Un diario y mis cinco sentidos.

No hay otra forma de percibir y estar en contacto con la realidad del mundo que a través de nuestros sentidos. Sin ellos, difícilmente podríamos disfrutar y saborear las cosas maravillosas que nos ofrece la vida. Al poner en práctica nuestros sentidos, aumentamos nuestra imaginación y nos volvemos muy creativos. Nuestros sentidos nos ayudan a vivir y a estar en contacto permanente con las cosas especiales de la naturaleza y del entorno.

Cuando me despierto temprano, mi esposa envuelve mi olfato con el aromático café que prepara por la mañana con un delicioso desayuno de pastelitos de queso, que enamora mi paladar y mi sentido del gusto también cobra fuerza para empezar un buen día con energía.

Después de mi desayuno, me dirijo al jardín productivo de mi casa y entro en contacto con la naturaleza, donde el sentido de la vista se pone en práctica para visualizar el desarrollo y crecimiento de las plantas. Del mismo modo, puedo ver qué plantas pueden estar afectadas por una plaga y proceder a su mantenimiento y saneamiento. También puedo observar las plantas que necesitan más agua para proceder a su respectivo riego.

En cuanto observo las plantas de mi jardín y hago su respectivo riego, me dirijo a la zona de las plantas medicinales y procedo a mantener las plantas medicinales, especialmente la "menta o poleo" que utilizamos mucho como beneficio para nuestra salud. El sentido del tacto es importante para algunas plantas que son muy delicadas, con las que no todo el mundo puede tener contacto, porque tienden a marchitarse o secarse.

Una vez le dijimos a una amiga que cogiera unas ramas de orégano y después de cortar varias ramas, al día siguiente la planta se secó. Quizás, esto parece una curiosidad de la creencia, pero es una experiencia que tenemos, que nos lleva a cuidar todas las plantas del jardín.

Al terminar mi recorrido por el jardín de mi casa, tomo un descanso y luego procedo a hacer un devocional leyendo la palabra de Dios y lo acompaño con música instrumental suave para que el escuchar la música me ayude a concentrarme en la lectura y memorización de algunos pasajes bíblicos, ya que la música instrumental es muy relajante y me ayuda a concentrarme mucho.

Así culminó la jornada de un diario en el que se ejercitan los cinco sentidos como una actividad rutinaria, pero con un gran significado que nos permite apreciar que sin la parte sensorial podríamos estar aislados del mundo.

Antes de despedirme quiero invitar a @nanidi, @mireyalongar y @enivelo a sumarse a esta iniciativa y participar.

Gracias amigos que se tomaron el tiempo de leer y comentar. Las imágenes de este post son de mi propiedad.