Al finalizar la segunda Guerra mundial se empezaron a conocer todas las atrocidades cometidas por los nazis en contra de los judíos y es justamente durante este periodo de tiempo donde se forma la primera Brigada Judía del ejército británico bajo bandera hebrea, Jewish Brigade Group, sin embargo, al conocerse cada vez con mayor precisión cada una de las barbaridades cometidas, este batallón desarrollo un intenso deseo de Venganza y devolver de alguna forma el daño sufrido por su comunidad. A través de diversas ayudas de servicios secretos de inteligencia de los Aliados, lograron diseñar y enumerar una lista con los miembros de la SS, para poder ejecutar su venganza.

Abba Kovner

Pero comencemos por el principio un superviviente llamado Abba Kovner (posteriormente uno de los poetas más destacados de Israel) se encargó de crear un grupo de por lo menos 50 personas de supervivientes de los campos de concentración al que llamó «Nakam» (o «Vengadores»)

Este batallón se encargó de idear un plan de venganza, que en su primer momento fue dividido en dos fases: La primera, identificar a los judíos que aún quedan vivos en Europa y ayudarles a llegar hasta Palestina; la segunda, ejecutar la venganza y se encargaron de idear un curioso plan para matar a los seis millones de alemanes que vivían en las ciudades de Múnich, Núremberg, Hamburgo y Frankfurt.

El plan principal era acabar con 6 millones de alemanes para justificar la vida de los 6 millones de judíos asesinados dentro de los campos de concentración. Es de esta forma como Abba Kovner, un poeta y antiguo partisano en Vilna; Decide dos actos de venganza:

El plan A, que consistiría en el envenenamiento del agua de varias ciudades alemanas; y el plan B, que se centraría en los prisioneros de las SS retenidos por los aliados en campos de prisioneros, envenenando el pan que se les proporciona.

El plan B se lleva a cabo en un campo de prisioneros alemanes cerca de Núremberg, donde se encontraban más de quince mil antiguos miembros de las SS. El plan consistía en envenenar el pan que comían los prisioneros Alemanes, este pan era el único sustento que estos prisioneros recibían por parte de los estadounidenses y era realizado en la misma panadería Alemana, Tres de los “vengadores” se hicieron pasar por panaderos y consiguieron trabajo en la panadería que suministraba al campo. Por otro lado En París, un químico judío de Milán se dedica a fabricar el veneno: dos kilos de arsénico sin refinar. En abril de 1946, los Nakam ponen en marcha su plan. Durante toda la noche se dedican a untar con brochas el arsénico en los bollos de pan. A la mañana siguiente se entrega el pan a los prisioneros y el efecto del veneno comienza a extenderse por todo el campo. Los equipos de médicos estadounidenses hicieron todo lo posible para salvar la vida a los oficiales de las SS que habían comido el pan. Miles de ellos enfermaron; el número de muertos se desconoce. Los aliados jamás hicieron público el número de muertos.

Batallón Nakam

Otro de los planes ideados por “La Operación Kovner” fue desarrollar una estrategia para envenenar el suministro de agua en Munich, Berlín, Weimar, Nuremberg y Hamburgo. Mientras sus hombres planeaban los detalles de la operación, Kovner fue a Israel y le solicitó ayuda al futuro presidente, Jaim Weizmann.

Presumiblemente, Weizmann habría ayudado a Kovner a adquirir el veneno para su plan (aunque hay un debate sobre si Kovner le explicó a Weizmann sus verdaderas intenciones), pero afortunadamente, la mayoría de los líderes israelitas quedaron horrorizados con el plan del vengador. Estos dieron aviso a las autoridades británicas y Kovner fue arrestado.

Este batallón prosiguió en la búsqueda de venganza hasta los años 50, a pesar de nunca más volver a cometer un ataque en masa, nunca desistieron de ubicar a exNazis alrededor del mundo especialmente Latinoamérica

Jamás se presentaron cargos contra los «Vengadores» quienes, con Kovner en prisión, decidieron que debían reconstruir sus vidas en Israel. «La mayoría de ellos se habían quedado solos en el mundo. Ahora, al menos, se tenían el uno al otro»

Tengo que admitir que cuando termine de leer esta historia, quedo en mi mente la siguiente interrogante ¿habrán podido los judíos sobrevivientes de la segunda guerra mundial vivir “en paz” hasta el final de sus días? De hecho, tengo que reconocer que no tengo una respuesta precisa a esta pregunta. Pero esto me lleva a reflexionar que quienes se encuentran en el bando de las víctimas de cualquier catástrofe perpetradas por humanos, rara vez logran conseguir un aliciente “en esta vida rodeada de humanos”. Primo Levi en su Trilogía de auschwitz a través del libro la Tregua publicado en 1962 (específicamente 13 años después de culminada la guerra) se plantea un sinfín de interrogantes y todas se resumen en “¿porque tanta crueldad para aquellos que son semejantes a nosotros?”. es justo en este momento cuando entiendo aquella frase que la comunidad judía ha hecho tan propia de ellos “NO OLVIDAR” Pero... y ahora si como opinión expresamente personal hay momentos en los que creo que justamente llevar esta frase como estandarte es lo que quizás no ha permitido “vivir en paz”...sin embargo, después de las barbaridades conocidas por todos nosotros ¿es posible vivir en paz?

….. Nos vemos en un próximo encuentro

FUENTES

Nokmim, “Vengadores” de judíos que asesinaron miles de nazis

La crueldad del batallón secreto de judíos que quería asesinar a seis millones de nazis

CUANDO “LA VENGANZA JUDÍA” PLANEÓ ENVENENAR A 6 MILLONES DE ALEMANES TRAS LA II GM

NUEVO DOCUMENTAL SOBRE “LOS VENGADORES” JUDÍOS DEL HOLOCAUSTO