La cultura del juicio

Soy Colombiano, por lo que hago parte de América Latina: Ese cúmulo de países espectaculares, pero a la vez tan llenos de problemas. Tenemos varios de los paisajes más hermosos del mundo, personas amables y de gran valor, pero así mismo hay algo que no nos deja avanzar. Con tristeza, los latinoaméricanos tenemos que ver cómo en Europa, Asia y Norteamérica hay una gran cantidad de países desarrollados, mientras que nosotros simplemente luchamos por sobrevivir, por tener suficiente comida para el mes. Se le puede echar la culpa a la corrupción, a la falta de recursos, la falta de oportunidades, pero en los últimos días he pensado seriamente en el asunto y creo que he encontrado un culpable. Con ustedes: LA CULTURA DEL JUICIO.

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En Latinoamérica tenemos una fuerte influencia religiosa. Si han leído mi Introduce Yourself (https://steemit.com/spanish/@juancrdrums/hola-soy-juan-camilo-con-ustedes-mi-introduce-yourself), sabrán que creo en Jesús y lo tengo en el centro de mi vida. Sin embargo, la religión (Católica, Cristiana, lo que sea...) ha cometido muchos errores, principalmente en aspectos básicos de interpretación de la Biblia. Es de esa manera que la religión enseña que hay una lista de normas para ser una buena persona y de alguna manera "ganarse el cielo". Ese es el pensamiento que se ha generalizado en muchos países lationamericanos: Si me comporto de determinada forma, en definitiva puedo decir que soy mejor que otros.

Cuando crees que eres mejor que alguna persona, piensas que tienes derecho de entrometerte en su vida, opinar sobre lo que está haciendo y emitir juicios de valor al respecto. Esto es contrario al mensaje central de la Biblia, el libro que supuestamente es la base de la mayoría de religiones que se profesan en América Latina. El mensaje de salvación predicado por Jesús cuando estuvo en la tierra y afirmado por grandes hombres de Dios como Pablo, Pedro o Juan, dice que como seres humanos no podemos hacer absolutamente nada para ganarnos el favor de Dios o la salvación. La única manera de ser aprobado por Dios es reconocer que se es pecador, como absolutamente todas las personas. De esa forma se reconoce que hay una necesidad de Jesús, por lo que él hace su obra de salvación y justificación. Entonces, parafraseando algunos versículos bíblicos, absolutamente nadie tiene nada para presumir delante de Dios, ni siquiera aquellos que hemos sido justificados por él: Todos somos pecadores, y los que vivimos en su gracia lo hacemos precisamente por eso: POR LA GRACIA DE DIOS. No es por obras, es por el reconocimiento de nuestra naturaleza caída.

Todo eso suena muy bien, pero si el lector llegó a este punto posiblemente se pregunte: ¿Qué tiene que ver esto con el subdesarrollo en América Latina? Aquí va el punto:

Uno de los principales problemas de Colombia y otros países es la falta de unión. Particularmente, mi país tiene una geografía y una cultura bastante diversa: Si hablas con alguien de Bogotá, alguien de Medellín y alguien de Barranquilla, seguramente pensarás en un principio que son de distintos países, pues su forma de expresarse y ver la vida son muy diferentes. Actualmente estoy viviendo en Argentina, y así mismo sé que existe un pensamiento que dice que el habitante de Capital Federal (Buenos Aires) es distinto al del interior del país: En provincias como Jujuy o Santiago del Estero (no te ofendas si me lees desde ahí, esa no es la intención) se nota una diferencia grande en cultura y desarrollo económico respecto a la capital de la nación.

Las diferencias y prejuicios mencionados anteriormente resultan perjudiciales. Cada vez que alguien de determinado país latinoaméricano hace algo bueno a nivel internacional, nunca faltan las críticas destructivas por parte de habitantes de su propia nación. Examinemos las críticas por parte de los argentinos hacia Lionel Messi o los duros comentarios de algunos colombianos por el doctor Manuel Elkin Patarroyo. No hay una cultura de unidad en América Latina, sino que reina la cultura del juicio: Aquella que dice que si naces en algún sitio, hablas de determinada forma o te comportas de alguna manera, eres un ser superior e intocable para otros mortales. Así es imposible sacar adelante proyectos de país, iniciativas que le den progreso a nuestros pueblos. Qué bueno sería, por ejemplo, que en Suramérica hubiese un bloque económico poderoso como la Unión Europea, pero es difícil por la envidia y la falta de colaboración mutua.

¿Hay solución? Es difícil. La cultura del juicio está demasiado arraigada en nuestra manera de pensar, siendo realmente complicado cambiar la mentalidad. Es necesario entender que como latinoamericanos somos un solo pueblo, que debemos unirnos para salir adelante. ¿Eres porteño, paisa, cordobés o costeño? No importa. Todos tenemos aspectos positivos y negativos fuertes, los cuales debemos combinar y superar si lo que se quiere es avanzar. Es indispensable dejar a un lado los prejuicios, esos que llevan a las personas a estar pendientes de los errores de los demás para señalar y estar en primera fila con la piedra en la mano. Hasta que eso no ocurra, estoy seguro que en nuestra América Latina seguiremos siendo parte del mal llamado "tercer mundo".

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