Me levanté como cualquier día, siempre dándole gracias a Dios 🙏, por permitirme ver este hermoso día, lleno del rocio de una madrugada lluviosa, esto es vida no me cansaré de agradecerte mi Dios. Agos mi oraciones en silencio, le agradezco al señor, por darme salud, bienestar a mi y a mis seres queridos. Momentos después me fuí al baño para mi aseo correspondiente del nuevo día, después del baño, el cepillado de mis dientes, me tomé un vaso con agua natural.

Hora de hacer, café, desayuno, nada mas bueno que tener el pan de cada día. Para mí Dios les proporciona por medio del trabajo, honesto y productivo, que desvengan mis hijos, ellos que de alguna manera me ayudan; porque si fuese por la pension que me da el gobierno, hace rato ya fuera sucumbido. Pero gracias a Dios que tengo buenos hijos, por eso Dios escucha mis oraciones, para que les dé salud y bienestar, para, que ellos vivan bien, no les falte el pan de cada día.

Mi día comenzó después del desayuno, consistió en preparar la lavadora, buscar la ropita sucia que tenía, para lavarla temprano, aunque el día estaba nublado igualmente me dedique a lavar sin contratiempos de los famosos cortes d luz. Cuando el día transcurría rápido, ya el sol empezó a calentar más fuerte. Terminando tome un balde negro, saqué la ropa que ya estaba lista y enjuagada, para luego tenderla en la cuerda.

Hora de almorzar me preparé una comida rápida, huevos con arroz., mientras se cocinaba el arroz, prepare los huevos, como ya había terminado de lavar, me puse a preparar el agua con el trapeador para limpiar la pequeña sala de mi casa, eso fué, después que terminé el reposo del almuerzo.

Después de haber culminado las labores, que me tocó hacer en este día, me dí un rico baño, me vesti y me fuí para la capilla de mi comunidad, para estar en la presencia de Dios en la santa eucaristía, agradecerle por el bonito día que, culminé y reforzando mi fé🙏, que tanto necesito por mi familia, por mi amada Venezuela.