Los tréboles de cuatro hojas, son pequeños talismanes de la naturaleza, cautivan la imaginación y se han convertido en símbolos de buena suerte en muchas culturas. Pero, ¿Qué hace tan especiales a estos tréboles? ¿Por qué se relacionan con la buena suerte?

Rarísimos de conseguir, (dicen que 1 de cada 5000). Encontrar con un trébol de cuatro hojas viene a ser como descubrir un tesoro oculto, convertirlo en amuleto nos dará ventajas en el juego del azar.

Los tréboles de cuatro hojas son tan preciados y buscados que se les ha asociado con duendes y botijas de monedas de oro enterradas. La creencia popular sostiene que, si encuentras uno, recibirás una dosis extra de buena fortuna.

Personalmente, promuevo la suerte trabajada, aquella que se construye con disciplina y esfuerzo. Es cierto que existe la suerte y los tréboles la representan de alguna manera, pero prefiero cultivar mis propios tréboles de 4 hojas.

En lugar de depender únicamente de la suerte, me empodero de mi destino y acepto las circunstancias que se presentan en mi vida.

Cambio lo que puedo cambiar y reduzco el poder de aquello negativo, mientras disfruto la emoción de encontrar de vez en cuando en mi camino esos tréboles que, para mí, abren oportunidades inmensas de vida.

Con cada paso que demos, podemos crear y construir nuestro propio camino hacia la felicidad y el éxito. El poder se encuentra en las acciones y decisiones que tomemos. Cultivar nuestros propios tréboles de cuatro hojas nos lleva a empoderarnos. (NOTA: Realmente estoy cultivando esos tréboles que ves en las fotografías)

¡No olvides cultivar tus propios tréboles de cuatro hojas y convertirte en dueño de tu destino!