Prologo

Aún recuerdo cuando tenía 8 años, me enamoré de una hermosa niña llamada Antonella; definitivamente fue amor a primera vista. Yo era nuevo en el colegio, mi papá había decidido mudarse de California a un pequeño pueblo en las afueras de New York llamado Blueville tras el abandono de mi madre, estaba furioso con él pues le recalcaba que si ella terminaba arrepintiéndose y querría volver a casa ya no nos encontraría allí, además que Mason y James vivían a unas cuadras y pasaba toda la tarde con ellos después de clases; eran mis mejores amigos. Es así como no me percaté que mis padres estaban pasando por esa etapa que los adultos llaman “Divorcio”, por un lado tuve la suerte de no escuchar las discusiones que ellos constantemente tenían porque tan pronto yo ponía un pie dentro de la casa, ambos se callaban y fingían su mejor sonrisa, pero por otro lado el hecho de que mi madre nos dejara fue como si me echaran una cubeta de agua fría; no lo esperaba.

Fue entonces cuando la conocí, el primer día de clases un 25 de agosto exactamente a las 8:09 am; lo sé porque yo había llegado tarde por quedarme toda la noche mirando Dragon Ball; tuve que tocar la puerta del salón de clases y recibir mi primer aviso por llegar tarde; mis ojos recorrieron todo el salón mientras la maestra Penelope (curiosamente no le gustaban los diminutivos ya que ella era hispana) me presentaba, y es así como me detuve a mirar a la niña más linda que mis ojos pudieran haber visto, tenía un cabello rojo como el fuego, pecas en la nariz y aritos en las orejas, usaba un vestido blanco adornado con flores y tenía sus manos entrelazadas. Suerte para mí que la maestra me puso justamente a su lado, donde había un pupitre vacío.

Desde ese día nos hicimos incondicionales, fuimos los mejores amigos. Ella tenía una seria obsesión por las chicas súper poderosas y su personaje favorito era claro, bombón. Le gustaba el pan con mantequilla de maní y odiaba la coca cola. Antonella me ayudaba con las restas, las detestaba porque desde pequeño odiaba la idea que me quitaran cosas; definitivamente prefería sumar. El día de su cumpleaños le hice dos regalos, uno era la caricatura de Bombón dibujado y pintado por mí, el segundo un Cassette lleno de Mix de sus canciones favoritas, claro estaba Britney Spears, Christina Aguilera, Nsync, Backstreet Boys, etc. En la lista de canciones que había escrito a mano había una que estaba resaltada de amarillo, llamada “this I promess you”, era una dedicatoria.

De eso pasaron dos años y finalmente le pedí que fuéramos novios a lo cual ella aceptó abrazándome y dándome el primer beso inocente, el cual era el comienzo de algo tan dulce que ni sus padres podían negarse que ambos fuéramos “novios”, toda la escuela sabían que nosotros dos estábamos destinados a estar juntos, todos excepto mi padre, porque tal parecía que esos no eran sus planes.

Mi padre había ascendido en su trabajo de publicista y transferido a la ciudad de New York, él jamás pensó que sus esfuerzos de superación dieran frutos y en un abrir y cerrar de ojos, tuve que mudarme de nuevo. Pelee, lloré, patalee pero de nada sirvió, yo no podía quedarme solo teniendo 10 años y mi papá jamás lo permitiría. Así que tuve que despedirme de Antonella escribiéndole una pequeña carta diciéndole que algún día nos volveríamos a encontrar y que ese día nadie nos iba a volver a separar. La despedida fue aún más dolorosa de lo que me imaginé, ambos estábamos abrazados y con el corazón destrozado, ella seguiría en el pueblo y mi cuerpo estaría en New York, pero mi corazón en Blueville.

16 años pasaron desde que me mudé y de aquel niño sólo quedaba su nombre, Logan Wallas. Los primeros años fueron difíciles porque quería volver a mi pueblo, quería estar con Antonella, pero a medida que pasaban los días ese deseo se iba apagando y apagando cada vez más hasta que un día ya no pensaba en ella. Entré en la universidad de New York y podría decirse que fui bastante afortunado, estudié publicidad & marketing, tal cual como mi padre que para ese entonces ya se estaba retirando con una reputación altísima, cosa que me abrió las puertas como pasante con un futuro prometedor para la revista People, salté de pasante a ayudante y de ayudante a supervisor en tan sólo dos años; mi éxito estaba garantizado.

