Aunque conteste esa pregunta tan sencilla y muy rápido, no puedo estar seguro a que respondí, no sé por qué me pregunto eso siquiera, solo estaba parado sin hacer nada, pensando en mi vida mientras él se atrevió a acercarse a mi y preguntarme eso sin ninguna vergüenza, no tengo ni idea porque le conteste en primer lugar pero hizo que entrara en duda ¿En serio tengo miedo?

Tengo miedo de muchas cosas, no puedo y no voy a negarlo, seria eso mentira y no quiero mentir, quiero ser honesto conmigo mismo para poder entender mejor, aquellos que son capaces de mentirse a si mismos ¿Como pueden dormir tan tranquilos? han engañado a la persona que dicen ser o quieren ser, no puedo entender que tan maligno tiene que estar el alma de una persona para poder burlarse de esa manera su propio rostro.

Vivo con miedo, con terror, con pánico, pienso que esa es mi esencia de vida a estas alturas de la misma, no creo ser capaz de vivir sin miedo, incluso cuando sale bien solo pienso como sera arruinado todo, cuando vendrá la tragedia, siempre esta conmigo, esa negatividad... ¿Seria malo o bueno llamar negatividad aquello que ya forma parte de mi vida y no me molesta? La duda, aquella joven dama que siempre me habla y me hace preguntas, adoro las conversaciones con ella aunque consigo traiga realidad o tristeza, algunas veces me digo que ellas dos son hermanas porque llegue a escuchar una vez que la realidad es triste.

De nuevo a esa conversación corta, que no va arriba o abajo, izquierda o derecha, va omnidireccional y al mismo tiempo se detiene en el mismo charco que hizo con mis lagrimas al responder, me pregunto por qué esa persona tiene tanta curiosidad por mi miedo ¿Quien es él? tiene un cuerpo medianamente esbelto, es alto, cabello algo largo, usa anteojos y una barba de hace unos días, tiene la mirada fría y veo sus labios con tristeza, no entiendo como es posible que los labios expresen tristeza, pero la veo, la siento, esa persona que no tiene cuerpo sino solo un rostro, que me mira fijo mientras lo alumbra una luz artificial que proviene del techo. Las personas normales llaman a eso que veo un espejo, pero yo solo veo a una persona diferente, que puede ver que estoy mal sin yo saberlo, que mira a través de mí sin consultarlo primero...