REFLEXIONES ESPACIALES III: Diario de abordo 14023048.
El tiempo continúa, sin descanso, sin fin, pero no para todos. En la Tierra sus familias envejecen, mueren y nuevas generaciones les suceden, mientras tanto a bordo de Madre todo es diferente, el tiempo se paró desde el mismo momento que comenzó la hibernación.
Quizás ya nunca volverán a su hogar, quizás continúen eternamente vagando por el espacio o quizás decidan colonizar otros mundos, nuevos mundos, mundos aún desconocidos y llenos de riqueza natural. Sólo hay una cosa clara, nunca jamás volverán a estar con sus familias, nunca jamás volverán a sentirlos cerca.
Fuente
Ahora el tiempo se ha detenido para ellos, la ausencia de todo y de nada está presente en sus cuerpos. Ni siquiera son capaces de sentir los vaivenes de la nave, producto del campo de pequeños asteroides que están atravesando. Por suerte, ahí está Madre, siempre pendiente, siempre vigilante de que nada les pueda suceder.
Al rato, de nuevo llega la paz, vuelve el silencio y Madre descansa mientras no suceda nada que perturbe el sueño de sus tripulantes o alcancen un planeta habitable que poder explorar.
Fuente
I
II
Muchas gracias!!!!
Estaré atento a la llega de la nave a algún mundo o al momento en que despierten sus pasajeros de la hibernación en la que se encuentran. Te invito a pasearte en cualquier momento por mi novela Cyberocracy
Muchas gracias por leerme, le echaré un vistazo