El ser humano desde siempre ha mirado a los cielos con mucha curiosidad y en parte con miedo, ya que se trataba de algo desconocido. Allá arriba se encontraba la morada de los dioses, más allá de las estrellas. O por lo menos fueron los pensamientos de multitud de civilizaciones del pasado.

Siempre se asoció la aparición de estrellas fugaces en el cielo a la **buena suerte**, a la llegada de nuevos tiempos de prosperidad. Inclusive, también se les relacionaba con el mundo espiritual.

La aparición de una estrella fugaz en el cielo representaba incluso para algunas sociedades del pasado, el nacimiento de una nueva alma. Un ser importante para la humanidad o para esa sociedad en concreto.

Cada estrella representaba un alma y cada que una estrella se "caía" del cielo, una nueva persona nacía.

"Pide tu deseo antes de que la estrella fugaz desaparezca o si no, no se cumplirá"

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Debes sentirte especial al mirarlas

Supongo que con el pasar del tiempo, dichas tradiciones fueron pasando de boca en boca, de generación en generación, adaptándose cada una al tiempo a la que pertenecía.

Hasta llegar a nuestros tiempos, donde vemos con fascinación las estrellas fugaces y pedimos un deseo porque algo nos hace saber que eso que vimos es algo especial y no ocurre siempre.

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En post anteriores vimos que las estrellas fugaces no son más que pequeños trozos de roca que van ardiendo a temperaturas increíbles a medida que entran al planeta tierra y terminan quemándose.

Quizás no vayan a cumplirnos nuestros deseos, pero de lo que estoy seguro es que quien ve una estrella fugaz, está siendo testigo de algo sorprendente.

Está viendo un objeto que ha viajado una cantidad abismal de kilómetros en el espacio, para llegar a nuestro planeta y para desaparecer en un último destello que surca los cielos.

Esa roca quizás haya venido de Marte, quizás se haya originado por la colisión de dos grandes asteroides en el sistema solar, quizás esa pequeña roca haya sido producto del impacto de un meteoro en alguna luna de los gigantes de gas y haya sido expulsada al espacio a tal velocidad que por azares cósmicos vino a parar a nuestro hogar...

Mas en concreto a tu mirada, a ese instante, donde estás tu frente a la inmensidad del cosmos, donde por un momento muy breve pudiste ver brillar por última vez a un autentico viajero espacial.

Un pequeño trozo del universo que arde y desaparece en el oscuro firmamento y que tuviste la fortuna de ver en ese breve instante...

¿Cómo no sentirse especial tras observar tal acontecimiento?

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¡Nos veremos en el siguiente post amigos!

-Lxs