver”. Todos salimos a ver 😲, porque mi papá no solía gritar de esa manera. Era “Cupilla” 🐕, había vuelto a la casa🏠.

¿Qué creen que dijo mi mamá? Pues nada, no dijo nada 😶. El llanto 😭 de todos no se hizo esperar (de hecho, escribiendo éstas líneas, mis lágrimas no paraban de salir 😢). Por supuesto, ésta vez sí se quedó en casa 🏠.

“Cupilla” 🐕 tenía la costumbre de salir a correr 🏃🏿‍♂️ un rato, darle la vuelta a la manzana 🏘, cuando mi papá abría el portón del garaje, para sacar o meter el carro 🚗. Un día, “Cupilla” 🐕 estaba muy tranquilo. Todas las tardes nos sentábamos en el patio a conversar y merendar 🍪☕, esa tarde no recuerdo que pasó, pero no salimos.

Mi mamá estaba preparando el café ☕, “Cupilla” 🐕 entró por primera a la cocina, después de tantos años (había aprendido bien la lección), se le abalanzó a mi mamá, le dio su buena lamida en el cachete 😋 y luego salió de la casa 🏠. Eso fue extraño 🤨. A mi mamá no le dio chance de reaccionar. Luego se fue al patio, hizo lo mismo con mi papá.

Al rato, yo salgo al patio y lo veo temblando 😖 y botando espuma por la boca 🤮. Corrí 🏃🏻‍♀️ a llamar a mi papá. Lo auxiliaron como pudieron, le dieron leche 🍼 (Leche La Campiña, por cierto), pero ya era demasiado tarde. “Cupilla” 🐕 murió envenenado ☢️. Había comido algo en la calle, esa tarde que salió a correr 🏃🏿‍♂️ cuando mi papá llegó.

Dicen que los perros 🐕 no tienen sentimientos 😍. Difiero de eso. Lo único que les falta a ellos, es articular palabras coherentes como nosotros🗣. Son muy inteligentes y fieles a su dueño 🙏🏼, a esa persona que los apoya y les brinda cobijo y refugio cuando más lo necesitan. Ese día “Cupilla” 🐕 se despidió de sus dueños antes de morir 😢.

Cada vez que veo la película “Siempre a tu Lado: Hachiko” 🐕 protagonizada por “Richard Gere”, recuerdo a mi Amigo Fiel, “Cupilla” 🐕. Me hubiese encantado mostrarles una fotografía 📸 de él, pero para ese entonces no teníamos en casa cámaras fotográficas 📷. Pero a su vez, conservo ésta fotografía, que es de la perrita “Laica” 🐩, una de las hijas de “Cupilla” 🐕. También fue muy fiel a nosotros, pero como “Cupilla” 🐕, ninguno.

_{“Laica” la hija de “Cupilla”.}

Mantengo una relación amorosa 😍 y agradecida 🙏🏼con el aire 🌬, el sol 🌞, el agua 🌊, las plantas 🌳, los animales 🐕 y las cosas 🛍. La Naturaleza también es mi Madre 🍃.

Quiero agradecer a @wendyalexa y a la Comunidad Latina por ésta maravillosa iniciativa. Creo que me extendí mucho en mi historia, pero no pude evitarlo 🤷🏻‍♀️. Me hizo recordar momentos muy especiales. Desde entonces, no he querido tener a ningún perrito 🐶 bajo mi entero cuidado. Ahorita solo tengo a mi tortuguita “Schichi” 🐢.

Además deseo invitar a @luimer79, @teretiti y @wilar, para que participen en éste extraordinario concurso.

Concurso Coti-Amigo, Semana #3 / “Hagamos un mundo mejor, ayudando a los animales”, Cuéntanos una historia de rescate, adopción o ayuda de cualquier animal de fauna doméstica o silvestre. Por: @wendyalexa

Hasta la próxima nota.

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