Por los detalles que se pueden apreciar en la distancia, y estando de acuerdo con tu afirmación, tal vez en este caso no se trate de una musa en particular y sí de una alegoría generalizada de la pasión o de las Bellas Artes o incluso, se me ocurre pensar, dado que como dices, estás en un restaurante español en Alemania, de una nostalgia patriótica. Tal vez sea porque me gusta lo vintage o lo antiguo y visto así en la distancia, como un pequeño purgatorio, me ha recordado (que no digo que lo sea) los antiguos petos de ánimas. Pero es cierto: detrás de cada hombre, siempre hay una gran mujer.