Concurso: Cuéntanos tu Historia. "Mis Primeros 30 Días en Steemit".

Para nadie es un secreto que en Venezuela hay un serio problema económico. El sueldo básico no alcanza para nada. En mi casa vivimos 6 personas, mi mamá que además de trabajar percibe seguro social, mi papá que mata tigritos porque sólo percibe lo de la pensión, una tía que por ser discapacitada no puede trabajar, mi esposo que trabaja todo el día, mi hija de 1 año y yo que trabajo algunas horas para poder cuidar de mi hija. 

Eso nos da un total de 5 sueldos entre todos, lo que serían Bs. 248.510 x 5 = Bs. 1.242.550, a esto le agregamos Bs. 549.000 en bono alimenticio, total ingresos familiares = Bs. 1.991.550 en promedio porque esto es una estimación. Muy bien, parece bastante pero no lo es, sobre todo teniendo en cuenta que la canasta básica ronda en Bs. 13.883.365. A pesar de que todos trabajamos lo que ganamos por ello no nos alcanza ni para cubrir los gastos de la semana, es duro pero ya estamos acostumbrados a hacer magia para sobrevivir. 

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Eso fue lo que nos impulsó a mi esposo y a mí a buscar alternativas, lo que nos llevó a trabajar por internet.  Investigamos mucho y terminamos inscritos en una variedad de páginas “milagrosas” que resultaron ser estafas. Sólo unas pocas se salvan. Ya llevábamos más de un mes haciendo estos mini-trabajos para ganar unos pocos centavos, cuando yo descubrí el mundo del Freelance. Me pareció maravilloso, yo tenía experiencia escribiendo, pero sólo a nivel a nivel personal, nunca pensé en cobrar por revisarle la tarea nadie, y ahora se abrían ante mí estas puertas y me pareció que las posibilidades eran infinitas. No fue así. 

Para los que son freelancer profesionales sabrán lo dura que es la competencia, me estrellé contra el muro de la experiencia, yo no tenía ninguna, sólo mi buena fe. Estuve meses paseándome por distintas páginas todos los días y supe que si yo no tenía la más mínima idea de lo que era SEO, marketing digital, e-commerce, copywriting o diseño gráfico no tenía posibilidad alguna en ese medio. Yo siempre he sido autodidacta, así que me puse a leer al respecto y así fue como descubrí que el conocimiento es dinero, para acceder a conocimientos profundos o específicos tenía que pagar por ellos, es una buena inversión pero yo no tenía los fondos. Además yo nunca he sido buena con el mundo de la informática y la tecnología, lo poco que sé fue lo que aprendí en la universidad, leer un poco al respecto no me haría experta. 

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Seguí investigando y buscando más alternativas, así fue como supe de Steemit, no recuerdo dónde pero leí un artículo que hablaba de esta comunidad y enfatizaba sus posibilidades para la comunidad venezolana. Ese mismo día me inscribí, revisaba ansiosa mi correo varias veces al día hasta que al fin, al séptimo día llegó el anhelado correo, fui aceptada. 

Ya había visto videos en Youtube de personas como @maybil que me dieron una idea un poco más amplia de lo que es Steemit. Para quien no sabe nada de criptomonedas ni de creación de contenidos, es abrumador. Mucha información que procesar a la vez. Mis obstáculos iniciales fueron las fuentes de las imágenes y el markdown (todavía me hace sufrir), varios tutoriales después pude editar mi perfil e hice mi “introduyourself”, de los nervios no lo extendí tanto como hubiera querido pero sí expresé lo básico. Desde que comencé supe que quería escribir sobre mi pasión por los libros, pero no sabía si a alguien le gustaría leer de ello, empecé a publicar mis poemas con el corazón en las letras, participé en mi primer concurso, comentaba, reestimeaba y daba muchos upvotes sin saber que me estaba excediendo, que debía tener cuidado porque la felicidad tiene un límite. Me obsesioné totalmente con Steemit, pasaba horas leyendo las diversas publicaciones, no sabía cuándo parar.  

