Comenzó la temporada mas fria del año, aunque en el sector donde vivo siempre ha sido conocido por ser una de las zonas mas frías de los suburbios de Caracas. No me puedo quejar, he cambiado de vivienda un par de veces, siempre procuro mantenerme por estos lados, pues aunque es un poco alejado, es un lugar relativamente tranquilo y con un clima agradable.

Mi dia comenzo al igual que todos los lunes, a las 6:00 de la mañana, muy activo pues descanse bastante durante el fin de semana. Al levantarme hice, como siempre, mi rutina de ejercicios, mi aseo personal, vestirme y verificar el puesto de las cosas que habitualmente me llevo para salir a trabajar, como la comida.

Tome el transporte publico a eso de las 7:45, el trafico estaba ligero, por lo que no me demore mucho en llegar a la oficina. En estos meses el trabajo es poco o casi nulo, por lo que mayormente nos toca quedarnos pendientes a ver si se requiere algo de la sede central, si no se presenta ningún requerimiento, solo nos quedan algunas tareas administrativas que ya a mitad de mañana están culminadas. Y así fue hoy.

Después de culminar mis deberes en la mañana, use mi teléfono móvil para escribir un post en Steemit, una participación en uno de los concursos de Steem Engagement Challenge de la comunidad de Scouts y sus amigos sobre nuestros juegos favoritos. Yo lo hice sobre el Mahjongg, un juego muy básico que tengo en el repertorio de mi PC personal y la de la oficina, que sirve para practicar tu sentido de la observación y de la estrategia. Es uno de mis juegos preferidos.

Luego de terminar el post, verifique si habia algun asunto pendiente antes de ir a almorzar. Afortunadamente fue una mañana tranquila, donde los servicios de nuestra dependencia no fueron requeridos.

Ya comenzando la hora pesada de la tarde, una de las compañeras me pregunto que si no se iba a decorar la oficina por las fechas navideñas. Le comente que estaba en espera de respuesta de algunas reparaciones que había que hacerle al espacio, pero que las oficinas si se les podía hacer un "cariñito" por la navidad. Así que me pidio el favor de que le ubicara los adornos de la oficina para ella pasar la tarde decorando y no caer en el aburrimiento.

Me puse a ayudarla moviendo las mesas, desenredando las luces y recogiendo lo que iba quedando de lo que ella usaba para la decoración, poco a poco fue armando el pesebre tradicional, que es uno de los principales elementos decorativos de las navidades venezolanas.

No nos dimos cuenta que la tarde se fue muy rápido, el resto de los obreros se apresuro a irse a cumplir con sus obligaciones familiares, como buscar a los hijos a la escuela para llevarlos a casa, comprar algunos víveres, mientras que yo me quede recogiendo y limpiando el desorden que quedo después del proceso de decoración.

Después de cerrar las oficinas, me conseguí con la escena final que ilustra mi publicación, la familia de gatos que tenemos viviendo en nuestras instalaciones, durmiendo todos juntos después de comer. Se veían de concurso y no perdí la oportunidad de sacarles una foto.

En el ocaso del día una leve llovizna me acompaño en el recorrido de vuelta a casa, cerrando una jornada que debería haber sido completamente rutinaria, pero a pesar de la rutina, te das cuenta que un dia nunca se parece a otro. Siempre hay personas, e incluso animalitos que hacen que todos los días sean especiales.