Concurso @Provenezuela 1: Pensamientos tormentosos

Ya hace mucho que siento que las cosas que me emocionaban y me llevaban a la gloria ahora son mi peso, mi condena. Las cosas que más amaba ya no están y debo buscar cosas nuevas que amar para sentirme mejor, pero ¡Diablos!, qué difícil. Y lo peor es que puedo ver que gran parte aun están, puedo percibirlas, pero no apreciarlas, aún cuando creo que todo en este mundo es hermoso y sublime; excepto los demonios que me atormentan, quienes antes solían ser mis amigos y atormentábamos juntos a los demás.

Qué culpable me siento con cada cosa que sucede, ¿Por qué siento que nunca puedo hacer nada bien? Realmente discúlpenme, quisiera poder dar más de mi, dar lo mejor, pero a pesar de que lo intento no me parece suficiente; no me llena y siento algo inefable.

Fotografía de mi autoría. Tomada con BLU R1 HD.
Admiro y envidio a las personas que pueden seguir sin volver a caer, que tienen problemas muchos más grandes que los míos y aun así se pueden alentar a seguir. Yo me aliento a parar, ya que siempre pensé que era la manera de volverme más fuerte, tal vez, pero creo que por el contrario me vuelve más enfermizo.

Creo que nada de esto es justo para ninguno. Ni para ustedes ni para mí. No quiero arrastrarlos conmigo, no quiero que sientan mi escozor, realmente me disculpo con todos porque siempre he querido lo mejor para ustedes, y siento que soy el peor al involucrarlos en esto. Quizás esta es la primera vez que puedo decir lo que realmente siento, ¡Tal vez esto me ayude a sentirme en paz conmigo mismo y no odiarme tanto por querer ser algo que no soy! No quiero, ni puedo serlo, sería como abandonar lo poco que conservo de mí.

Qué nefasto pasar toda una vida fingiendo que todo está bien. Qué cansado me siento de fingir, de mis pensamientos. Seguramente a todos alguna vez he deseado herir, creo que esto es una de las cosas que más me molestan y abruman de mí, ¿Por qué desear lastimar a las personas que amas? Esas personas increíbles que forman parte de este distorsionado mundo. ¡Ah! claro, porque eres demasiado mierda como para merecerlas, terrible crimen que me pudiese imaginar.

He intentado de distintas maneras cambiar todo esto, créanme, por favor; no es algo que quiero hacer. ¡DIOS! por favor perdóname, pero no siento que sea suficiente. Cómo envidio ese espíritu de las personas, las amo y las odio a la vez. Me hace sentir muy trastocado el hecho de que piensen en mí, en que les importe tanto cuando yo creo estar jodido ya.

Mi mente está dividida, no sé si sea algo del signo de géminis y que ambos gemelos vivan en mí. Amo tanto todo. Odio tanto todo. Me siento enfermo. Aun cuando los días son soleados y todos sienten el aroma de la primavera, yo solo siento el petricor, y solo espero que todo esto me consuma pronto. No puedo tolerar la idea de hacer sufrir a los demás, me siento atribulado, ¿Por qué siento que lo tengo todo y aun así que me falta algo?

Quiero volver a mi infancia, esa en la que mis demonios eran mis amigos. En la que nunca llegué a ver las cosas malas. No podía odiar, no podía enfadarme, aunque aún me cuesta molestarme con las personas, me molesto conmigo mismo cuando me siento molesto con alguien más. Esto se supone que debe ser una manera más fácil de darme a entender. Dios mío, ¿Por qué deseo tanto disipar mi mente? ¿Cómo puedo desear tanto algo y no poder hacerlo? ¿Debo anhelarlo más?

Me dan repugnancia y pena las personas en las que alguna vez me he visto reflejado, y no por lo que son, sino por recordarme lo que soy. Me disculpo con mis amigos porque siento que los arrastro. Lo lamento. No quiero que sientan lo que yo, quisiera poder conocerlos en la siguiente vida, y también en la siguiente. Agradezco a todo aquello humano que forma parte de mi universo. No hace falta que se aflijan, ya yo lo hago. Lo lamento en serio. Me siento muy jodido. No sé qué debo hacer. Lo único que me aplaca son ustedes, mis amigos, mi familia, pero no sé cuánto más podré aguantar.

Si pudieran escuchar mis pensamientos, escucharían muchas veces lo mismo:

“Perdido, perdido, perdido.”
“¿Por qué haces todo esto? ¿Qué quieres? ¿Qué quiero? ¿Quién eres?”

Calma, calma, calma. Por favor, ya para. Cállate, cállate. Sal de mí.
¡APÁGATE!

Fotografía de mi autoría. Tomada con BLU R1 HD.

Esta publicación fue creada para participar en el concurso de @provenezuela, espero sea de su agrado.

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