A través de la ventana del autobús

  Viajar es una de mis pasiones, desde que estoy pequeña he viajado mucho es algo que se lo agradezco a mis padres, siempre me permitieron ir a lugares que incluso ellos aún no conocen, fui a todos los paseos escolares que hicieron y en vacaciones, viajaban con alguna de mis tías, luego tuve edad para viajar sola y con mi dinero esa es otra experiencia así que cuentos montada en un autobús tengo muchos, pero en esta oportunidad les contare cual ha sido mi viaje más largo y el que me marco la vida para siempre.

Viaje Venezuela - Perú / Perú - Venezuela

  En el 2018 tuve que salir del país por cuestiones de salud, planifique mi viaje en un mes así que no me prepare psicológicamente para ese momento, a medida que pasaban los días yo sentía que una parte de mí se apagaba, ese día amanecí llorando y así pase todo el día, puedo decir que por primera vez no estaba emocionada de viajar.

  Llego el momento de subir en el autobús en valencia, yo me fui sola, llore toda noche y parte del día siguiente yo saldría por la frontera de Apure, el autobús se accidento y ese viaje fue más largo de lo debido, cruce en la mañana por la frontera de Arauca, me seque mis lágrimas me recogí el cabello y me fui hasta el terminal, primera vez que salía del país, yo estaba tranquila, estoy acostumbrada a estar en terminales.

  Fueron 6 días de viaje continuo, me bajaba de un autobús y me subía en otros los recorridos más corto son de 12 a 18h, con una sola parada de 30min aproximadamente.

  Mi viaje de ida lo hice llena de nostalgia, la incertidumbre iba en camino a lo desconocido no sabía lo que me esperaba y recordar las lágrimas de mi madre me robaban el pensamiento en muchos momentos, dormía muchísimo prefería dormir antes de llorar.

  Aun así trate de disfrutar la experiencia, cada paisaje, los cambios de clima son bastante fuerte, se pasa del calor al frio varias veces, se come poco, aun cuando los autobuses ahora son más cómodos, tienen Tablet para ver películas, videos, wifi y los baños agua tantos días se vuelve agotador.

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  Salí sola de mi casa y llegue acompañada de 7 personas extrañas en las que me toco confiar sin contar los que seguían a su destino que eran distintos al mío, en Cali conocí a Carolina y a Oscar hoy son grandes amigos, desde momento hice grupo con ellos, sorprendidos me felicitaron por mi valentía al verme sola y no me dejaron seguir sola, decían que era bastante peligroso y razón tenían.

  Luego poco a poco se iba agregando personas al grupo nos tocó confiarnos uno a los otros equipaje, hacer turnos para dormir y protegernos en cada frontera, cantamos, reímos y todos contamos los motivos que nos hicieron salir de Venezuela, lloramos juntos, compartimos comida, reuníamos dinero comprar la comida y ahorrarnos algo, terminamos siendo familia al final del recorrido, luego de conocerlos mi estado de ánimo cambio por completo.

  Llegue a mi destino luego de recorrer 4 países yo sola, un primo me busco en el terminal, ese día sentí como una parte de mi había vuelto al cuerpo a pesar de estar lejos de papá y mamá, me sentía segura de estar con mi familia y a la vez ganadora, todos nos dimos las gracias no fue fácil el recorrido.

  Aun mantenemos contacto pero muchos ya cambiaron de pais, no perdemos la esperanza de volvernos a ver, siempre decimos que nos debemos un viaje como vacaciones todos juntos, fue un bonito grupo de viaje.

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  Casi 5 años después realice el viaje de retorno a Venezuela, este viaje lo volví a realizar sola, fue igual difícil dejar todo lo que había construido en esos años, despedirme de mi familia y amigos es igual o hasta mas doloroso, pero con la diferencia que este viaje era agridulce, estaba entre la nostalgia de salir lo que había sido mi casa y zona de confort por años y al mismo tiempo volver a mi casa materna, saber que estaba próxima a ver a mis padres y volver a sentir ese calor familiar que no se compara con nada me traía emocionada.

  Llore mucho mientras salía de Lima, no sentí miedo me daba tristeza de no poderme traer a todos mis seres queridos mi corazón aún está dividido en dos países, este viaje fue más sencillo, ya sabía lo que debía hacer, los carros que debía tomar, viaje confiada, en este viaje hice amistad 2 días con un señor con quien viaje desde Perú hasta Colombia.

  El vio mi seguridad y la forma de movilizarme, le genero confianza y coordinamos el cruce juntos, ahorramos dinero compartiendo gastos de taxis, y carrucheros andando juntos y antes de despedirnos me regalo un paquete de galletas oreo como agradecimiento el no conocía muy bien el camino y se apoyó mucho en mí y yo en el por temas de seguridad, la frontera Perú - Ecuador es muy peligrosa especialmente para las mujeres, y aunque yo estaba tranquila a cruzarla sola su compañía en esos momentos fue puesta por Dios.

_{(Fotografías tomadas desde el autobús)}
  En esta oportunidad disfrute más de los paisajes, en mi viaje de ida muchos no los había visto por ir dormida, en el recorrido se pasa por desierto, montaña, llano y costa. El clima no fue problema en este recorrido en muchos autobús me toco viajar sola en el puesto y aprovechaba de ponerme cómoda.

  De regreso demore 4 días, donde más me toco esperar fue en Bogotá 12 horas para poder llegar a la frontera en la mañana, este viaje lo disfrute mas aun cuando no hice tantos amigos, contaba el tiempo para llegar, me corrían lágrimas de alegría estuve mucho tiempo esperando que este viaje fuera posible.

_{(Bogotá 2022)}

  Ha sido mi mayor experiencia montada en un autobús, lo vivido y lo viajado no me lo quita nadie, viajar te hace crecer, aprendes y disfrutas mientras conoces lugares nuevos, no cambiaría nada de estos recorridos aun cuando el viaje de ida fue muy doloroso, en mi destino me esperaban muchas cosas buenas, tengo grandes amigos de estos años, conocí el amor, aprendí de una nueva cultura, cada día de viaje ha valido la pena tanto de ida como de regreso.

  Pronto me toca emprender este viaje nuevamente y estoy segura que me lo disfrutare al máximo.

  Invito a @yennyteran @paholags @syllem a participar en este bonito concurso A través de la ventana del autobús

Todas las fotografías son de mi propiedad fueron tomadas por mí con mi VivoY53S y las fotos del 2018 con mi Moto G1