El origen de los loros el otoño y Kamshout

Fuente: https://www.aliexpress.com/price/parrot-homes_price.html
En la isla grande de tierra del fuego, también conocida como la tierra del fin del mundo, se habían establecido los indígenas Selk'nam más conocidos como los Onas.

Fuente: http://www.nexofin.com/notas/445461-en-el-25o-aniversario-de-tierra-del-fuego-la-recorremos-en-imagenes-n-/

Estos indígenas tenían una particularidad, eran indios muy grandes, considerados los más grandes de américa, sus medidas promedio eran de 1.80 cm, con una fuerza incomparable, indios muy temido en la región, vivan de la caza y la pesca, el guanaco, su carne favorita, en ocasiones se alimentaban de frutas y hortalizas.

Fuente: http://www.publimetro.cl/nota/cronica/la-historia-del-idioma-selknam-la-lengua-extinguida-de-los-onas-de-tierra-del-fuego/xIQnin!lLqz2n14ghBJA/

Esta es una bella historia del sur de mi país, la tierra del fin del mundo, en una época remota las espesuras del lugar permanecían siempre verdes, los arbustos no desojaban, el otoño no hacia efecto sobre ellos
En el pueblo de los Onas vivía un muchacho aventurero llamado Kamshout, este muchacho tenía una particularidad, le gustaba viajar en rumbo desconocido, salía de su tierra sin saber a dónde se dirigía, como quien diría, donde lo lleve el viento.
Era muy común verlo viajar, se ausentaba algunos días y volvía con hermosas historias, las que ha ido acumulando en su viaje, un muchacho muy querido por su sencillez, todos los poblados del sur ya había visitado, y en cada viaje se animaba a recorren más kilómetros, las historias de su viaje eran esperadas por el pueblo.
En cada llegada de su travesía era una verdadera ovación, un pueblo dependiente de las crónicas del viaje del chico, todo el pueblo Onas se juntaba en un acampado del bosque para deleitar sus oídos con las historias de este trotamundos.
Por su forma de vivir, no habia amor en su pago que lo esperara, esto asía más placentero su viaje, se podía tomar el tiempo necesario para adquirir los conocimientos de otros lugares.
Kamshout hacía más de un mes que había regresado de su último viaje, los indígenas del lugar estaban preocupados, por la manera extraña de actuar del joven, nunca había estado tantos días en la isla, temían que el joven no viajara más, si esto sucediera quien traería novedades de afuera del poblado, un día se lo vio partir, la calma volvió al lugar, deseosos de su regreso, para escuchar sus nuevas aventuras, los días comenzaron a pasar, se hicieron semanas, quizás meses y el chico no regresaba, los Onas comenzaron a extrañar sus historias de vida, pasaron muchos días, más de lo que acostumbraba el muchacho en regresar, tanto fue la espera, que los pobladores perdieron las esperanzas de que el joven estuviera vivo y lo dieron por muerto, los días pasaban, los pobladores se acostumbraron sin el joven, al punto del olvido, en la espesura, ya nadie hablaba de Kamshout.
Cuando nadie notaba su ausencia el joven regreso, muy desmejorado y viejo, pero traía valiosas anécdotas de su viaje, el pueblo brillo de alegría, las caras triste se habían ido, esperaban ansiosos la noche para escuchar las anécdotas del muchacho, al caer la noche se juntaron en el descampado de la espesura, para deleitar sus oídos con las andanzas del muchacho, relato las crónicas de su viaje sin sobresaltos, la charla su fue poniendo de apoco interesante, hasta llegar al pasaje donde comenta haber conocido un lugar encantado, muy remoto , lejos de la tierra del fin del mundo, esto explica la tardanza del joven, ansioso, eufórico describía con ansias sus descubrimientos, narraba que conoció una hermosa selva con árbol antiguos, una selva enorme difícil de recorrer, pareciera no tener fin, pero lo que más le encanto fue que estos árboles se desojaban, a sus hojas lo lleva el viento cuando pasa, al llegar el otoño los árboles se despojaban de todas sus hojas, quedando sus ramas desprotegidas, pero aseguro que al llegar la primavera los arboles comenzaban a brotar, como el comienzo de una nueva era, despacio se iban poniendo verdes y floridos, como si las hadas hechizaran el lugar.
El pueblo entero de Onas se miraba entre sí, ni el más ingenuo creyó esta locura, la historia de Kamshout perdió credibilidad, los Onas jamás vieron algo así ni lo más ansíanos que han vivido muchos años, todos se burlaron del muchacho tratándolo de loco.
El joven peregrino desahuciado y molesto, se retiró de la isla para no volver, salió por el mismo camino que regreso, andaba deambulando por los bosques muy entristecido, el Dios Onas se apiado del aventurero sabiendo que el joven decía la verdad, lo convirtió en pájaro, un hermoso loro de varios colores, verde, amarillos y rojo, un pico enrome acompañados de unas grandes alas.

Fuente: http://www.20minutos.es/noticia/2317687/0/virus-desconocido/loros-humanos/enfermedad-investigacion/

Regreso a la tierra del fin del mundo, quería darles una lección a los que se burlaron de su verdad, llego junto al otoño, sobrevolaba los árboles, se posaba sobre las copas de los arbustos tocando las hojas con su pluma, aquellas que hacían contacto las iba tiñendo del color de su pluma amarilla, cada vez que las hojas sentían el roce de las plumas se desvanecidas cayendo al suelo.
El pueblo entero de Onas miraba los sucesos con asombro, presentían la muerte de la espesura, no sabían qué hacer ni a quién acudir, los días pasaban de prisa, las hojas caían a la velocidad de los días, comenzó a llegar la primavera y las copas de los arboles comenzaron el nuevo ciclo de vida, las ramas empezaban a en verdecer, al ver esto los Onas salieron del asombro pudiendo comprobar por ellos mismos la verdad de la anécdotas de Kamshout.
Kamshout es ahora quien se burlaba del pueblo, posado en lo más alto de un árbol reía y disfrutaba de las caras con asombro de los descreídos. De esta manera el joven viajero se vengó de aquellos que lo han insultado.

Fuente: http://trevidecoraciones.com/siteact/es/cuadros/41-cuadro-loros-selvaticos.html

La próxima vez que veas a los loros en las copas de los arboles reproduciendo esos sonidos sabrás que se están burlando de los escépticos, que con su ignorancia lastimaron a Kamshout recordaras el origen de los loros el otoño y a Kamshout

Fuente: http://www.identidad-cultural.com.ar/leernota.php?cn=865

Fuente: http://www.limbos.org/sur/selkn.htm

Te espero mañana para disfrutar de otro relato de mi tierra Corrientes.

José Luis Fernández
Corrientes Argentina

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