En líneas generales, el color púrpura es difícil de hallar en tu día a día y más si se trata de conseguirlo en la naturaleza. Siempre he sido un enamorado de los colores y los tonos que nos regala el medio ambiente y de cómo esos matices agarran más vida después de la lluvia.

Recientemente estuvo lloviendo mucho por Venezuela y recordé como años atrás había tomado las fotos de una rosa roja y una cayena rosada después de una ligera tormenta, ambas quedaron con un rocío espectacular, por lo que después que amenguó el clima, tomé mi teléfono celular y le tomé fotos a esas pecas de agua que les salen a las flores y a la grama.

Tomé alrededor de 100 fotos de al menos 10 tipos de flores diferentes, poco a poco iré exhibiéndolas en las plataformas en las que trabajo con imágenes.

En esa oportunidad, capturé esta bella flor que vi cuando iba camino a llevar a mi sobrino a la escuela a eso de las 11:30 am, pero en ese momento llovía fuerte y los pétalos no se veían de esa forma.

Cuando regresé de buscarlo, como a las 3:30 pm, el clima seguía gris, la luz era la adecuada y el rocío lucía tan fenomenal como lo ven.

Sin duda, esta serie fue de mis favoritas por cómo quedaron dispuestas las gotas y la luz en ese momento creaba pequeños espacios blancos y cristalinos dentro de las hojas de esta planta que estaba en el suelo, a la orilla de la carretera.

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