Soy un ladrón - gracias a Dios

"Querido Papá Noel La Navidad pasada entendí que no existes pero ... Lo siento si te estoy ofendiendo ... pero esta hambre sin fin está devolviendo mi creencia en ti. Santa, durante los últimos tres días no comimos nada. Todavía recuerdo hasta el año pasado, cuando mis padres aún vivían, mi madre solía pedirme que le escribiera mi deseo en una carta para usted. Por lo general me tomaba 2-3 semanas para pensar cuál sería el mejor trato: ella solo permitía un deseo en la carta. No

éramos cristianos y, por lo tanto, no había ningún árbol de Navidad en mi casa durante la Navidad. Pero aún así, solía poner la carta en un sobre rojo, escribir tu nombre, Papá Noel, y mantenerla junto a un arbusto en nuestro pequeño jardín, 2-3 días antes de Navidad. Y lo feliz que solía ser cuando encontré mi deseo en forma de regalo cerca del mismo arbusto en la noche de Navidad. Yo siempre te ame. Pero el año pasado, cuando mis padres murieron en un accidente automovilístico y me mudé a este orfanato cerca de la Iglesia que tiene un árbol de Navidad muy grande y decorado, usted no cumplió mi deseo que le escribí en mi carta anual, por favor, envíe a mis padres. En esta carta, no les pregunto a mis padres, sino solo un poco de comida, cualquier comida, para mí y para mis amigos. El agua ya no es más efectiva para apagar el fuego que estamos recibiendo en nuestro intestino. Con amor Swamy Encontré esta carta cuando intenté recoger una campana de plata de un enorme árbol de Navidad decorado en el campus de Church. Antes de poder sentirme emocional y cambiar mi plan o ser atrapado por alguien, dejé la carta como estaba y salí corriendo del patio con una campana de plata. Estaba pasando por un bungalow. Podía oler la marihuana acre con la cerveza. Me asomé. Un grupo de pocos adolescentes, niños y niñas, celebraban la Navidad. Todos llevaban el gorro rojo de Santa, pero casi nada más. Estaban tan intoxicados que me resultó muy fácil saltar al bungalow a través de una ventana abierta anticipando un gran botín.

De repente vi 6-7 paquetes de pizzas, totalmente intactos y desatendidos por estos jóvenes ricos. Recordé la última línea de la carta que leí hace unos minutos. No pude controlar y abandoné mi plan para tomar el botín fácil, recogí cuidadosamente las pizzas y regresé al orfanato. Mantuve las pizzas (junto con la campana de plata) en la puerta del orfanato y salí corriendo después de golpear la puerta. Podía escuchar el animado sonido de un grupo de niños pero seguí corriendo hasta que llegué a mi habitación. Dos días después, la carta fue publicada en un diario nacional. Hubo respuestas abrumadoras a las noticias. Mi país es realmente genial. No hay escasez de donantes generosos. Alguien dijo que más de treinta y cuatro mil rupias (3,4 millones) fueron donados al orfanato. El fideicomisario del orfanato, nieto de un gran filántropo, había realizado un MBA en una famosa escuela de bachillerato. Utilizó la carta para obtener la mayor ventaja de marketing del fideicomiso en extinción fundado por su abuelo. Finalmente pagó su aptitud - treinta y cuatro mil rupias. Me sentí muy feliz, no como ladrón sino como humano, los niños no tendrían más hambre durante una década, supongo. Pero estaba equivocado. La habilidad de MBA aró lentamente la colección en un nuevo negocio.

La cuenta fiduciaria mostró un uso efectivo del botín: se renovó la fachada del orfanato, se agregaron dos computadoras, un nuevo conjunto de sofás en la oficina principal del orfanato y algunas fiestas de honor en las que los niños cantaron a coro: "(Danos el poder, oh mi señor ...). Eso es todo. No me sorprendería si volviera a recibir una carta similar en Navidad, pero gracias a Dios, soy un ladrón, al menos puedo robar pizzas para ellos en la noche de Navidad.