No sabría por donde comenzar en contarles mi historia de cuando solo era una niña, pero mis recuerdos llegaron a mi mente, tenia tiempo que no recordaba mi infancia.

   Recuerdo a mi abuela arreglándome y peinándome para llevarme al jardín de infancias, ya que mi madre trabajaba. Cuando llegaba mi madre del trabajo me abrazaba y me daba su bendición, yo era feliz al verla llegar. No tenia lujos, mi abuela y mi madre me daban lo que podían.

   Mi abuela era costurera de oficio, toda su vida trabajo cociendo ropa, mi madre su aprendiz. Llega a mi mente cuando hacían esos hermosos vestidos de niñas, crecí viéndolas hacer magia con su manos. Compraban telas de muchos colores y estampadas.

   Cuando tenia 6 años mi madre me regalo mi primera muñeca eran tan hermosa!! Fue uno de mis mejores regalos de la infancia, aunque tenia amigas y jugaba mucho con ellas nunca deje de estar en el cuarto de costura con mi madre y mi abuela. Por cada patrón que cortaban en tela me daban retazos de telas para hacerle ropa a mi muñeca. No sabia como cortar ni coser, mi abuela me fue enseñando como tomar la tijera, como era una tijera de punta roma y casi no cortaba bien mis deditos se ponían rojos jajajaja!! Pero eso no me impedía cortar así lo hiciera mal, mi abuela me decía ¡te quedo hermoso! así fuera un desastre jajajaja!! Esas palabras me inspiraban en seguir adelante.

   Mi madre dejo de trabaja en fabricas de hacer ropa y se dedico a su taller junto con mi abuela. Obtuvieron una mejor maquina de coser y el negocio de los vestido comenzó a crecer. Yo muy feliz de ver a mi madre todos los días en casa y cerca de mi.

   Cuando cumplí mis 9 años ya era toda una experta en la costura ya sabia cortar mejor la tela y coser, me reunía con mis amigas de mi misma edad y nos poníamos hacerle ropa a las muñecas con toda esas telas de retazos que nos regalaba mi abuela y mi madre. A veces pasábamos casi toda la tarde jugando el Miss Venezuela con las muñecas, quien estaba mejor vestida, quien hacia el mejor vestidos, casi siempre ganaba yo, mi vecina se molestaba ya que mis amigas votaban por mi siempre jajajaja!!

   Ya cuando cumplí mis diez año mi abuela me regalo un cofre de costura con hilos de varios colores agujas y tijera fue un regalo maravilloso. Aunque era una niña esa era mi pasión llegar hacer como mi madre y abuela una gran costurera. Yo era muy feliz haciendo lo mismo que mi madre, aunque era muy pequeña me motivaba mucho. La verdad ese es mi recuerdo mas hermoso de mi infancia, aunque tuve muchos.

   Cuando se es niño y el solo hecho de hacer lo que mas te guste con el apoyo de tus familiares es el mejor regalo, se es feliz en cada momento de tu infancia.