Hay cualidades que parecen llevar en la sangre, nacen con ellas, pero si además de eso se mantiene en un ambiente que les permite desarrollarse, el resultado siempre será una maravilla humana, una expresión de lo mejor de su ser, y es el caso de la bella mujer jamaicana Kelissa.

<

_Fuente

Hija de músicos de reconocida trayectoria, nacidos y criados dentro de la filosofía rastafari, es una buena representante de lo que significa esta cultura.

Vivía la música antes de nacer. Ella me dio la bienvenida al mundo y me lleva a casa donde quiera que esté".
Kelissa

Desde niña mostró sus habilidades como cantante, cuando aún era niña se unió a un grupo musical llamado "Rainbow Riddims", donde se dedicó y aprendió a tocar varios instrumentos además de demostrar su pasión por la danza.

La interpretación física del sonido en movimiento, así como el uso del cuerpo para crear sonido, ha añadido una dimensión más profunda a mi comprensión de la música.

Obtuvo una beca de pregrado para estudiar en el Whittier College en los Estados Unidos, donde su educación fue básicamente en música, aprendió sobre producción musical, fue co-fundadora de un grupo de música (Black Arts and Cultural Dance). También tuvo la oportunidad de vivir en África (Tanzania, Etiopía y Ghana). En esta última ciudad también estudió en la Universidad de Ghana y amplió sus cualidades musicales donde aprendió a tocar otros instrumentos e hizo diferentes tipos de experiencias en escenarios, calles, discotecas, entre otros.

En 2015 grabó Keep my Head Up, sin duda uno de sus grandes éxitos, aquí está el video original, puedes disfrutarlo.