Fue una tarde como cualquier día, soleado y cálido, nos encontrábamos un grupo de estudiantes para asistir al acto de la conmemoración de la firma del acta de independencia, era el primero al cual asistiríamos y todos lógicamente emocionados, sin embargo me sentía indispuesto para el mismo y ya me encontraba predispuesto en no participar, y ya le había planteado a mi superior inmediato en cambiarme de vestimenta el cual me habían aprobado mi solicitud.

Una vez el componente de compañeros se apresuraron en formarse, yo tome mi destino para cambiarme, sin embargo me encontraba con una bella chica la cual había planteado estar indispuesta para participar, y me pidió acompañarme, el oficial encargado le dijo que por el no había problema, pero que fuéramos rápido.

Al continuar mi camino tome un taxi hasta el restaurant de mi padre, para que me diera las llaves, sin embargo al subirnos al taxi, entra en mi un instante de picardía y le doy un beso a la chica, ella me encantaba pero por temor a ser rechazado nunca se lo había comentado, sin embargo ella me respondió el beso, en mi mente me decía:
-¡No lo puedo creer! ¿qué está pasando?
Pero seguí al llegar a mi destino me tome un sorbo de vino y me desvié a mi destino principal, el cambiarme, la situación está en que ella no tenía conocimiento que para ese entonces vivía en un hotel.

Al llegar al destino con un aire de seguridad solicite las llaves de la habitación y por dentro estaba nervioso, no sabía que debía hacer, pero ella vio el número de la habitación y me tomo de la mano.

Frente de la puerta tomo un respiro y apalanco la llave con toda seguridad y abro la habitación, ella muy tranquila se sienta en la cama y me pide que me cambie para irnos con los compañeros, pero me quito mi camisa y volteo a verla y me detengo frente a ella con mis dedos rozo su mejilla y con la otra mano la levanto hacia mí, para luego darle un beso muy suave, su mano se entrelaza entre mi cuello y la otra me toma del cabello jugueteando poco a poco.

Por Instantes estuvimos en ese sentir de besos, para luego muy sutil abalanzarnos hacia la cama para continuar besándonos pero ya deja de ser un instante tierno de besos para continuar con una entrega fogosa de sentimientos, empiezo a quitar poco a poco cada pieza de su ropa hasta tenerla frente a mí con una hermosa lencería que me dejo impactado, jamás había visto a una dama así, pero ella me observa y me quita el pantalón me lleva a su cuerpo y cubre tan majestuosa escultura con unas sábanas blancas, y me dice al oído:

• Tranquilo, que si es tu primera vez, lo harás bien.

Sus manos rozaron cada centímetro de mi piel y la mía por sobre la de ella, como cualquier inexperto fue en instantes que me fui, pero era tantas esas ganas reprimidas que continué, sucediendo estos tantas veces que no recuerdo, solo sé que todo fluyo tan bien que al terminar me da un beso y me dice, jamás dejes de ser como eres, tan apasionado, tan cariñoso y tierno, para ser tu primera vez lo hiciste muy bien.