Cioran el pesimista de la inteligencia.

Uno de los grandes en la literatura su obra no le permitió vivir su existencia de una manera contundente y comoda "Jamás he trabajado", dijo una vez; "he preferido ser un parásito a ejercer un oficio. He accedido a sufrir una relativa miseria con tal de preservar mi libertad". Toda su obra se resume a dibujar aunque a veces contradictorios, siempre repletos de belleza, versaron sobre el fracaso, la indiferencia, la lucidez y la muerte. Es pilar fundamental en el pensamiento considerado el último gran exponente del pesimismo occidental. Sus frases son ya famosas por la profundidad de sus pensamientos.

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Cuantas menos esperanzas tenemos, más orgullosos nos sentimos, hasta el punto orgullo y desesperación se desarrollan a la vez.

Friedrich Nietzche fue su filósofo de cabecera, pero estudió también con fruición la obra de Bergson, Hegel y Husserl, y mantuvo una devoción vitalicia por Shakespeare y Dostoievski. Esto permite traducir el alma de su obra. Hijo de un pope rural, estudió filosofía en Bucarest, tras lo que escribió una tesis sobre Bergson. Viajó a Alemania y fue por breve tiempo profesor de filosofía en Brasov. Su pesimismo, su indiferencia, su desprecio por las circunstancias de la vida, tuvieron una enorme repercusión en una sociedad francesa que abrazaba el existencialismo.

Cuando se ha salido del círculo de errores y de ilusiones en el interior del cual se desarrollan los actos, tomar posición es casi imposible. Se necesita un mínimo de estupidez para todo, para afirmar e incluso para negar.

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Su obra se puede resumir en el pesimismo escribio primero en lengua Rumana y Francesa entre ellas se encuentran las cimas de la desesperación (1934), El libro de las quimeras (1936), De lágrimas y de santos (1937), El ocaso del pensamiento (1940) y Breviario de los vencidos (escrito durante la ocupación nazi de París).

En el año 1946 decidio renunciar a su nacionalidad y se consagro como un apatrido adopto el idioma francés para tratar de comunicar con el paso siguiente su obra breviario de podredumbre (1949) será su primer texto escrito en francés, a modo de desafío a sus raíces y a la afectividad que se vincula con ellas y con el idioma.

Un hecho curioso su vida y su obra, indisociables, se sitúan en la periferia de lo establecido, al margen de cualquier convencionalismo. Así, renunció al termino "filósofo", adoptando el de "pensador orgánico"

Su virtud es todo lo contrario al famoso término medio. En sus textos, las expectativas se frustran por el exceso con sus afirmaciones categóricas. Cioran recuerda en sus diarios los últimos años de Rumanía como un tiempo convulso, en el que afirma haber experimentado momentos de éxtasis seguidos de la “revelación directa de la inanidad de todo”. Vivió plenamente el periodo de la II guerra mundial por lo cual también significativamente en toda su obra sobre todo después de las post-guerra.

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Fuera El mendigo es un pobre que, ansioso de aventuras, ha abandonado la pobreza para explorar las junglas de la piedad.

Ayer precisamente hablaba de los escritores mendigos Cioran entraría en una de ellos. leyó, escribió y malvivió en hosteles juveniles hasta conseguir una buhardilla junto al Odeón, con un alquiler irrisorio; se mantuvo pobre y solitario, rechazó todos los honores que le fueron concedidos, y desdeñó su propia gloria.

La educación es un derecho y esparcirla es nuestro deber.