Rompe el esquema
Cambiar es uno de los temas que encuentro más apasionantes para pensar, para escribir. Antes pensaba en el cambio como un ajuste a la conducta, un viraje, un cambio de dirección que luego se acomodaba a otra forma de ser o de pensar, pero ahora lo veo como una constante transformación. Veo el cambio como una necesidad diaria, un ajuste constante y que no se detiene.
Puede ser que al principio haya comenzado pensando necesito cambiar, y luego al ver que ese proceso no termina, pienso más bien en la palabra transformación.
Transformarse constantemente me parece una experiencia fascinante, ella hace posible que ciertas bases tomen una forma suave, flexible.
En el universo todo tiende al caos, así lo dice la segunda ley de la termodinámica: “La cantidad de entropía del universo tiende a incrementarse en el tiempo”Fuente. Así sucede naturalmente cuando seguimos sencillamente la corriente. La búsqueda del orden, sin embargo, es un principio ligado a la vida.
Deja una casa sin atender y verás como se vuelve caótica, las personas que viven dentro son las que pueden hacer una diferencia siempre y cuando busquen el orden. Es cierto que los seres vivos también vamos a ese fin caótico físicamente en cuestión de tiempo, pues envejecemos; pero sabemos que las ideas no envejecen, aquello que no podemos ver, no muere.
¿Qué es lo que hace que nos percatemos de la necesidad de cambio constante para buscar el orden, el bien, la verdad, la justicia, la paz? Creo que son las crisis, cuando el caos hace mella.
Hace falta un despertar para que sea posible pensar en cambios y transformaciones.
Somos agentes de cambio allí donde estemos. Si bien es cierto que no tenemos poder sobre los demás o a veces tampoco en nuestro entorno, sí lo tenemos sobre nosotros mismos, y en la medida que vamos cambiando y transformándonos ese cambio se va propagando hacia afuera aún sin darnos cuenta. Pero el núcleo esta dentro de nosotros, dentro de cada uno.
Aun así, hace falta una enorme fe y confianza en creer que esto es real para tener la fuerza suficiente para hacer las cosas bien en todo momento, sin desfallecer, y en dado caso para continuar con el mismo empeño al día siguiente.
Texto y fotos de mi autoría.
@inspiracion
Entiendo cambiar cuando la vida es aburrida pero no lo comprendo si te sonríe y es propicia. Esta bien cambiar pero a mi me gusta algo estable, incluso rutinario. Pero sobre gustos no hay nada criticable. Un saludo 😊
El cambio se impulsa por necesidad, de resto incluso no es bienvenido. Un tío mio dice "los únicos que lloran por un cambio son los bebés, y de pañal". Hay algo que se llama zona de confort y la mayoría de las personas se mantienen allí. Cuando hablo de cambios me refiero más que todo a buscar una renovación, una mejora. Puede ser que te sientas bien si en tu vida sientes que todo va bien e incluso cada día mejor, en ese caso las cosas fluyen y la palabra "cambio " puede hasta producir temor o incomodidad.
Gracias por pasar
Un abrazo 🤗
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Bellísimo texto amiga, y me han encantado las fotografías, esos helechos quedaron espectaculares. Tienes razón en eso de que cambiar es algo profundo y personal, lo veo de esa manera.
Siempre es lindo leerte.
Saludos con cariño
Gracias me alegra que te haya gustado. Sí, es tan personal que creo que solo es posible desde adentro, desde las convicciones, desde afuera no es algo bien recibido.
Un abrazo con cariño 🤗
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Dos frases que rescato porque dejan un mensaje claro. La vida no es monotonía, ni sedentarismo. La vida implica movimiento, sufre transformaciones y promueve cambios. En este sentido, es necesario atender a ese llamado de la naturaleza. Saludos amiga.
Es cierto la vida implica movimiento, y requiere darse cuenta de ello. Gracias por pasar.
Un abrazo
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