—¿Crees que me vayan a subir el sueldo?— Preguntó Joshua, él era mi aprendiz. Recién graduado de la universidad se postuló para ser pasante tal como hacía un par de años lo había hecho yo

—¿Bromeas?, ¡estoy seguro!— Dije para darle ánimos

—No sé, tal vez no le gustan mis diseños—

—Si no le gustaran tus diseños, créeme que no estarías aquí, relájate y tráeme un café que me estoy durmiendo —

—Ya voy, ya voy — El joven se levantó y me sirvió el café de la máquina que estaba a disposición para todos los empleados.

Soy un hombre con cuerpo de atleta y me gustaba presumir de ello, iba al gym todos los días antes de ir a trabajar, me bañaba y luego me colocaba la mejor camisa para cuidar mi excelente imagen. Mido 1.82, mis ojos son marrones claros y tengo el cabello negro, mi labio superior es fino y el inferior un poco grueso y soy de contextura fina; tengo unos lentes que sólo los uso para ver en la computadora. En el brazo llevo marcado en la piel un tatuaje con la palabra “persiste” en hebreo, tengo un lunar en la nuca en forma de luna menguante que me desagrada, por lo cual quiero hacerme un tatuaje que pueda ocultarla.

Tomé el café para beberlo poco a poco mientras miraba los emails que me llegaban, normalmente todos eran para felicitarme por haber sido elegido el empleado del mes por 10° vez consecutiva, nadie había hecho ese tal logro. Me sobresalté al escuchar el teléfono sonar y lo agarré inmediatamente

— Habla Logan — Abrí los ojos al saber quién era; el jefe.

— Sí señor, ya voy para allá — Me levanté tan rápido que me cayó un poco de café encima de la camisa blanca — ¡DIABLOS!, Te doy un año de suscripción gratis con todos los programas de Adobe si me prestas tu chaqueta para ir con el jefe — Le dije sin titubear a mi ayudante.

— Hubiera accedido si me lo hubieras pedido, pero ya que estamos… que sea un año gratis.—

— Hecho — Seguidamente me coloqué el traje de él, a mi parecer me quedaba un poco pequeña pero por suerte me hacía juego con el pantalón, me comí un par de pastillas de tictac y al arreglarme mejor fui hacia el despacho del jefe

La recepcionista me dijo que pasara de una vez así que me acerqué a la puerta del despacho para tocar la puerta, cuando me manifesté él me invitó a pasar.

— Logan, que bueno verte, primero déjame felicitarte por tu increíble labor para esta empresa — Aquel hombre canoso, de cincuenta y pico años de edad bien vestido con traje de Armani y zapatos de House, de testoni; eran sus favoritos. Se levantó para llegar hacia mí y darme un abrazo. — Ahora vamos a lo importante —

— Usted dirá Sr. Mclaggen.—

— Siéntate por favor — Él señaló la silla y yo sentía que mi corazón podía salirse en cualquier momento, sin hacerme esperar me senté mientras que él también lo hacía en la orilla de su escritorio para que dar cerca y frente a frente.

— Quiero que sepas que esta decisión que tomé fue para tu futuro y para el futuro de nuestra empresa, eres mi mejor publicista y te necesito más que nunca para poder ampliarnos más y derrumbar a nuestra competencia — Con cada palabra que decía, sentía como si toda la responsabilidad estuviera en mis hombros, no es que no supiera trabajar con bajo presión pero era la primera vez que el jefe me hablaba en esos términos. — Es por ello que necesito que te mudes de New York y seas el nuevo Jefe de Publicidad en otro lugar.

— ¿A dónde necesita que me vaya señor?—

— Ya tienes casa, auto y la oficina te espera en Blueville.— Podía jurar que mi corazón se detuvo.

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Blueville es un pequeño nuevo proyecto que se ha ganado un espacio en mi corazón. Espero lo reciban con amor y les guste lo que tengo preparado para ustedes.

Y para los que se preguntan que paso con The Soul, The Soul tuvo un final de su primera parte, la segunda parte se encuentra en etapa de producción - estas dos partes corresponderán a la primera temporada de 20 capitulos en total - y esta mas próxima de volver que de lo que creen... Quizás la semana que viene o la de arriba volvamos con esta maravillosa historia a la par de esta nueva que también se ha ganado mi tiempo.

Gracias por estar siempre presente y leer todas las locuras que escribo. Son los mejores seguidores que alguien podría tener, los amo.

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