; u ; he tardado en responder este comentario, porque sinceramente no sé qué responder -me he hecho bolita-, solo puedo decir gracias, y que concuerdo contigo en que la plaga de la sobre-polémica es un mal -mucho drama innecesario, mucha banalidad y poca inversión de tiempo y amor en cosas productivas-

Tengo miedo de despertar un día, y darme cuenta que no soy lo que quiero, y que no soy lo que realmente soy, que no me gusto a mi misma -a costa de "gustarle a los demás"-. Entonces solo puedo esforzarme en celebrar/nutrir/insistir en todo lo que me gusta, y en no perder mi identidad permitiendo que me influencie los conflictos y frustraciones que otros quieran proyectar en mi.

A veces también me pregunto qué será de ellos. No todos eran personas básicas, recuerdo con cariño a uno que tenia don para la música -creo hoy es uno de los mejores bateristas del país-, a otra, que era una bailarina estupenda (¡y modelo también!) pero nadie más aparte de ellos recuerdo con algún talento o pasión.