Anastasia

Durante esta nueva etapa de transición en su vida ella opto por actualizar sus conocimientos e indagando se dio cuenta del maravilloso mundo de las Blockchain y decidió estudiar sobre ese mundo para innovar y reforzar sus conocimientos. Ella se sentía inmensamente feliz porque había encontrado la solución de sus problemas de una forma muy diferente a su rutinario estilo de trabajo y con un resultado prometedor, tentativo y muy práctico.

Llega el momento de su liquidación y con ese dinero decide invertirlo en la remodelación de una habitación de su casa para convertirla en una pequeña oficina de trabajo, además compro una computadora nueva, un celular y cancelo cursos online sobre el interesante tema de las criptomonedas para ampliar sus conocimientos.

Anastasia es una mujer muy inteligente y aplicada, ella en poco tiempo se preparó muy bien a tal punto que comenzó a invertir en criptomonedas que aún estaban nuevas en el mercado virtual, también empezó a trabajar en plataformas virtuales donde invertía gran parte de su tiempo y conocimientos los cuales eran remunerados; pasado un buen tiempo ella vivía prácticamente de esa nueva modalidad de trabajo, sus ganancias aumentaban progresivamente y cada vez que requería simplemente vendía monedas virtuales y satisfacía sus necesidades. En ocasiones el valor de la moneda bajaba, ella sabía que ese mundo era muy cambiante por lo que a veces sus inversiones arrojaban perdida ya que bajaba muchísimo el valor de la moneda y su inversión era superior, sin embargo ella mantenía la calma ya que podía recuperarse en poco tiempo.

Un día Anastasia decidió contarle lo que estaba haciendo a su amiga Fabrizzia y del mismo modo le revelo la clave secreta de la plataforma donde trabajaba. Esta al ver las ganancias de Anastasia se llenó de mucha ira pues no soportaba que a su amiga le estuviera yendo tan bien por lo que decidió estafarla quitándole parte de su dinero, rápidamente la billetera virtual de Anastasia comenzó a disminuir rápidamente con grandes sumas de dinero, no obstante, decido cambiar todas sus claves de seguridad porque se había dado cuenta de la estafa que su “amiga” Fabrizzia le había hecho.

Desde ese entonces Anastasia comprendió lo delicado de confesar sus contraseñas y hasta la fecha no lo ha vuelto hacer por lo que no ha tenido más desfalcos, en la actualidad ella agradece a estas plataformas que le permitieron seguir trabajando sin importar su edad y a vez la ayudan a continuar innovándose e indagando en este gran mundo de las Blockchain.