De niña siempre creí que los personajes históricos importantes siempre fueron hombres, pues nunca se le daba tanta importancia a las mujeres, aun cuando desde tiempos remotos muchas tuvieron un papel relevante en la historia.

Hablando de la historia de Venezuela, solo se mencionaba la Negra Hipólita y la negra Matea como la nana y nodriza del libertador, a Manuelita Sáenz como el amor de Simón Bolívar, minimizando la lucha que ella también hizo por la libertad.

Conforme fui creciendo las mujeres fueron tomando parte importante del día a día y en la escuela se le dio visibilidad a todas las mujeres heroínas que formaron parte del movimiento independentista y así fue como conocí a la heroína Juana La avanzadora.

En la escuela, no como estudiante, sino como maestra, aprendí un poco más de su vida, su lucha y lo guerrera que fue, mientras más investigaba sobre ella más me llamaba la atención y la admiraba.

Juana Ramírez, mejor conocida como Juana La avanzadora, Nació un 12 de enero del año 1790, su madre, una esclava traída de África, pero al momento de su nacimiento fue liberada. Juana fue protegida por Teresa Ramírez, quien tiempo después le dio su apellido.

Al ir creciendo y desarrollándose, Juana logro tener una gran estatura y con un carácter imponente, al momento de hablar todos le hacían caso, con sus ideales contagiaba a los esclavos sobre su pasión por la independencia.

Sus primeras luchas fue con su padre, luego comenzó como mensajera, llevando mensajes secretos y suministro, pero esto no era suficiente para ella, Con el tiempo comenzó a realizar actividades de logística y atendiendo a los heridos, comandando a un grupo de mujeres que la ayudaban.

Pero el día de avanzar llegó, dónde la envía como apoyo para los patriotas, Juana se fue junto a su grupo de mujeres que lideraba a luchar por la independencia, con el tiempo las mujeres y Juana fueron Instruidas para Disparar cañones y pelear juntos los hombres en las próximas batallas.

Su nombre de la Avanzadora se lo da Piar al ser unas de las primeras en avanzar hacia el ataque con una espada que llevaba en su mano y le pertenecía a un realista que había caído en otro combate.

Aunque en este combate Ramírez lleva una espada, a ella se le recuerda con un machete, ya que fue la herramienta que siempre usaba y simboliza su valentía, determinación y lucha por la independencia.

En dos oportunidades tuve la dicha de interpretar a Juana como una mujer valiente y heroína de nuestra patria, y pude comprender que ella es un ejemplo inspirador, de lucha y liderazgo, una mujer que no se quedaba, ella siempre avanzaba sin miedo.

Invito a participar a @alejos7ven @yonaikerurso y @karianaporras en ¿Cuál es tu personaje histórico favorito?

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