En Caracas-Venezuela tenemos un cerro hermoso, el ávila, como muchos lo llaman el pulmón de la ciudad. Desde pequeña he estado familiarizada con esta montaña, al visitarla llegábamos solamente hasta sabas nieves, que solo es el comienzo de ella, para llegar al pico Hulmbolt usamos el conocido teleférico. Pero un día un amigo me comentó que llegó hasta al Humbolt caminando, lo cual me pareció una locura, pero a la vez me pareció una aventura interesante, entonces pensé "¿por qué no hacerlo?"
Después de planificar y no concluir nada, llegó el día, ese día de reyes, 6 de enero, me determine y me dije "Si quiero ver cosas diferentes, tengo que hacer cosas diferentes". Me determiné llegar al Humbolt a pie, 2481 metros subiendo. Eramos un grupo que habíamos planificado ir, unos 15 aproximadamente, pero al llegar al punto de encuentro habíamos solo 3, al principio había un poco de desanimo, pero no me importó, tenía una meta e iba llegar a ella.
¿Cual fue el resultado? Lo logré, si, fue difícil ya que no había entrenado para esta caminata, a mitad de camino pensaba "¿Quien me mando a mi inventar?" pero al llegar a la cima, ver el hermoso paisaje pensé "wao valió la pena el esfuerzo" al llegar hasta el final del camino estaba cansada pero estaba tan orgullosa de mi, porque a pesar de que en un momento mi tobillo se dobló yo llegué hasta el final. Una meta alcanzada, un reto superado, una satisfacción personal y 3 enseñanzas para mi vida:
1.- Siempre podemos dar mas de lo que pensamos, tenemos capacidades extraordinarias debemos explotarlas.
2.- Querer es poder, si realmente estamos determinados en ver o hacer cosas, lograremos todo aquello que nos propongamos.
3.- Dios es un artista creador, ya que estamos rodeados de una hermosa naturaleza y como privilegeada puedo disfrutar de Mi hermosa Ávila ☻IMG_20160106_152749.jpg