Elemental Mente, Fuego - Capítulo 2
Elemental Mente es una novela de varios capítulos, si estas mirando esta parte y no conoces las anteriores te invito a leerlos antes de continuar
- Elemental Mente, Fuego - Capítulo 1
La tensión se podía sentir como una densa niebla, no se si quizás era lo que este individuo me había comentado acerca del tiempo en ese momento, o ya estaba sugestionado por sus palabras y mi miedo evidente, pero un par de segundos de silencio se sentían como una eternidad.
- Bueno comencemos, ¿En que piensas si te digo ''Fuego''?
Y chasqueando sus dedos, hizo aparecer una fogata en la habitación que iluminó de forma tenue la oscuridad que envolvía este espacio. Mi miedo seguía presente, pero ahora tenía esa cara que tienen los niños cuando ven a un hombre disfrazado de super-heroe, o cuando miran el mar la primera vez, una cara de asombro y de desconcierto. Este hombre aclaró su garganta para sacarme de esa situación y que volviese a lo nuestro, la verdad solo alcancé a decir:
- Pues fuego, un elemento, calor, llamas. Poco más.
Me miró con una mirada de esas que convierten los ojos en filosas dagas, su expresión se torno la de una mirada de juicio que me intimidó de entrada.
- Vamos a ver, ¿En qué piensas si te digo ''Fuego''? suéltate, rebusca en ese cerebro tuyo, es demasiado amplio como para que solo consigas un par de palabras, dedica tiempo a tus respuestas. Créeme que prefiero dejarte sin habla nuevamente que recibir estas respuestas vacías, carentes de espíritu, sin sentido, poco trabajadas, sin respaldo, respuestas para salir del paso.
Se llevó las manos a la cara y suspiró, enseguida supe que intentaba ser más tolerante, pero que no tenía la suficiente paciencia.
- Lo siento; Bien cuando pienso en fuego, pienso en un elemento y en lo que su arquetipo representa para mi. El fuego es pasión, es violencia, es agresividad, es rabia, es peligro, es devastación. No le temo, le respeto en realidad, porque entiendo que es indomable, que es salvaje y aquellos que intentan controlarlo se equivocan, aquellos que conviven con fuego deben vivir conscientes de que el peligro está latente, como un palpito volcánico, una amenaza que nadie espera pero que siempre está presente…
- Calma… Respira y prosigue
Me interrumpió de golpe, lo cual me descolocó un poco. Sin embargo, pude darme cuenta de que estaba en una situación parecida a la euforia, respiraba casi hasta hiperventilarme, el corazón latía de manera acelerada y comenzaba a sudar.
Hice un par de respiraciones profundas, y continué:
- ...Pero, ¿Sabes? el fuego también representa otras cosas. El fuego es calor, es ese calor que a veces odiamos y a veces extrañamos, pero que en las situaciones más solitarias añoramos. El fuego es alma, es amor, no es solo lo que arde en una hoguera, o en una chimenea, es el momento que compartes con una persona frente a las llamas. Fuego es ese calor que te abraza y te abrasa, ese que sientes con un recuerdo o con la felicidad plena, ese que te cuesta explicar pero que disfrutas sentir, fuego es en lo que te transformas un día caluroso, cuando tu sonrisa por cualquier cosa te hace olvidar que el clima tiene alta tu temperatura, porque la felicidad que emanas es más fuerte que el sol mismo. Eso es el fuego para mi.
Respire nuevamente, el corazón latía rápido y había ignorado por un par de segundos la presencia extraña en la habitación, la hoguera me tenía atrapado totalmente, como solo el fuego lo hace desde hace mucho tiempo.
- Contradictorio, que por una parte parezca lo más peligroso y por otro, lo más hermoso de este mundo. ¿Podrías darme un nombre? ¿Quien es el fuego de tu vida?
Sin siquiera meditarlo mucho tomé un collar que adornaba mi cuello, y lo mire fijamente sin decir una sola palabra. Un collar con el dije de un ancla, muy importante para mi.
- Entiendo, entiendo, tranquilo que ese silencio responde también de formas amplias…
Le interrumpí sin pensarlo:
- Ella es lo que representa el fuego, desde lo indomable en adelante, ella no es violencia ni peligro, ella es todas esas cosas buenas que representa el fuego. Pero si no la respetas, si no respetas su poder, te quema y te dejará una quemadura en el alma que arderá hasta el fin de tus días, un fuego que quizás se extinga, pero una vez que te dejó la marca te hará recordar hasta el fin de los días.
Y fue ahí donde comencé a llorar por primera vez en esta conversación, me sentía vulnerable, un idiota, un tonto y no quería dar pena ante un desconocido, así que mientras intentaba calmarme, entre sollozos comenté:
- Es mi turno, no quiero perder tiempo en ti, quiero saber ¿Que haces aquí? y se franco, se directo, no quiero escucharte tanto.
Sonrió con ironía y contestó simplemente:
- Vengo a darte una lección que sé que necesitas y vas a necesitar el resto de tus días.
Otro movimiento de sus manos y tomo mis lágrimas, incluso las derramadas, agrupándolas en una gran esfera cristalina, y extinguiendo luego la hoguera con ellas. Me ofreció un pañuelo, que rechacé, pues preferí limpiarme con mi camiseta, y justo entonces comentó:
- Avísame cuando estés listo para seguir.
Siguiente capítulo: 03/03/2019
Elemental Mente es una novela escrita por mi persona, prohibida su reproducción en esta o cualquier otra plataforma. Su difusión esta condicionada al reconocimiento para el autor, y compartir para uso recreativo, no para obtener ganancias monetarias de ningún tipo
ummm sin duda ya quiero leer mas de esto