Erase una vez un joven muy curiosos y soñador que día tras dias imaginaba historia deslumbrantes de fantasías creadas solo para llamar la atención de sus padres. Una noche al asomarse por la ventana de su cuarto observó grandes esferas girando en el cielo y de inmediato invento su historia sobre las esferas brillantes que resplandecían en el cielo.

Al día siguiente contaba entusiasmado su historia a sus padres quienes en esta ocasión admiraban la creatividad del niño y emocionados le aconsejaron escribir su historia pues era tan original que pensaron que podían sacar provecho de la habilidad que poseía el niño para realizar sus cuentos. El niño siguió el consejo pero indico en la parte final del cuento que era basada en una historia real, sus padres reacciónaron de inmediato y pidieron eliminar esa locura del cuento.

El niño triste al ver que no le creían no quiso volver a escribir y pasaba los días reprimiendo sus emociones y ocultando sus grandiosas habilidades. Los días pasaron muy rápido y el niño se convenció de que nada había sido real, pensó que había sido parte de su imaginación y acepto vender sus historias como ficticias. En poco tiempo el niño se volvió famoso pues sus historias llamaron la atención de toda la comunidad quienes admiraban su ingeniosa creatividad.

Los años trascurrieron y su prestigio creció al igual que sus historias sobre objetos voladores en cielo, hoy en día todos piensan que las historias se basaron en hechos ficticios cuando en realidad las historias nacen cada vez que el autor se asoma a su ventana y ve las grandes esferas moverse en el cielo como un espectáculo dedicado a un sólo espectador.

Espero que mi historia haya sido de su agrado, gracias por el apoyo recibido.