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En la actualidad existe un drástico alejamiento de la naturaleza. Vivimos en un mundo de rectas y paralelas, rodeados cada vez más de objetos artificiales que están muy lejos de parecerse a los que encontraron los primeros hombres en su entorno. Edificios de hierro y cristal ropa sintética, utensilios de plástico, tintas acrílicas, espacios circunscritos en planos horizontales y verticales con ausencia de curvas, etc.

Este supuesto avance de las sociedades no solo genera problemas en el ecosistema, que sufre las consecuencias de su alteración, sino también en el hombre que no está preparado ni conformado para vivir en un mundo gris y que lo logra limitando las posibilidades de su organismo, atrofiando sus músculos y capacidades tan importantes como la agudeza visual, auditiva u olfatoria.

Hay una parte del cerebro del hombre que no ha evolucionado a la par con los cambios sociales, que aun piensa que luchamos por conseguir los alimentos como si viviéramos en plena naturaleza, que le impulsa a pasar por alto sus necesidades en un afán de satisfacer su espíritu depredador. La consecuencia de ello es clara: su mente sufre. El tatuaje cumple aquí una función analgésica. Quienes se tatúan objetos y elementos de la naturaleza sienten su atracción y experimentan la necesidad de poder observarla y también de fundirse con ella.

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El mundo vegetal es rico no solo en formas, sino también en colores, olores y texturas, y ha sido el marco en el cual se ha desarrollado la especie humana. Todo esto genera una enorme diversidad de dibujos, diseños y colores para un buen tatuaje inspirado en los mejores atributos de la naturaleza.

Entre los tatuajes más habituales están las setas. Los hongos con forma de sombrilla, tan populares en los cuentos infantiles, simbolizan cobijo, aunque también se les suele atribuir un significado psicodélico, ya que muchos de ellos son venenosos o alucinógenos. No obstante, los más populares del mundo vegetal a la hora de hacerse un tatuaje son los árboles y las flores, la inmensa diversidad y el simbolismo que estos tienen los convierten en los diseños más solicitados.

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Los Árboles.

Son, al igual que las plantas, esenciales para la vida del planeta. Con ellos se ha representado la vida en numerosas mitologías, como la escandinava y la de muchas culturas chamánicas, y para los cristianos tiene una significación esencial relacionada con la prohibición y el pecado a través del Árbol del Bien y del Mal.
Su simbolismo es muy amplio, lo que hace del árbol una imagen muy versátil a la hora de emplearlo en un tatuaje.

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Estos son algunos de sus sentidos más populares:

• Conexión: mediante el árbol se establece una conexión de lo subterráneo con lo terrenal y lo celestial; sus raíces se abren paso hacia las profundidades de la tierra; su cuerpo, el tronco, nace en la superficie y su copa; sus ramas, apuntan hacia el cielo. En muchas historias religiosas el árbol ha sido utilizado para representar una conexión de lo divino con lo terrenal y es bajo un árbol donde sucede el encuentro de un hombre con su dios.

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• Renacimiento: a lo largo de un año, los árboles de hojas caduca como lo son el Hopo, Plátano, Fresno y el Abedul pasan por el ciclo de nacimiento-muerte-nacimiento. En primavera le salen las hojas, las cuales viven hasta que en otoño degeneran y caen de las ramas, y el árbol sobrevive al invierno desnudo hasta que de nuevo llega con la primavera la época del nacimiento.

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• Divinidad: en algunos pueblos han elegido ciertos árboles como representación de su más elevado ser sagrado. Entre esos árboles sacros se encuentran las encinas celtas, las higueras de la India, los melocotoneros de China, los fresnos de Escandinavia, los tilos de Germania y los olivos de Israel.

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• Resistencia: <<Los árboles mueren de pie. >> Era el nombre de aquella famosa obra de Alejandro Casona y es que ninguna frase describe mejor la resistencia, fortaleza y vitalidad de un árbol que esa, los árboles son considerados como un símbolo de estas cualidades, ya que un árbol desde que nace hasta que muere siempre permanece en alto, de pie, resistiendo las adversidades.

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• Sabiduría: hay quienes piensan que el árbol es un símbolo de sabiduría, experiencia, vejez y de reflexión, ya que la mayoría de los árboles tienen una vida muy larga, incluso de siglos y mientras los años van pasando se puede observar en su tronco las cicatrices de su vejez, con el pasar del tiempo va apareciendo poco a poco la sabiduría del hombre, por esto el árbol es un perfecto símbolo de ella.

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El diseño para el tatuaje de un árbol se suele encontrar en su imagen realista o en la de diseño celta. En el primer caso, los colores que se emplean son el marrón para las raíces y el tronco, y el verde, para las hojas. Sin embargo, es mucha la gente a la que le gusta un tatuaje únicamente con trazos negros, que quedan muy bien en contraste con el color de la piel.