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Un día le di clic a un enlace pensando que me llevaría a otras publicaciones y aterricé en discord, casualmente el de @cervantes, esa primera vez me pareció haber pasado a otra dimensión, una caótica, sin sentido y me sentí totalmente fuera de mi zona de confort, me dejó aturdida. Tras varios intentos y algunos tutoriales más pude entrar sin miedo, comencé a explorar las distintas salas y sus reglas de convivencia. Todavía soy tímida en los chats grupales pero voy aprendiendo. Uno realmente aprende en los grupos de discord, me sorprende que uno pueda preguntar y nadie se ofenda por hacer preguntas que uno cree tontas, no son mezquinos con el conocimiento, al principio nadie sabe nada y ser conscientes de ello nos vuelve más humildes. 

Un día que no sabía que escribir, le pedí ideas a mi esposo y él me dijo: ¿por qué no les cuentas tu historia sobre lo que pasaste en el materno?, él sabe lo difícil que fue para mí y lo que significaría contarlo. Ahí fue cuando todo se me salió de las manos, empecé a escribir y llené hojas y hojas y no llegaba a ningún lado, tuve que reescribirlo, resumirlo y dividirlo en 3 partes para que fuera digerible. Publicar esa primera parte fue duro para mí, una amiga me dijo que lo publicara en inglés también y así lo hice.  A esas alturas ya sabía que debía limitar mi voto para no votar nulo, pero nadie me advirtió sobre el ancho de banda o “bandwich”, en enteré al otro día cuando le quise comentar algo a una publicación y ya no pude, me dio la crisis, al parecer nada podía hacer hasta recuperarme, gracias a @onthewayout por orientarme.

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Al día siguiente noté algo extraño, había aumentado mi experiencia de forma inexplicable, en la noche era 29 y en la mañana era 38, que raro pensé, es cuando noto que mi artículo Dar a luz en Venezuela pasó de estar en 0 a tener más de 21 $, vi que tenía muchos votos y cuando le di clic a la flechita para ver quienes habían votado vi el voto del famoso @cervantes. Empecé a gritar y saltar como loca, mi familia se asustó y yo sólo gritaba ¡soy rica, soy rica, cervantes votó por mí! Estaba totalmente extasiada, según mis cuentas de ese día redondeando tenía 21 SBD, menos el 25% de los curadores, menos el 50% del Steem Power, me quedaba un aproximado de 7,875 SBD por 6 USD (precio de ese día en el mercado) me daba un resultado de 47,25 dólares, por Bs. 300.000 me daba un total de Bs. 14.175.000, como dije me sentí millonaria. 

Ya me veía comprando un montón de cosas con ese dinero, le daría una parte a mi mamá y todavía me quedaría para invitar a mi amor a una cena romántica para el día de los enamorados. Me había prometido a mí misma que con mi primer pago de Steemit me daría el gusto de comer dulces hasta atiborrarme. Pero, hay un dicho muy sabio que dice: “no hay que contar los pollitos antes de nacer. El mercado de las criptomonedas se vino abajo días antes de que se cumplieran los 7 días de espera, vi con pavor como el monto de mi publicación valía cada vez menos horas antes de que me pagaran. Al final no fue tanto lo que obtuve como creí en un principio pero igual fue más de lo que nunca pensé que obtendría en mi primer mes.  

Invertí un poco en mi Steem Power, me comí un dulce con mis amigos y le compré a mi hija unas cosas que de otro modo no podría comprarlo. Le debo a mi esposo la cena romántica, pero a lo mejor para cuando cumpla los 100 días les tenga mejores noticias. Por mi parte, yo seguiré publicando sobre lo que me gusta, ya publiqué la segunda parte de mi historia en el materno y por encima de todo no me rendiré, sin importar lo que perciba por mis artículos me siento muy afortunada, nunca pensé que al mes tendría más de 100 seguidores ni que tantas personas me leyeran y les gustara. He aprendido mucho y sé que me falta mucho más. Además si @cervantes me votó una vez significa que algo estoy haciendo bien ¿no? Quien quita que se repita alguna vez.  

MIL GRACIAS!!!