Hola a todos!

^{Diseño gráfico por @hmorillo2021 en Corel Draw X5.}
Que gusto participar ésta semana en la temática planteada por la comunidad. Un tema que no deja a nadie por fuera, porque todos erramos muchas veces. Sin dudas que habrá publicaciones con enfoques bien interesantes. Por acá les comparto el mío y espero sea de su agrado. Invito a unirse al concurso a @santamorillo @ahumadaliliana y @abdullahw2. Éxito a todos!. Empecemos...

Recuerdo que cuando era niño escuchaba mucho en mi entorno la frase: “La experiencia cuesta caro” y eso llamaba mi atención, buscando el sentido de la frase porque no es que vas a un sitio y dices: “Por favor me da un poco de experiencia” y entonces pagas…se refería a la misma frase de éste concurso: “De los errores también se aprende”.

Como humanos todos estamos sujetos a cometer errores, nadie escapa a ello. El asunto es cómo manejaremos esa situación. Son tantos los errores que cometemos que desearíamos tener la capacidad de regresar el tiempo y hacer la corrección. Sin embargo, podemos hacer algo cuando se manifiestan los errores: Aprender a disculparnos si el error afecta a otros y adquirir la experiencia para que no vuelva a suceder o por lo menos, minimizar la frecuencia en un escenario parecido en que cometimos el error. Por eso es que en ocasiones oyes que alguien dice, “ya sé por dónde va esto…no terminará bien”

Como todos erramos, podemos entender lo que se siente cuando se manifiesta un error: frustración, indignación, molestia con uno mismo…y paremos de contar. Pero no es el momento para pensar que hemos fracasado, es momento de canalizar esa energía hacia algo positivo: Pagamos nosotros una consecuencia por el error, del cual aprendemos, y ese aprendizaje formará parte de nuestras experiencias de la vida que podemos usar para evitar caer en lo mismo y ayudar a otros. ¿Cómo así?

Cuando hemos aprendido de un error ya estamos entrenamos para actuar ante cierto escenario y eso nos da la capacidad de orientar a otros que vemos claramente que se dirigen justo a lo mismo que nos sucedió y si ellos aceptan el consejo, evitando el error y, luego lo agradecen…sentiremos que nuestro error sirvió de algo y eso dibujará una sonrisa que no tuvimos en el momento en que erramos. Así que no veamos los errores como fracasos.

Entonces, la frase que escuchaba de niño es muy cierta: alguien tendrá que pagar consecuencias de sus errores, que en algunos casos resulta muy costosa. Por ejemplo, una persona puede considerar que la reparación de un equipo costoso, que es solo para personal técnico, la puede realizar ella misma y como no le pregunta a nadie, termina dañándole. En otros casos es más lamentable porque puede dañar a otras personas, como consecuencia de un accidente por imprudencia.

Personalmente conocí el caso de un usuario que hizo un intercambio apurado por la plataforma de Orinoco y en la prisa escribió: ”Orinco”, perdiendo así los Steem que deseaba cambiar por moneda local. Así que cada vez que hago un intercambio recuerdo el asunto y me aseguro que esté bien escrito y, si tengo mucha prisa, prefiero dejarlo para después. Es muy desagradable autorizar una transacción y luego ver que hemos cometido un error y no hay manera de revertirlo. Aprendemos de los errores de otros.

El punto es que si uno aprende de su error y se esfuerza por evitarlo, entonces será una persona con mayor experiencia y capacitación, y al compartirlas con sus amigos y familiares estará sembrando algo muy bueno: Que otros se beneficien de errores que cometió en el pasado. Por tal razón, todos debemos estar dispuestos a reconocer que sí cometemos errores. Al socializar con otros, estaremos transfiriendo experiencias que pueden mejor la vida de otros o evitar que se hagan daño, todo gracias a que aprendimos de nuestros errores.