Pulso del Escritor: La Saturnalia y el Yule: Un breve repaso a los orígenes paganos de la Navidad - @vickaboleyn
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La sección de Escribiendo para @team-mexico se renueva y desde ahora es nombrada Pulso Del Escritor, hoy tenemos el honor de dar la bienvenida a una nueva compañera que se integra a esta dinámica, ella es @vickaboleyn y nos preparo una publicación muy interesante sobre mitología universal.
¡Quédate a leerla! ¡Agradecemos a @vickaboleyn por sus atenciones, por su tiempo, también por la pasión con la que escribe estas publicaciones!
Conoce a @vickaboleyn, ve a darte una vuelta a su perfil, no te vas arrepentir. Es muy buena en lo que hace.
La Navidad se respira en el aire, quizás desde la última semana de noviembre. Las calles de la ciudad están inundadas de adornos navideños y coloridas luces se cuelgan en los árboles de los parques. Poco a poco el ritmo de las actividades escolares disminuyen; los estudiantes ansían ya olvidar de todo lo aprendido durante el primer semestre y enfocarse a la diversión, a pasar los días con la familia, con los amigos y hasta con los vecinos. Misma ansiedad se puede ver en algunas instituciones de gobierno; ya los empleados quieren que sea el 24 y el 25 para descansar.
Algunas personas incluso planean realizar compras anticipadas de regalos navideños con tal de evitar las muchedumbres en las tiendas departamentales, las cuales adornan ya sus vidrieras con muñecos de nieve, renos y Santa Claus. Marcas como Coca Cola, Pepsi, Adidas, Nike y Chanel pagan millones por darle publicidad a una serie de productos coleccionables cuyos precios van de lo accesible a lo exagerado, precios que a la gente no le importa pagar con tal de obtenerlo. No faltarán las rebajas en las librerías, donde Canción de Navidad de Charles Dickens u otro libro esté a mitad de precio.
En la televisión y en la radio se empieza a escuchar los tradicionales cánticos navideños y se transmiten maratones de películas temáticas y de documentales sobre el nacimiento de Cristo o sobre los orígenes de la celebración navideña. Estos últimos programas se pueden ver en los canales “serios” de divulgación científica, YouTube y en las plataformas de streaming; en ellos vemos a arqueólogos, antropólogos, historiadores y hasta alguno que otro religioso debatir sobre el contexto histórico del nacimiento de Cristo o los orígenes paganos de la Navidad.
Es este último tema del que quiero hablar el día de hoy en este espacio. Es un tema que tantas veces ha sido abordado en revistas especializadas y no especializadas, libros, y documentales, pero que vale la pena darle una mirada de vez en cuando debido a que involucra aspectos mitológicos que se pueden rastrear hasta las antiguas civilizaciones, concretamente en la romana y en la escandinava, de donde la Navidad actual tomó prestados algunos elementos.
Saturnalia. Pintura de Antoine Callet.
En su obra Diccionario de mitología griega y romana, Christine Harrauer y Herbert Hunger (2008) explican que la Saturnalia celebraba el fin de las cosechas; estas celebraciones eran dedicadas a Saturno, dios de la agricultura y el equivalente romano de Cronos. La Saturnalia se llevaba a cabo en el mes de diciembre, período en el cual los campesinos preparaban abundantes banquetes. Un aspecto interesante que estos autores apuntan es que en la Saturnalia las diferencias sociales se borraban; tanto ricos como pobres convivían mediante la comida, la bebida y el entretenimiento. Por su parte, Emil Nack y Wilhelm Wagner (1960) mencionan que la gente intercambiaba regalos, principalmente cirios y muñecos de arcilla, así como convivir en grandes fiestas.
Las fechas de celebración variaban; Harrauer y Hunger apuntan que en la Roma Arcaica se celebraba del 17 al 19 de diciembre, y que posteriormente se extendió a siete días, del 17 al 24. Pierre Grimal (1981), por su parte, señalaba que las celebraciones duraban todo el mes de diciembre, ya que la Saturnalia era considerada como fiesta de fin de año.
