Los cactus y suculentas, siguen su crecimiento normal. Las lluvias, al contrario de lo que yo pensé, que era demasiada agua, no los dañaron a todos. Algunos sufren daños menores, otros se pierden totalmente. Pero la mayoría responde bien. Drenaron el exceso de agua y ahora se ven más fuertes.

Es una suculenta muy apreciada. Siempre está expuesta al sol, pero también lo estuvo a las lluvias. Lo soportó muy bien. Es una GraptopétalumParaguayense.

Esta es una suculenta, que pensé podría morir con tanta lluvia. Demostró tener mucha resistencia al agua. Ahora, disfruta de mucho sol directo, Está brotando su vara floral.

Esta es una Opuntia Microdasys. Las vellosidades que presenta son blancas. Se pegan fuertemente a nuestro cuerpo, si no tomamos previsión.
Es un cactus fuerte, ninguno de su especie, falleció con las lluvias. Y ahora se yergue, más fuerte aún.

Este cactus de la familia de las mamilarias, aprovechó para ramificarse. El peso de sus hijos, la inclina. Está muy frondosa.

Es otra Graptopétalum Paraguayense, Flor fantasma, Madre perla, son dos de sus nombres populares.

La opuntia de vellosidades rojas. Opuntia Microdasys Rúfida.

Otra especie de mammilaria. Las lluvias permiten que asome su botón floral, pronto estará florecida. Será otra imagen para una próxima publicación.

Los cactus y suculentas, son plantas que soportan muy bien las temporadas sin agua. Pero también me doy cuenta, que aguantan y soportan muy bien, las temporadas con mucha lluvia. A excepción de algunos graptopétalum y cactus que no son de hojas gruesas, se pudren con el exceso de agua. Pero no todos. No se, que elemento permite que algunas plantas, siendo de la misma familia y género, soporten más o en menor grado, los cambios ambientales bruscos. Y, con bruscos me refiero a lluvias torrenciales, intercaladas con fuerte exposición solar de varios días.

Hasta las próximas imágenes, que me imagino serán florales de estos cactus.

Gracias por leer y comentar,

Dios siempre nos bendice a todos.