¿A quién no le gusta… ser partícipe de un “rico” beso?, ese acto tan sublime y especial que nos puede transportar al lugar de ensueño, que nos acelera el corazón o cambia nuestro estado de ánimo en un “abrir y cerrar de ojos”. No solo consiste en juntar nuestros labios, rozar una mejilla o abrazar nuestros cuerpos; es la conexión con otra persona que causara diferentes cambios en tu cuerpo…que van desde la producción de hormonas (endorfinas) hasta el aumento del autoestima o a sentirte protegido e importante.

El beso tiene diferentes maneras de “entrega”, tenemos el beso apasionado el cual está considerado como un acto íntimo donde te encuentras con el alma de la otra persona, por lo tanto debes dejarte llevar totalmente por el momento y disfrutarlo; entendiendo que solo ayudaras que tu cuerpo experimente un estado de excitación tal que motivara a que tu cuerpo funcione mucho mejor.

También podemos hablar del beso de un amigo, que es el que nos hace creer en ese vínculo de empatía que puede existir entre dos personas al pasar el tiempo y aun en la distancia; haciéndonos entender que podemos tener un hermano (por afinidad) con el que contaremos siempre.

En el mismo orden de ideas, hablemos del beso de una madre, que es el que te hace sentir protegido, querido y entender que ese ser tan importante te vera siempre como su bebe.

Cuando besamos, nuestro organismo recibe una gran cantidad de estímulos que ayudan a la obtención de incontables beneficios. Un beso apasionado nos aumentara el fluido sanguíneo, haciendo que nuestro corazón aumente sus latidos de una manera saludable y por lo tanto baje la presión arterial, es decir, que para contrarrestar los gastos de medicamentos hipertensivos es mejor llevar una vida llena de besos en pareja. Al igual, que nos ayuda a conservar la elasticidad de los músculos del rostro, a ejercitar la mandíbula y por supuesto a vernos más jóvenes.

Al ser protagonista de este evento, nos entregamos haciendo que nuestra autoestima germine y se cultive nuestra salud mental; ayudando a que nos convirtamos en personas optimistas, alegres y 100% saludables.

Para finalizar, solo quiero recordarles que depende de cada persona la decisión de disfrutar de esta “terapia de vida”, que nada nos cuesta y que la tenemos muy cerca de nosotros, es decir “el que quiere besar busca la boca”…

Comparto con ustedes esta hermosa canción interpretada por el cantante venezolano Ricardo Montaner, la cual me deja sin palabras y enamorada al escucharla