Tu carta, amigo mío, es un tributo muy espléndido dirigido a tu padre.

En esta carta puedo evidenciar cuánto lo amas y cuánto aprecias su apoyo y sacrificio. Déjame decirte que, en cada una de tus palabras, reflejan esa gratitud y ese respeto que sientes por él, al resaltar los momentos y esas enseñanzas que han marcado tu vida hasta ahora.

Qué maravilloso es tener un padre así.