Cuando se va nuestro ser querido

Hola, hoy quiero hablar de un tema que a pocos les gusta tocar, pero cuando ese ser querido nos deja es inevitable que pase desapercibido. Es cierto, todos vamos a pasar a ese plano, unos primeros otros después, pero al recordar el momento cuando mi ser más querido me dejo sentí mucha tristeza. En primer lugar, una tristeza que no me dejaba ver más allá. Fue muy doloroso ese momento. Fue de gran consternación, unas emociones que nunca había experimentado.

Pasa algo con ese tema, nadie lo comenta, nadie nos advierte, que es lo más seguro que tenemos. Cuando somos amables, atentos, y tenemos la posibilidad de cuidar, dar todo por ese ser querido, puede que sea más liviano llevar esta realidad. Muchos perdemos el tiempo disgustados con nuestros seres queridos, vivimos buscando la perfección, si no hacen lo que queremos podemos ser muy rudos. Dedicamos tiempo a todo,y a todos, sabemos cuándo cumpleaños hasta el gato del vecino, pero con nuestros familiares hacemos una barrera. Nuestros compañeros de trabajo son prioridad, celebramos el aniversario de nuestra compañía, pero el de aniversario de bodas, se nos puede llegar a pasar, pero el de mi compañía jamás, así le decimos mi compañía, mi empresa, ese sentido de pertenencia que nos hace sentir orgullosos y no está mal…Pero nuestros seres queridos, también nos necesitan.

Quiero compartir esta experiencia, la muerte de mi ser querido. A pesar que aún estaba joven, no sé qué pensaba, que mi amada duraría toda la vida. Que era algo eterno, que seguro me avisarían, cuando sería el día que ya no la volvería a ver. Esta experiencia me sirvió para decir a mis hijos muchas cosas. Les digo que cuando muera no lleguen al grado de deprimirse que puedan llegar a perder su cordura, su salud mental, y sobre todo no encerrarse hasta que la rabia o el dolor los consuma. Que por favor no se vayan a revolcar en esa tierra, donde me van a meter, en fin, de manera jocosa les digo las cosas, sé que cuando llegue a pasarde eso me recordaran y seguro entre llanto también sonreirán. Todo esto, si se cumple esa ley divina y primero deba partir yo. Eso espero…. Ojalá de corazón sea en ese orden, de lo contrario ya eso sería otro tema. Ellos de manera muy jocosa me dicen:” está bien mami nosotros vamos a decir:" yupi yupi mi mamá se murió” bueno tampoco así, les respondo.

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Siempre llegan personas en esos momentos que te dan esa palabra de aliento y de solidaridad. Recuerdo con mucho agradecimiento a una señora que me dijo: Fue una gran persona tu abuela, y eso me reconforto, y así iban llegando, otra me decía estará en un mejor lugar que ya se gano, en fin, hubo una que saco su biblia y me dijo cuándo puedas busca esta cita bíblica y me entrego un papelito decía: 1 Carta de tesalonicenses. Capítulo 4 del 13 al 18. ¿Qué iba a estar buscando yo nada, la rabia, el dolor, la ansiedad no me dejaba esa pregunta ¿por qué? Que Dios y que nada. Mis padres divorciados, y ahora me pasa esto. Al pasar de los años conseguí el papel y bueno busqué la cita bíblica, decía lo siguiente:
Hermanos, no queremos que se queden sin saber lo que pasa con los muertos, para que ustedes no se entristezcan como los otros, los que no tiene esperanza. Así como creemos que Jesús murió y resucitó, así también creemos que Dios va a resucitar con Jesús a los que murieron creyendo en él.

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Por esto les decimos a ustedes, como enseñanza del Señor, que nosotros, los que quedemos vivos hasta la venida del Señor, no nos adelantaremos a los que murieron. Porque se oirá una voz de mando, la voz de un arcángel y el sonido de la trompeta de Dios, y el Señor mismo bajará del cielo. Y los que murieron creyendo en Cristo, resucitarán primero; después, los que hayamos quedado vivos seremos llevados, juntamente con ellos, en las nubes, para encontrarnos con el Señor en el aire; y así estaremos con el Señor para siempre. Anímense, pues, unos a otros con estas palabras.

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Todo tiene su tiempo, en ese momento de seguro con la rabia que me embargaba, no hubiese contestado de la mejor manera, no quería nada, no creía en nadie. Solo quería que ese ser querido estuviera conmigo. Que prudencia tan grande la de esa señora. No sé quién era, pero así es esto dar de lo recibido sin esperar nada a cambio. Hoy hago lo mismo llevo palabras de aliento al afligido. Y esta cita bíblica hoy se las comparto si han pasado por este momento de perder a un ser querido. Estemos atentos de nuestros familiares, dediquemos más tiempo, para que cuando les toque partir a pesar del dolor poder decir: “di todo por ellos, de seguro eso nos dará más conformidad hasta ese día que nos volvemos a encontrar, es una promesa de un gran caballero… ¡Lo creo!No dejemos que nuestro corazón se llene de rabía ante este suceso y veamos culpables por todos lados, como sugerencia de una mujer, que le diagnosticaron de todo, por no saber canalizar esas emociones.

No pierdas el tiempo, procura que el tiempo sea tu mejor aliado, comparte más con tus seres queridos...¡Comparte más con tu familia!