SEC-S14 /W2 |"Padres, nuestros pilares de fortaleza 👪"

  La figura que tienen nuestros padres en el núcleo familiar, es una clave fundamental para el desarrollo que vamos a tener durante nuestro ciclo de vida porque, gracias a las enseñanzas y orientación que recibimos, nos formamos como personas seguras, saludables, con autonomía y, dispuestos a emplear la independencia cuando llegue el momento.

  Nuestros padres son los encargados de estimularnos para ser personas que disfrutan aprender y, aprovechar las diversas oportunidades que se nos van presentando durante el transcurso de la vida porque, de esa manera lograremos desempeñarnos en el lugar adecuado de la sociedad por lo tanto, se puede decir que los padres son nuestros cultores de vida.

  Durante todo mi ciclo de vida, mi papá ha sido la figura que siempre ha estado presente porque, mi madre biológica no lo quiso estar; sin embargo, él contó con el apoyo de mis abuelos y tíos para garantizar un excelente moldeo de personalidad. En vista de esto les puedo decir que, crecí viendo un padre amoroso, disciplinado, familiar y trabajador además de aficionado a la evolución del aprendizaje porque, aún cuando ya tenía estabilidad como profesional en el mundo de la Ingeniería Civil, seguía preparándose para estar al nivel de grandes oportunidades.

  Gracias a estos ejemplos que vi en mi papá, me discipliné siendo así y aunque temperamentalmente hablando somos del polo opuesto, cuando se trata evolucionar en los diversos escenarios de la vida y emplear la resiliencia, somos extremadamente parecidos.

  Cabe destacar que, el sentido de la aventura también lo aprendí de él y en vista de esto, tengo la certeza de que mi personalidad decidida y dispuesta siempre a salir de mi zona de confort lo aprendí de mi papá porque desde pequeña siempre me ha dicho que, bajo ningún concepto debo dudar en ir por mis sueños.

  Mi papá fue y sigue siendo mi principal apoyo en absolutamente todo y, lo digo de esta manera porque a pesar de que hoy día tengo independencia, siempre está allí en primera fila para motivarme e inspirarme con un excelente ejemplo. Les confieso que, mi papá es una pieza fundamental en el equilibrio de mi bienestar y, él antes de que le pida un consejo o abrazo, me lo llega a dar y posterior a eso, siento más seguridad de la que ya tenía o en su defecto, si era algo que me generada dudas o inseguridad, su acción inmediatamente me llevan a canalizar en el nivel adecuado para seguir fluyendo en lo que quiero.

  No fui educada como una persona dependiente pero, sí para aprender las lecciones y filosofías de vida que alguien me puede transmitir y, en este punto mi papá también influye mucho porque, su sabiduría me conduce a siempre buscar todo lo bueno que hay en mi para explotarlo al máximo.

  Si de porrismo queremos hablar, indiscutiblemente mi papá ocupa el peldaño Nº1 porque, diariamente me dice que puedo lograr lo que me propongo ya que, tengo las cualidades necesarias y, mi corazón siempre va a ser el motor que me impulsará a seguir adelante independientemente del obstáculo que se me pueda presentar. Siendo honesta, la motivación de mi papá me ha impulsado a vencer cualquier nerviosismo que he sentido en algunos momentos y, también me impulsa a tener nuevos sueños ya que, desde que la memoria me lo permite él me ha dicho que jamás me ponga techos y, siempre vaya por más desarrollo.

  La motivación de mi papá es tan presente que, varias veces he llegado a pensar que, él cree más que mis cualidades que yo porque, a veces he llegado a dudar en concretar un sueño pero, él jamás duda y cuando veo esa particularidad que tiene, inmediatamente esa desconfianza desaparece por ello, no me queda la menor duda de que mejor porrista que él, no puedo tener y, agradezco inmensamente que sea así conmigo.

  Inicialmente les conté que solamente he crecido con la figura paterna porque, la señora que me trajo al mundo, no quiso formar parte de mi vida y, si de sacrificios se trata, no me queda la menor duda que el más grande que ha hecho mi papá es asumir este rol por su cuenta y contando con el apoyo de mis abuelos y tíos. Diariamente él salía a trabajar para garantizar tener el capital económico que permitiera cubrir mis gastos; también me abrigaba de amor, educación y cuidados por lo que, siempre me dio lo elemental para que me desarrollara con bienestar.

  Cuando cumplí mi mayoría de edad, le agradecí por todas las veces que me llevó al colegio, curó mis enfermedades, me enseñó valores, entre muchas cosas más y, aunque en ese momento ya sabía que en algunas ocasiones estaba cansado por el trabajo; le dije que no podía dejar de admirar que siempre tuviera la mejor actitud y, pienso que eso solo lo hace un padre que quiere lo mejor para sus hijos.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

^{Mi presentación en la plataforma}