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Las Flores.

El ornamento más sencillo y natural del mundo son las flores que, con sus formas caprichosas y sus colores, alegran la vista.

La imagen floral es muy popular también en cuanto al tatuaje, no solo entre las mujeres, grandes amantes de este vegetal, sino también entre los hombres. Existen tantas especies de flores que resulta fácil que alguna sea del gusto del cliente aunque, y por la misma razón, también se hace difícil decidirse por una. Para ello, una vez más, la simbología ayudará a decidir cuál es la más adecuada para cada persona.

En principio, todas las flores son símbolo de delicadeza y sumisión: se marchitan rápidamente y su necesidad dela luz solar y el agua denota docilidad a la vez que pasividad, ya que descansan sobre el suelo a expensas de que la naturaleza las nutra.

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Pero sus características más estimadas son la belleza y la fragancia que despide, y de aquí deriva que se relacionen instantáneamente con las cualidades de armonía y virtud. Los ramos de flores se entregan para rendir tributo, ya sea en una gala de premios, en otras festividades, en el amor e incluso, en los funerales.

Las flores que más se ven en los estudios de tatuaje son:

• La Orquídea: símbolo de la fertilidad. Su nombre deriva de la palabra latina orchis que significa testículo, antiguamente se empleaba para realizar afrodisíacos. Es una flor que cuenta con más de 20.000 especies derivadas, lo cual ofrece michas alternativas para los diseños de tatuajes.

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• La Rosa: símbolo de amor y pasión. Esta flor tiene un elemento especial, un tallo espinoso que le sirve de protección. Sin embargo, a la hora de hacerlo en un tatuaje, las espinas pueden significar el daño que produce una relación sentimental.

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• La Amapola: el color rojo de esta flor habla de pasión, que en este caso es más una pasión espiritual que física. Hay quienes dicen que si una persona sueña con una amapola, significa sacrificios, pero también de mirar al futuro, dejando atrás el pasado.

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• La Margarita: símbolo de paz e inocencia. Si está entera, representa el amor ingenuo; si aparece deshojada, la búsqueda del afecto o la pérdida de la inocencia. Ya marchita, señala el final de la etapa infantil o la tristeza por la ausencia de paz.

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• La Flor de Lis: símbolo de nobleza y lealtad. La flor de lirio adoptó esta imagen simbólica con un nuevo nombre, flor de lis, en Francia hacia el siglo V, y después fue adoptada por todas las casas reales europeas.

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• La Flor de Loto: representa el renacimiento y la perfección. Su simbología nació en Oriente y su diseño se utiliza mucho en tatuajes de estilo japonés. Es la flor sagrada del budismo, que suele trazarse con una imagen de Buda sentado sobre su hoja recitando el mantra más famoso: <<Om mani padme hum>>.

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• La Flor de Cerezo: representa lo delicado y efímero, ya que el cerezo sólo florece durante dos semanas en primavera. En Japón se celebra la aparición de sus primeras flores para recordar que todos es efímero, pasajero, aunque bello. Así se recuerda la brevedad de la propia vida, no solo la de la flor de cerezo.

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El color con el que se pinte una flor añade un simbolismo extra al tatuaje, ya que cada uno de ellos tiene, además, un significado preciso. Así, una rosa negra puede simbolizar un amor que ha desaparecido dejando una huella dolorosa y la roja, en cambio, una pasión ardiente. Las margaritas de muchos colores significan alegría, pero una sola y de color blanco representa la pureza o virginidad. La orquídea azul es sensual, mientras que la roja apunta más al terreno sexual.

La flor de cerezo casi siempre se pinta de su color, rosáceo, aunque si se busca dar un toque más dramático y sexual se hacen sus pétalos en color rojo.

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Otra característica del tatuaje de la flor que lo hace tan popular es que adorna estupendamente cualquier zona del cuerpo. Las pequeñas quedan bonitas cuando se dibujan en zonas del cuerpo amplias, trazando con ellas un paisaje o ramo; o solas, en zonas más pequeñas, como las muñecas, los tobillos, la nuca o los omóplatos. Las de mayor tamaño se reservan para zonas que permitan su diseño: muslos, espalda, hombros y torso.

Además de la expresión realista, los tatuajes de flores también se pueden amoldar a versiones tribales, góticas, caricaturescas, mecanizadas, etc. Y no solo les interesa a las mujeres, como ya dije antes, sino que es un tatuaje unisex porque, aunque antaño la flor era un símbolo de feminidad, hoy se le atribuyen muchos significados, sumando así el interés de los hombres.

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Eso fue todo en este capítulo, si quieren ver más diseños en cada una de las fuentes de las imágenes encontrarán una inmensa variedad. ¡Déjame saber en los comentarios tu opinión acerca del tema.!