Dos Cuentos sobre el "Efecto Placebo".

Una vez un amigo médico me contaba de un señor que iba todas las semanas a verlo a la consulta, se quejaba de que tenía muchos dolores y al revisarlo y realizarle los estudios de acuerdo a los síntomas que describe, sorprendentemente el señor no tenía nada. Aunque mi amigo le explicaba que todo estaba en su mente, el seguia insistiendo que se encontraba muy enfermo.

Cierto dia mi amigo había tenido un dia muy dificil, aun asi fue a dar su consulta y el señor en cuestión lo estaba esperando. Volvió a decirle que los dolores lo aquejaban y que tenia que hacerle algo, sabiendo que todo estaba en su cabeza el doctor le dio una botellita de aceite de ricino y le dijo que se tomara una cucharada diaria por dos días. La semana siguiente el señor regresó contento, pues aunque le dio diarrea los dos días, cuando esta paso se comenzó a sentir mejor.

Casos de personas hipocondriacas vamos a ver muchos, pero no todos tienen este final, en el que el médico se toma los síntomas "en serio" y le receta algo que le dice al paciente que lo va a curar y este cede ante el tratamiento. es una forma "efecto placebo". El concepto de placebo es muy malinterpretado, hay quienes creen que es el poder de autosanarse, aunque no es del todo errado tiene que ver más con la creencia del paciente de que los medicamentos y el tratamiento que le aplica el médico le devolverán la salud.

Este efecto se tiende a ver en personas que tienen enfermedades complejas, de las que difícilmente salgan bien paradas si sobreviven, pero es tanta la fe que tienen en sus creencias, en el médico y las medicinas, que son capaces de recuperarse contra todo pronóstico. Generalmente es cuando dicen que ocurrio un milagro.

El debate aquí es si la persona sano por algún efecto desconocido del tratamiento y los medicamentos, o si bien su fe y creencia absoluta en que va a sanar. Muchas estadísticas dicen que las personas que cumplen con su tratamiento con la plena convicción de que van a estar bien y que recobraran su salud, tienen más posibilidades de lograrlo, a diferencia de aquellas que ven todo el proceso de forma pesimista.

Hace algunos años, presencié una recuperación de un paciente con un avanzado estado de cancer. Era la madre de una compañera de trabajo y le habían detectado un cáncer de mamas muy tarde, a lo que los médico la remitieron a quimioterapia para alargar un poco más su tiempo, pero era muy poco lo que se podía hacer. En ese entonces más de una vez me tocó llevarla al hospital, en mis tiempos de paramédico.

Después de seis meses de largas y dolorosas sesiones de quimio, vi como la señora salio de peligro y como su cancer cedió. Ella solía orar mucho en su camino de ida y de regreso con las pocas fuerzas que le quedaban después de la terapia, decía que no podía dejar solas a su hija y a su nieta en estos momentos. Le hablaba a Dios y le decía que se la llevara después pero no en ese momento.

Recuerdo haberla llevado a su última consulta, el médico le dijo en tono de broma pero con seriedad en sus palabras, "Chama, dime cómo es esa oración y a quien se la decias para enseñarsela a unos cuantos pacientes que tengo aquí". En las oportunidades que tuvimos de hablar con el nos decía lo difícil que era ver a los pacientes deteriorarse hasta encontrar la muerte, que muchas veces se endurecen para ocultar la tristeza.

Estas dos historias se las cuento por dos razones, la primera historia nos hace ver que nunca estamos conformes con lo que nos toca vivir, hasta que algo nos da una fuerte sacudida y nos damos cuenta que siempre pudimos estar bien, pero no lo queríamos. El segundo que sin importar que tan difícil sean las cosas, con la fe, el optimismo y la determinación necesaria, siempre podremos salir adelante.

Si bien no podemos controlar todos los acontecimientos que afectan nuestra vida, si podemos asumir con que actitud los enfrentamos. Tu decides si eres la victima o la persona que jamas se rinde, si sentarte a llorar o levantarte a enfrentar todos los obstáculos que la vida pone frente a ti, incluidos los estados de salud. Bendiciones para todos!