Los orígenes de esta celebración de solsticio de invierno tienen un trasfondo mitológico. Emil Nack y Wilhelm Wagner (1960) explican que Saturno, expulsado de su trono celestial por su hijo Júpiter, descendió a la tierra y gobernó la región del Lacio; el gobierno del dios de la cosecha y la agricultura era considerado un aurea aetas (época dorada), pues los hombres gozaron de paz y recibieron las enseñanzas que les permitieron construir la civilización romana.
Un aspecto a observar en esta antigua celebración pagana es el objetivo de la misma; más allá de celebrar los tiempos dorados de la humanidad, la Saturnalia promovía la convivencia social entre los distintos estratos. Manfred Lurker (1999) puntualiza la inversión de los papeles como parte de esta convivencia; era costumbre que los amos sirvieran a los esclavos y que los patricios participaran en los banquetes de los nobles.
Cortando el tronco de Yule. Ilustración del libro The Book of Days de Robert Chambers. 1834.
El Yule, o Júl en nórdico antiguo, es una de las celebraciones más antiguas del norte de Europa cuya vigencia aún continúa gracias a los esfuerzos de religiones neopaganas como la Wicca y el Ásatru.
Laia San José Beltrán (2013) señala que esta celebración era de carácter familiar y religioso cuya duración era de dos semanas; se iniciaba con un gran sacrificio (blót en nórdico antiguo) en honor a Freyr, dios de la fertilidad y la cosecha, y a Thor, dios del trueno. Posteriormente se procedía a encender un leño (yule log) que debe ser cortado el año anterior; acompañado de familiares y amigos, se recorría el pueblo con un recipiente de madera, o wassailing bowl, para brindar con los vecinos por un año nuevo próspero; y se hacía una vigilia nocturna hasta el amanecer. En la mayoría de los hogares incluso se colgaba un abeto, el cual representaba al Yggdrassil, el árbol de los nueve mundos.
El árbol de Yule es quizás el elemento más representativo de cómo una religión naciente como el cristianismo ha logrado tomar y adaptar los componentes paganos de aquellos lugares a donde se ha extendido a lo largo de los siglos, para que en períodos posteriores se convierta en un objeto decorativo dentro de la casa.
Como nos recuerda el diario argentino Clarín en su reportaje de 2016 sobre los orígenes del árbol de Navidad, solo le bastó a San Bonifacio cambiar sutilmente el significado original del árbol (representación del Yggdrassil) por un significado más acorde a los preceptos del cristianismo.
Bibliografía consultada
Diario El Clarín. 7 de diciembre de 2016. “El árbol de Navidad: de dónde proviene la tradición y por qué se arma el 8 de diciembre”. Consultado el 11 de diciembre de 2019 en: https://www.clarin.com/sociedad/arbol-navidad-proviene-tradicion-diciembre_0_rkd0BgI7e.html
Harrauer, Christine, y Hunger, Herbert. 2008. Diccionario de mitología griega y romana. España. Herder.
Lurker, Manfred. 1999. Diccionario de dioses y diosas, diablos y demonios. España. Paidós.
Grimal, Pierre. 1981. Diccionario de mitología griega y romana. España. Paidós.
Nack, Emil, y Wagner, Wilhelm. 1960. Roma. El país y el pueblo de los romanos. España. Editorial Labor.
San José Beltrán, Laia. 21 de diciembre de 2013. “Yule o la Navidad de los Vikingos”, en: The Valkyrie’s Vigil. Consultado el 9 de diciembre de 2019 en: https://www.thevalkyriesvigil.com/yule-o-la-navidad-de-los-vikingos/
Interesantísima aportación. He aprendido mucho. Me sorprende la antigüedad de estas fiestas que en el fondo tienen el mismo sentido. Mis felicitaciones por el gran trabajo que realizaste.
Un saludo 😊
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¡Muchas gracias, @volcandemorcilla!
buena labor @tipu curate
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¡Muchas gracias, @acido1120!