Venezuela es mucho más que un desastre político... Tenemos playas casi inexploradas como la de Tuja... -English version available-

Tomé esta foto con mi viejo teléfono Samsung desde la cima de una colina cerca de la playa de Tuja. Hice este exigente y maravilloso viaje con la guía de Emilio Blanco, el capitán del Geamir, Grupo Excursionista de los Altos Mirandinos. Con estos hermosos locos, la caminata fue mucho más placentera:

Después de caminar, a veces sintiendo que ya no podíamos más, durante unos dos largos días desde La Colonia Tovar, un pueblo a una altitud media de 1.800 metros sobre el nivel del mar que fue fundado por emigrantes alemanes a mediados del siglo XIX, se llega a la hermosa playa que alimenta con sus tesoros, la pesca y el turismo, al pequeño poblado de Tuja, el cual fue fundado por afrodescendientes. Ambas poblaciones se encuentran en el estado Aragua, al norte de Venezuela, en las cercanías de la cara norte de la cordillera que forma el territorio del Parque Nacional Henry Pittier.

Quizás no fui lo suficientemente enfático para hablar de lo difícil que es llegar a Tuja... Para poder bañarse en las cálidas aguas hay que descender durante dos días por un sendero muy empinado y estrecho, atravesando primero un bosque de alta montaña y luego una selva de vegetación xerófila con altos niveles de humedad en la que es fácil deshidratarse...

Ocasionalmente, el dolor en tus rodillas por el descenso constante se vuelve tan insoportable que te hace pensar en tirar la pesada bolsa por el barranco y echarte en el suelo reseco a llorar hasta que alguien te rescate en un helicóptero....

Pero, obviamente, somos caminantes serios, así que no hay posibilidad de rendirse: sin embargo, cuando llegué, muy tarde en la noche, a la playa, solo tuve la fuerza suficiente para dejarme caer en la arena. Sin armar la carpa, sin cocinar.... Afortunadamente, un alma caritativa, una de las muchas que abundan entre los excursionistas, me trajo algo de comer....

Al día siguiente me levanté temprano para recoger mi recompensa: Una buena inmersión en las aguas cristalinas... y otra... y otra... y otra.... Pero no por tanto tiempo como me hubiera gustado, ya que un poco antes del mediodía una lancha vino a recogernos para llevarnos a donde nos esperaba el autobús que nos llevaría de vuelta a casa......

No pensarán que íbamos a volver por el mismo horrible camino, ¿verdad? Jejeje...

Aquí les muestro una vista aérea de la exigente ruta, gracias a Google Maps:

😃 ¡Por supuesto, todos ustedes están invitados! 😃